- No tengo excusa Lauren. Aunque me odie por no poder darte una explicación aceptable. Solo... tuve que hacerlo. Fui una cobarde, no pude. Me sobrepaso la situación. Creí que sería cuestión de tiempo, pero cuando me di cuenta de lo que hice no tuve el valor suficiente para volver y hacerme cargo de mi error.
Mi corazón se termina de romper en pedazos ante esa confesión mientras veo como el gran amor de mi vida rompe en llanto.
- ¿Me hablas en serio?
Pude imaginar cualquier cosa. Pero no esto.
- Lo siento, Lauren - dice sollozando - Me odie, y me odio aun. Lo juro, pero... no pude. No tenía a nadie más, nadie que me diga que hacer. Mis padres solo...
- ¿No tenias a nadie? ¡Camila maldita sea, éramos una pareja! ¡Me tenias a mí!
- No lo entenderías Lauren..
- Bueno, veo que eso es lo que significaba para ti - digo amargamente mientras algunas lagrimas comienzan a caer - Mira Camila, a mi podías hacerme lo que sea. Podrías haberme dejado cuando se te dé la gana. Pero... mierda - digo refregándome la cara. No quiero nombrarla - ¡Dejaste un hijo aquí Camila Una personita tuya y mía que no fuiste capaz de cuidarla cuando más te necesitaba!! ¿Todo para qué? ¿Para irte con otra persona? ¿Una conquista pudo más que tu propia familia?
Exploto.
No lo puedo evitar.
No si se trata de mi hija.
- No Lauren , no es como te imaginas. Fue muy difícil para mí hacerlo. Vivimos una vida juntas, no hay nada que no haga que me recuerde a ti. Estabas tan feliz que no quería traerte más preocupaciones pero después... después de todo lo que vivimos me sentía incapaz de poder hacerme cargo de otra vida.
- ¿Te das cuenta verdad? Ni siquiera eres capaz de nombrarla. ¿Como pude haberme equivocado tanto contigo? - digo parándome.
- No pienses así... Mis padres dijeron...
- ¿Que no piense que? - le enfrento - ¿Pides compasión cuando tu ni siquiera la tuviste con tu propia hija? ¡Camila dejaste una bebe de tan solo días de vida sola! En que estabas pensando en el momento de concebirla? ¡No soportare que me digas que fue un error, porque lo planeamos durante demasiado tiempo!
- ¡Nunca diría que un hijo fue un error! No me sentí lista. Lauren, ¿olvidas que antes de Sophie perdimos un hijo? ¡Estaba aterrorizada! No sabía qué hacer. Tampoco quería negarte la posibilidad de tener un bebe. Lo quería, pero en cuando comenzaron los problemas... Me asuste, no podía soportar la idea de perder algo tan importante otra vez. La niña... lloraba tanto, y... dios fue horrible verla así que hui - dice casi en un susurro.
Mis lágrimas brotan sin parar por mi rostro. Inconscientemente miro el tatuaje en mi muñeca.
Mis dos estrellas. Mi papa, y mi dulce bebé.
Aquel hijo que perdimos la primera vez.
Dos adolescentes inconscientes que se sometieron a un tratamiento de fecundación in vitro. Exitosamente, Camila se embarazo gracias a que uno de mis primos lejanos nos dono su esperma para poder concebirlo.
Todo iba bien, pero... dios me duele el cuerpo de solo recordar el momento en que internaron a Camila de urgencia por fuertes dolores.
El bebe estaba a dos semanas de nacer. Iba a ser un niño. Nada se pudo hacer. Murió a causa de un pico de presión de la mama.
Fue uno de los dolores más fuertes e inexplicables que tuve que soportar en mi vida, con tan solo 21 años.
- ¿Como fuiste capaz? - pregunto con rencor - ¿Como podías dormir sabiendo que había una niña que necesitaba a su mama? Había noches donde lo único que hacía era llorar. Días en los que la leche de formula no era suficiente. ¡Ella te necesitaba!¡ Y tú no fuiste capaz de estar con ella. Todo por tu estúpido acto de cobardía!!
- Laur por favor, no sigas - susurra.
- No, ¡ahora vas a tener que escucharme! ¿Qué hay de mis miedos? ¿Que había de mi Camila?¿ De lo que yo sentía? De repente me encontré sola en la habitación de un hospital sin la menor idea de cómo cuidar a un bebe. Pero tuve que hacerlo, porque mi amor por ella fue más grande que el mío. ¿En serio puedes vivir sabiendo que abandonaste a tu propia hija??
- ¡Basta Lauren! - dice parándose - Soy una persona deplorable. ¿Estas contenta con eso? ¡Me odio y jamás me lo perdonare! No tengo excusas, lo hice y no puedo remediarlo. Pero te diré que no hubo día en que no pensara en ella, en ti. En lo que hubiese sido de nosotras. ¡Mierda, Lauren, cuando supe que este era tu estudio miraba desesperadamente cada foto pensando en que podía ser ella! ¡Es mi hija! Lo sé, ¡pero no pude! Nuestro primer hijo murió por mi culpa, y ella al nacer supieron que había heredado mi enfermedad respiratoria, ¿Que iba a darle? Me carcome la culpa. Pero cuando supe lo que había hecho era demasiado tarde.
- Nunca me fui, sabias perfectamente donde estaba...
- ¿Y que iba a decir? "Hola Lauren, fui una niña cobarde que no fue capaz de hacerse cargo de sus actos"?
- Lo hubiese entendido, ¡te hubiese ayudado Camila! ¿Por quien me tomabas? ¿Tan poco significábamos para ti?
- No es así... eras mi mundo Lauren, todo giraba a tu alrededor.
- Bueno, lo lamento, pero mi mundo gira alrededor de mi hija ahora.
- Lauren...
- Vete Camila.
- Laur...
- ¡Vete!! - le grito - Hace dos años te fuiste sola. Ahora te ahorrare el mal trago y la que te echa soy yo. ¡Vete! Continua con tu perfecta vida de niña mimada, vete y continua como hasta ahora. Yo seguiré con mi vida, con mi bebe, mi familia y la gente que no será capaz de abandonarnos mas allá de las miradas de los demás. Vete y continua con tu solitaria vida de mentira la cual estas acostumbrada a vivir- le digo completamente fuera de mi.
Ella me mira y finalmente desiste.
Limpia sus ojos, inspira y deja salir el aire intentando reponerse.
Abre su cartera y toma su broncodilatador y aspira 3 veces intentando calmar su respiración. Esta nerviosa.
- Entenderé todo lo que necesites decirme. Me odias y me lo merezco. - busca en su cartera y empuja una tarjeta sobre mi mesa - No voy a irme. No así. Aun tengo muchas cosas para decir - dice parándose.
- No me interesa escuchar nada más.
- Te daré tiempo. Sé que tarde o temprano me escucharas. Aunque no seas capaz de verlo ahora. Eres la persona con el corazón más grande y hermoso que conocí en mi vida, y no podre vivir si no tengo tu perdón.
- ¿Y que pasa con Sophie?
- Si tengo la posibilidad... - dice luego de pensarlo unos instantes - Hablaré con ella cuando sea el momento.
Es increíble que sienta tanto rechazo hacia la mujer parada frente a mí. Jamás imagine que iba a decepcionarme tanto, tanto de ella.
- Espera - le digo antes que se vaya.
Tomo el valor necesito y abro el cajón de mi escritorio.
- Toma - le digo entregándole una foto.
Ella temblorosa la toma y su gesto se contrae en el momento en que la mira. Sus lágrimas comienzan a brotar otra vez mientras se lleva la mano a su boca.
- Ella merece que tú la conozcas. Lo hago para que veas lo que te perdiste a partir del momento en que cruzaste la puerta de aquel hospital. Me decepcionaste Camila, pude imaginar cualquier cosa, una enfermedad, incluso tu muerte. Pero no esto.
- Ella... ella es...
- Hermosa. - concluyo.
- Lo siento - dice luego de tomarse su tiempo para ver la foto - No sabía lo que hacía.
- Quédatela - le digo cuando me la ofrece - Tengo la bendición de que esos preciosos ojos sean lo último que vea al dormir y lo primero al despertar. No necesito de una foto para conocer a mi propia hija.
Sin decir más. Ella da media vuelta y se va. Cruza esa puerta como lo hizo hace un tiempo. Con la diferencia de que esta vez soy yo la que lo decidió. Y no hay vuelta atrás.
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Take me home- Camren (Parte 1)
Romance-Tengo demasiado dolor dentro de mi, no sabrás controlarme- decía Lauren sobre los labios de Camila Cabello, esos labios que tanto deseaba besar pero que tanto miedo le producían.... - Te prometo que cuando sienta que te estoy dejando de amar, recor...