Lauren llegó, al fin, al terminal.
Pagó el taxi hacia el local de su tío.
Sin duda, aquella aventura no le había salido nada barata.
Estaría en problemas, eso de seguro.
Se bajó frente al local.
Estaba cerrado, extrañamente.
Estaba dispuesta a tocar la puerta, pero recordó que su tío le había facilitado un juego de llaves.
Abrió la puerta junto al gran portón de metal.
¿Estaría allí?
Estaba todo apagado.
Divisó la escalera hacia el segundo piso, donde se encontraba su cuarto.
Corrió hasta allá, pero una luz lo detuvo.
Las luces de tubo del local.
Miró al lado, su tío acababa de encenderlas.
-¿Dónde estabas?- se cruzó de brazos
Lauren tragó saliva y se giró hacia él, tiesa como tabla.
-Yo... em...-
-¡Es broma, mija!- caminó con un extraño ritmo que lo caracterizaba hacia él, se puso a su lado -¿Ves? ¡Te divertiste tanto que volviste al otro día! Espero que no mucho
Lauren se puso roja.
En cosa de segundos, esa luz en su interior se apagó.
Volvió la Lauren de siempre.
-Si, estuvo bien, no pudo hablar de eso.-
Luis rió.
-¡Ja! Claro, entiendo, cosa de chicas, jóvenes.-
-Pero asegurame que sigues siendo "virgen" ¿Si?-
-Sí.- contestó nerviosa, tratando de evadirlo.
La agobiaba.
-Bueno, te creo.- levantó el dedo índice ante sus narices.
-Estoy cansada, voy a tomar una siesta.-
Se zafó y de inmediato fue –casi corriendo- a su cuarto.
Cerró la puerta.
Al fin, su cama propia.
Dormir con Camila había sido extremadamente incómodo.
Aunque al fin y al cabo casi ni lo había notado
Había dormido poco, estaba cansada.
Sin darse cuenta cayó en un sueño profundo, ahí mismo.
Pasó el tiempo.
Segundos, minutos, horas.
Y entonces, un extraño ruido la fue despertando de apoco.
Creyó que estaba soñando, pero no, los ruidos eran reales.
Como unos golpes.
Abrió los ojos, todo nublado,
Se los refregó con los puños y pudo ver mejor.
Otro golpe, otro más.
Venía de la ventana.
Fue hacia ésta y observó.
Efectivamente, estaban tirando piedras.
Dylan y Tobías.
Los recordó, recordó que por culpa de ellos había caído en lo que había caído.
Por un lado estaba furiosa con ellos por meterla en problemas y abandonarla, pero otro estaba agradecida.
El primo de Camila, claro.
¿Lo era de verdad?
¿Por qué no le había preguntado sobre Dyian?
Pero bueno, no lo hizo y no había vuelta atrás.
Abrió la ventana y se asomó.
-¡Ya! ¡Ya lograron despertarme!- gritó desde arriba.
Los dos chicos se echaron a reír.
-¡¿Lauren, no?!- gritó Dylan . -¡Ven, baja, necesito hablar contigo!-
¿Otro lío más? No, no se le apetecía.
-¡No tengo nada que hablar contigo, váyanse!-
Dylan rió más fuerte.
-Dejame en paz.- bajó un poco el tono.
-¡Deja los dramitas para después! ¡Esto es urgente!- insistió, calmando un poco las carcajadas, pero claro, Tobías, que ni hablaba, seguía riendo con la misma intensidad.
Estaban mal, en todo sentido.
¿Debía bajar o no?
Se metería en problemas, eso seguro.
Pero era Dylan , el primo de Camila.
Y de verdad, a una gran parte de ella le importaba lo que tenía para decir.
-¡Ya voy!- gritó para abajo y cerró la ventana.
Una parte de ella sentía que se acababa de meter en un gran lío, pero era más fuerte la que lo incitaba a escuchar a Dylan.
Al bajar, su tío Luis estaba tras la caja registradora.
De inmediato le pegó la mirada.
-¿Estuviste durmiendo? Porque tenes una pinta...-
-me están buscando afuera, voy a hablar con ellos.- interrumpió, no quería oír un solo comentario suyo.
Salió, sin que le haya dicho que sí.
Dylan y Tobías seguían allí.
-¿Qué quieren?- preguntó con mala onda.
Dylan dio un paso al frente.
-Primero, una disculpa, aunque en realidad tu te alejaste de nosotros, pero bueno.- se encogió de hombros. -Perdón de todos modos, si por nuestra culpa te gastaste la plata que te da tu mamá en volver.-
Tobías se reía tras de él, su risa era irritante.
-Esta bien, ¿Lo segundo y te vas?-
Dylan hizo un gesto de ofendido, pero prosiguió.
-Quería preguntarte cómo estaba mi primita querida.-
Lauren, en pocos segundos, procesó todo.
¿Debía contarle que salvó a Camila de un gran aprieto?
¿Qué se quedó con ella esa noche?
-¿Por qué lo preguntas?-
-Porque la última vez que la vimos estaba contigo ... ¿O no? ¿O no sabes nada más?-
Reflejaba una mirada maliciosa, aquello no llevaba a algo bueno.
-Sí, sí estuvo conmigo. Linda casa tienen allá.-
Lo dijo.
Lo había dicho sin rodeos.
Dylan quedó casi con la boca en el suelo.
-¿Con... contigo ...?-
-Sí.-
Aquello se volvía incómodo.
Él chico, de repente, desató su ira.
-¡¿Te acostaste con mi prima y me lo dices en la cara?!-
Lauren se asustó por su reacción, se echó para atrás bruscamente.
-¡Hey, hey, no!- intentó calmarlo -¡No me acosté con tu prima!-
Dylan retrocedió.
-Ah, lo siento.- dijo, en un tono no muy convincente.
Lauren se estiró el suéter con las manos, acomodándoselo.
-No importa, tranquilo, ella está bien.-
-Bueno, ya vas a tener tiempo para contarme con más lujo de detalles todo cuando nos acompañes a mi y a Tobías al cerro.- puso una mano en su hombro.
¿Había dicho lo que había oído?
-¿Al cerro?-
-Sí, Toby y yo vamos a diario.-
Tobías claro, no decía nada, le dejaba el trabajo verbal a su amigo.
-Si quieres saber más que te cuente tu prima, no voy a andar de chismosa.-
Se dio vuelta, dispuesta a irse, pero Dylan lo tiró de vuelta del brazo.
-Bueno, ya, no me cuentes nada, pero acompañanos al cerro al menos, no seas mala onda.-
Buena idea no era, de eso estaba segura.
Pero estaba harta de ser la Lauren de siempre.
Quería ser como había sido con Camila, lo había disfrutado.
Al fin y al cabo ¿Qué cosa tan mala podía pasar?
-Esta bien, dejame subir, cambiarme de ropa y vamos.-~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Holaa, disculpen si este último tiempo me demoro en subir los capítulos :c espero que les guste el capitulo 💓 gracias a todas las personas que me leen. - ally
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Learning To Fly; Camren
Fiksi PenggemarCrecer. Madurar. Son ambas cosas muy complicadas en la vida de una adolescente, y sobre todo una tan revoltosa y arriesgada como Camila. Era verano, pleno verano, se acercaba pronto el otoño. Camila siempre fue consentida por sus padres y estaba aco...