Día 15

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Jin iba ensimismado en un libro romántico. Sí, el jamás había leído aquello alguna vez pero sólo sabia que le estaba encantado. ¿Tan mágico era besar?. Pues ahora mismo tenia esa duda encajada hasta lo mas profundo en su mente. ¿El roce de labios era así de mágico?.

Se sentó en la grada, aun completamente atontado a medida que los personajes se abrazaban y se acercaban.

—¿La mecánica de besar?. —Escuchó la ronca voz del chico provenir de su lado.

El cerró el libro y lo observó.

—Si... —Sentía la imperiosa necesidad de preguntarle porque se notaba que el chico tenía algo de experiencia al respecto. —Dime...

—Pues pregunta.

—¿Q-que se siente b-besar?.

Rápidamente se hizo bolita en el asiento. Tapando su cara entre sus piernas.

—¿Nunca has besado?.

—N-no... Nunca...

Y escuchó, juró por todos los dioses que había escuchado un “¿Y quieres intentarlo?” pero eso no pasaría. El chico junto a él era solo un desconocido más. Levantó la cabeza y vio al tostado sonreír avergonzado.

—Pues se siente... No lo se, creo que tampoco he besado por cariño... Sólo lo he echo por... ¿Calentura?.

—Oh, ¿Y eso es malo?. —Jin estiró todo su cuerpo.

—Eso tampoco lo se. —El pelimorado rascó su nuca. —He disfrutado de la vida, sí, pero no como se debería.

Y justo en ese instante el bus del pelimorado llegó y desapareció tras de él meciéndole la mano.

Un encuentro -no tan- clichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora