❛ You call me MONSTER ❜［CHENMIN］

Capítulo 8. - Minscota.

ㅡLamento no haberte mandado un mensaje antes, gatito. No sabes lo que he tenido que pasar últimamente.

ㅡNo te preocupes, Lu.

MinSeok se encontraba con su amigo en una pequeña y tradicional cafetería lejos de la ciudad. LuHan sin duda sabía escoger bien, ambos ya tenían una bonita taza blanca de flores con café recién hecho, y Dios, podía jurar que era la mejor bebida de todas, no había nada que disfrutara más que una buena taza de café caliente.

ㅡ¿Y entonces...? ¿Con qué querías que te ayudara? ㅡ. Cuestionó el más alto.

Nunca fue bueno pidiendo favores, nunca. En su vida no ha tenido realmente la necesidad de pedirle apoyo a alguien, excepto a su madre a los 6 años para que lo ayudara a atarse las agujetas o a alcanzar el cereal de la alacena.

ㅡAh, eso... es que yo...ㅡ. Se removió en su propia silla, sus manos estaban hechas puños encima de sus muslos y él se mantenía mirándolas como si fuesen la cosa más interesante del mundo.

ㅡ¿Qué es? Dime, dime ㅡ LuHan no estaba ayudando demasiado. Se inclinó sobre la mesa para que su rostro quedara más cerca del suyo, provocando que se alejase y encogiese. Además, la emoción de su voz lo hacía arrepentirse de hablar.

ㅡB-bueno, eh... me despidieron del trabajo y...

ㅡAhh. Entonces tú ㅡ. Le picó el pecho con su dedo índice sin dejarlo terminar ㅡ Quieres trabajar para mí ㅡ Se señaló a sí mismo con cierta burla ㅡ ¿Es eso, Minnie?

¿Trabajar para él? Más bien planeaba que lo ayudara a buscar empleo, pero eso era porque no tenía idea de que LuHan era dueño de una empresa o algo así. En cualquier caso, sería mil veces mejor tener a su amigo de jefe que a un desconocido. Para Min esa era la parte más difícil de todas, ganarse a su nuevo jefe y lidiar con sus compañeros por eso estaba tan cómodo en el restaurante, ya que no había más empleados y el dueño lo quería pese a que pareciera que no.

ㅡSí. Si puedes contratarme estaría muy agradecido ㅡ Murmuró sin levantar la mirada.

ㅡ¡Perfecto! Entonces ahora eres mi mascota.

ㅡ¿Eh? ㅡ Su expresión reflejó sorpresa y quizás un poco de miedo.

ㅡEso mismo. Oficialmente eres mi adorable gatito ㅡ Le despeinó el cabello ㅡ Tú sólo deberás ocuparte de maullar, comer, dejarte mimar, y claro que también podrás hacer algunas cosas de humanos.

ㅡ¿Qué? ㅡ. No acababa de creerse lo que le estaba diciendo, le parecía ridículo, una broma, raro, era simplemente... digno de LuHan. ¿Estaría en verdad dispuesto a caer tan bajo?

ㅡ¿Sabes qué cosas de humanos sí podrás hacer Minnie? ㅡ. Cuestionó acercándose a él, poniendo su diestra sobre la mesa para apoyarse, y en vista de que el bajito se estaba alejando, con su zurda inmovilizó su nuca y continuó aproximándose hasta que sus rostros estuvieron a pocos milímetros de estamparse.

ㅡ¡¿E-eh?! Lu-LuHan ㅡ Su voz temblaba casi tanto como su labio inferior, y el aliento con olor a café que desprendía el adverso al hablar estaba golpeándole justo por sobre la nariz.

ㅡPodrás besar, abrazar, acariciar, por supuesto que sólo a mí. Y también podrás... ya sabes, entrar en celo para que yo...

ㅡ¡LuHan ya basta! ㅡ Chilló empujándolo con todas sus fuerzas de vuelta a su asiento. Sus mejillas estaban completamente rojas y por unos segundos pensó en salir corriendo de ahí. No podía creer el tipo de persona en el que se había tornado su amigo, era un pervertido, un aprovechado, un... un hombre de mal.

ㅡWow ㅡ LuHan estalló en risitas tontas y se sostuvo el estómago, limpiándose una lagrima falsa ㅡ ¡Esa es la actitud, Minnie! Tienes que ser rudo, fuerte, invencible ¡Nunca debes dejar que nadie te intimide! Ni siquiera yo que soy tan varonil y grande, ah, y apuesto ㅡ. Se pasó una mano por el cabello y se acomodó mejor en la silla ㅡ Gatito yo sólo estaba bromeando. En realidad, sí puedo contratarte, claro que no para eso, pero necesito que seas así de valiente como acabas de serlo, ¿Sí?