Simon
Regresé a la oficina después de dejar mis cosas en lo que sería mi nueva casa, los pensamientos con respecto a Adele y lo que pasó anoche no dejan de atormentarme. Pero tengo que dejar esos pensamientos aun lado y concentrarme en recuperar mi empresa. He despedido a Rob como vicepresidente de la empresa, aun no entiendo como pude ser tan estúpido en confiar en él, de confiarle todo sobre mi vida tanto profesional como personal...jamás me imaginé que el fuera capaz de traicionarme, de darme una puñalada... él era mi amigo...mi hermano. Sacudí mi cabeza y me coloqué los lentes, encendí el computador de mi oficina y comencé a revisar mi correo, tenía que haber algún proyecto en el cual pudiera invertir para empezar de nuevo. Tocaron la puerta y yo ordené que pasaran.
—Permiso Sr Konecki —dijo Elena y pasó, me puse en disposición de escucharla —Es para reportarle que varias compañías...pues...han retirado sus proyectos de la empresa —dijo balbuceando las palabras y sentí como todo mi mundo se derrumbó.
—¡Maldita sea! —grité golpeando el escritorio —¿Cuántas empresas retiraron sus proyectos? —pregunté con la respiración pesada, revisó nerviosa los documentos que traía en su mano, aclaró su voz y hablo.
—Habían diez proyectos en proceso y... —me miró y luego volvió a sus documentos —Todos los retiraron —dijo con voz temblorosa y lo llevé mis manos a la cabeza. Esto no puede estar pasándome, no puede ser.
—Sal de la oficina, por favor —le pedí lo mas calmado que pude, ella no dijo una sola palabra y salió. Drené mi rabia con la oficina, tiré todo al suelo lleno de enojo, mi vida se estaba viniendo abajo y no encontraba manera de superar esto. Mi familia...mi trabajo...todo.
Salí de la oficina para ir a almorzar, pero me detuve al ver que la puerta de la oficina de Rob estaba abierta, entré sin pensarlo dos veces, lo vi recogiendo sus cosas, quería romperle la cara.
—¡Eres un desgraciado! —dije con odio el volteó a verme y sonrió a medias.
—Ay querido Simon, ¿Como pasan las cosas, no? De amigos a enemigos jaja.
—Me las vas a pagar maldito desgraciado —dije entre dientes muy cerca de su rostro.
—A ver ¿Cómo vas a hacerme pagar? ¿Tienes pruebas? —preguntó en tono soberbio, dos segundos mas y le rompo la cara.
—¡Voy a hacer que te hundas en la cárcel maldito infeliz! —grité apretando mis puños.
—Como digas —dijo restándole importancia, terminó de recoger sus cosas y se dirigió a la salida, antes de salir agrego —Voy a quedarme con todo lo tuyo...todo —me fui sobre él, pero él fue más astuto y salió corriendo, como la rata que es. Maldigo el dia en que lo conocí.
Adele
Hoy todo sale mal, hoy todo me parece que está mal. Los ensayos se han repetido más de lo normal, me equivoco en las canciones, en las notas, en todo. Tomé un descanso y me fui directo al camerino, necesitaba descansar.
— ¿Estas bien? —preguntó Jonathan y yo solo asentí mientras buscaba algo... no sabía que buscaba solo buscaba algo. Me senté en el sofá y luego me acosté boca arriba, pensando en todo y en nada a la vez. Las lágrimas se hicieron presentes otra vez, no pude más —Cariño...—dijo Jonathan tomándome de la mano.
—Todo se acabó, Jonathan...todo —dije en pleno llanto.
— ¿Hablas de Simon? —preguntó y yo asentí —Lo siento mucho, cariño...¿Quieres un tiempo a solas? —asentí y el salió del camerino, fue allí cuando desahogué todo el dolor que sentía en mi pecho. Me sentía decepcionada, desilusionada. Pensé que todo podía ser para siempre pero me equivoqué de la forma más estúpida. Jamás pensé que esto podía pasarme, de que Simon algún día me abandonaría... de que nos abandonaría. Tanto que hemos pasado juntos... tanto que hemos luchado, construimos tantas cosas juntos y ahora todo se fue al caño...me siento tan frágil ahora... siento como si todo hubiera acabado para mi... no tengo ganas de salir y sonreírle a miles de personas fingiendo que todo está bien...cuando es todo lo contrario. Mis ojos se hicieron pesados por el llanto...los cerré poco a poco y el sueño llegó a mí.
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When We Were Young 2
Fanfiction¿Seremos capaces de darnos cuenta del error que cometemos a tiempo? ¿Y si es muy tarde? ¿Y si el tiempo pasó y ya no hay nada que hacer? No lo sabemos, el futuro es incierto y hay acciones y palabras que el tiempo quizás nunca borre, o quizás si...