Casados por Accidente

14. ¿Que quieres?

Llegue tan de noche que no tuve ganas de pelear con Jared cuando lo vi sobre su cama, así que me recosté sobre el sofá.

Salí del baño cambiada, esperaba que Jared se despertara para ir a la reunión de parejas que era hoy, pero el no despertaba, así que decidí ir sola

- Hola pequeña- dijo Nidia saludando al igual que su esposo - ¿Donde está Jared?-

- no se- negué - creo que fue al baño- en eso alguien tomó mi mano, haciendo que yo lo vea.

Y ahí estaba, el saludo con Nidia y luego con su esposo, me dio una sonrisa falsa que se notaba hace miles de distancia

- ¿creíste que no vendría?- susurró Jared en mi oído, sonaba molesto

Yo debería estar molesta por como me a tratado, no el.

- suéltame- dije tratando de quitar su mano de la mía pero el la apretó más

- no lo creo cariño, debemos aparentar ser felices ¿lo recuerdas?- dijo fingiendo estar feliz

Me llevó hacia adentro, nos sentamos y aparente sonreír. La encargada llego y empezó con su típico discurso.

Todos empezaron a gritarse ordenadamente, la actividad consistía en que cada pareja debía decirle al otro lo que pensaba, pero primero eran cosas malas y luego buenas.

Nuestro turno había llegado, tenía frente a mí a Jared, y no sabía que decirle, pero al parecer el si.

- Irritante- dijo mirándome fríamente, abrí mis ojos molesta

- odioso- él negó - frío, malo, mentiroso- ahora el quería hablar

- miedosa, tímida- cada cosa que decía de mi me hacía enojar - mentirosa, farsa- se levantó y ahora sí parecía muy molesto - ¡todo esto es una maldita mentira!- me dejo sentada con una lágrima en el ojo, y se fue hacia afuera.

Todos me miraron sorprendidos y en ese momento empece a llorar, no podía creer que él me haya gritado al frente de tanta gente, y creo haberle visto las intensiones de golpearme

- bueno... eso es retener las cosas- dijo la encargada, la mire y no pude soportar llorar más, así que salí llorando por la puerta.

Escuche a Jared llamarme pero ahora no quería verlo, no buscaba hacerlo, así que corrí para que no me atrape.

Una vez alejada, y miles de cuadras lejos de el, empecé a descansar, mi corazón latía fuerte, y mi pecho subía y bajaba.

Por mi mente solo cruzaba la cara de Jared enfadado, y me remordía el corazón, yo debía haberle gritado todo lo que me dijo pero ser tímida no me lo permitía.

Llegue caminando a casa de Anto, y por suerte ella me abrió la puerta de su casa, no estaba dispuesta a verle a su hermana, no en este momento y odiaría si me viera como lo estoy

Anto me dejo sentada en su cama y fue hacia la cocina por café para calmarme, de mis ojos solo salían lágrimas, ella entro con un tasa y me la entregó

- te tengo que decir la verdad- dije bajando la tasa de mis labios

- ¿que?- ella cruzo sus pies sobre la cama y empezó a escuchar todo lo que había guardado

- ... perdón por no contarte la verdad- dije suspirando

Las lágrimas ya no salían, y estaba algo tranquila, pero ahora no sabía si Anto me perdonaría por no decirle

- ¡que loco!- dijo gritando - o sea ustedes primero se casaron y ahora parece que se están ¿enamorando?- asentí, pero no entendía el "están" porque aquí solo era yo - ¿por qué no me lo dijiste?-