Hey, castaña.

U N O

Farkle es un chico de 18 años que trabaja lavando autos, para ayudar a su padre con los pagos de la casa, no es un trabajo que él adore demasiado, él ama la fotografía y escribir.

Tuvo una semana muy agotadora, pero hoy viernes, fue muy cansador para él, no tenía un humor admirable.

—Zay, no aguanto mas estar aquí, esto es agotador, e insoportable.—Dijo Farkle, secándose su sudor. 

—Lo es, pero al menos tú ya terminas aquí. Te recomiendo a que te relajes en la cafetería que hay por ahí—Respondió Zay señalando una cuadra.—Dicen que tienen las mejores bebidas.—Continuo, y el castaño asintió y se despidió.

Zay es un amigo de él, y compañero de trabajo. Se conocían hace varios años y se podría decir que él le recomendó ese trabajo. 

El castaño no conocía esa cafetería, si escuchaba hablar de ella y sus geniales batidos, pero si le preguntaran donde queda, no tenía ni idea. 

Por su suerte la encontró, tenía un cartel gigante que decía "Topanga's" Nombre raro para sus oídos. 

—Hola, ¿Me gustaría pedir un batido?—Le dijo el chico a una señora de unos 30 o menos de edad. 

—Claro cielo, siéntate donde estés cómodo, y en un rato pasaran por ahí a tomar el pedido. —Él asintió y se alejo.

Él se sentó alado de una ventana, y a los pocos minutos se acerco una chica castaña, tal vez de su edad o un poco menos a tomar su pedido, él se quedo contemplando su belleza. 

—¡Hola! Bienvenido a Topanga's—Dijo la chica tomando su libreta y dándole una sonrisa—¿Que deseas? 

—Un batido, podría ser de ¿Frutilla?—Respondió el castaño y la otra asintió. 

Él no dejaba de mirarla, era demasiado linda, alta, tal vez un poco mas que él, castaña, pelo largo y brilloso, una voz dulce, y una sonrisa preciosa.

Él estaba en su mundo cuando volvió la chica y le entregó su pedido. 

—Que lo disfrutes.—Respondió esta, y él no contestó.  

El batido estaba genial, pero él aún no dejaba de mirar a la chica, parecía esos niños que se quedan admirando los dulces que les gustan por muchos minutos. 

Al notar que se había terminado su batido, recordó una historia de wattpad que leyó una vez. Trataba sobre que la protagonista principal le mandaba notas a su crush, obviamente ella no era su crush aún, ni él un personaje de wattpad, pero sabía que volvería a este lugar seguido y la vería.

Le agradecería a Zay mas tarde por mandarlo ahí.

Tomó una de esas servilletas que están en la mesa y escribió.

Al terminar, dejó la nota debajo del vaso y con la propina al lado.

—Aquí te dejo la propina, gracias!—Dijo el castaño y salió del lugar.

—¡Esta bien!—Respondió la castaña, aunque él no la escucho. 

Ella se acerco a la mesa y agarró la propina, logró notar que había una servilleta escrita y la agarró también. 

"Hey, castaña.

Muchas gracias por el batido, uno de los mejores que he probado (Y mira que he probado muchos)

Espero que nos veamos pronto.

-El batido de frutilla."

Rió y la guardó en su uniforme.

N/A

Okokok, nueva historia.

Los chicos(Riley y Farkle) no se conocen acá, y no tienen la misma edad de la serie.

¡Espero que les guste!