La fría brisa que hay en la nave congela cada vez más mis mejillas, no le prestó atención y sigo moviéndome al compás del columpio. Ya que es de "madrugada" la pequeña plaza en la que nos encontramos está iluminada por las luces de la ciudad.
-...ahí fue cuando me llegó el mensaje de que si podía acompañarlos en esta misión- la seria pero algo suave voz de Quim cuenta los relatos de como se enteró que entramos a la morgue.
- oh, fue Shayla quién te invitó- dijo Pier mientras empezaba a murmurar por lo bajo que las personas normales suelen salir a pasear, no se van a morgues a ver personas muertas- por cierto, ¿cómo entraste?
-habían algunos ladrillos cerca de la ventana de los baños de caballeros, los utilicé para poder subir ¿por qué lo dices?
-por nada- dijo Pier para luego poner los ojos en blanco.
-¡ya regresamos!- menciona Shayla mientras que empieza a repartir el café en vasos de plástico, que fue a comprar con Marlett. Arrastro mis pies por el césped para parar el columpio y me acerco a recibir el único café con leche, soy la única en el grupo que no es muy fanático del café puro.
-gracias- le digo antes de beber el líquido suave calentando mi estómago. No suelo hablar mucho con personas nuevas hasta que entro en confianza, pero eso no quiere decir que Quim no me agrade- creo que fuimos para perder el tiempo, lo único que se podía considerar raro en el hombre muerto era una marca en la muñeca, lo siento, en este momento podríamos estar durmiendo.
- no pasa nada, fue divertido- me da ánimos Marlett mientras sonríe, sonrío, no por los ánimos si no porque falta poco para volver a mi preciada cama.
Veo como Quim vuelve a tirar de las mangas de su remera tapando de nuevo sus manos, acto reflejo por el frío supongo. Empiezan a conversar de cualquier cosa, yo no escucho mucho. Quiero volver a mi cama.Cuatro años después.
Escucho atentamente el feliz relato de Marlett, cuenta cada detalle cada, que sientes que estuviste en ese momento presente. Estoy feliz, y eso que no tengo mucho que ver, ni que fuera la novia de la boda que se está por empezar a planear.
-...así fue como me pidió casamiento- dice con una sonrisa alegre.
- me alegra tanto que Pier se animara a pedirte casamiento, ese idiota se la paso preguntando cómo era la mejor forma de decírtelo, y ahora que lo hizo estoy muy feliz por ustedes - le sonrío a Marlett.
-y yo que creía que el primer mes de novios ya romperían- dijo Shayla, Marlett le miro con reproche y Shayla le respondió con una sonrisa mostrando todos sus dientes.
Estos últimos cuatro años pasaron bastante rápidos, pero no muy tranquilos. Los robos se intensificaron, pero a los dos días que nos tomaba seguir las pruebas encontrábamos a los culpables con una bala en el cerebro. Los meteoritos caían cada seis meses y nunca el mismo día pero siempre en el mismo lugar.
Después de la charla con Marlett y el desayuno ligero que elegí, ya que hoy es entrenamiento pesado, espero que mis pequeños estudiantes no coman mucho.
-¡Que lentos son!- gritó Tom a sus compañeros- ¡Reu! eres un chico ¡corre más rápido!- el mencionado rueda los ojos y toma la muñeca de la niña que tenía detrás suyo, y aumenta la velocidad del trote que los mandé a hacer.
-oh, que tiernos son tus niños al mando- miro a Shayla para que sepa que tiene mi atención- a ese tal Reu y la niña dan ganas de emparejar.
-la niña es Bell y es hermana de Reu - los labios de Shayla se hace una perfecta "O".
-adiós a mi historia-dice con fingida tristeza.
Hace seis meses me dejaron como "proyecto" entrenar a estos niños por un año y seis meses. Yo solo les hago hacer los que recuerdo de mis entrenamientos a su edad.
El más grande es Tom con 16 años, pelo negro, ojos avellana y bastante alto para su edad.
Luego está Reu, 15 años, cabello castaño claro, ojos negros.
Y Isbell tiene 14, cabello negro y los ojos castaño claro, si , es lo opuesto a su hermano.Al pasar los diez minutos que faltaban de castigo por llegar 45 minutos tarde llamo su atención y les digo por mímica que pueden tomar agua.
-ya nos retiramos, puedes usar la cancha para tu grupo- le digo a Shayla, la cual esperaba a que terminara mi grupo de trotar.
-ya era hora- dijo exagerada.
Sonrío y niego con la cabeza a la vez- no hay caso contigo, nos vemos más tarde. ¡Vamos al gimnasio!
Camino al gimnasio con los niños detrás hablando de cosas sin importancia. La hermandad de mi grupo me encanta, suelen ayudarse mutuamente siempre, aunque Tom sea algo exigente.
-Sam hoy es fuerza ¿no?- me preguntó Reu.
-sí, pero no le pongan mucho peso a las máquinas, les hará mal- les advierto.
La hora pasa rápido, nos encontramos haciendo abdominales cuando se escucha un gran estruendo y la nave tiembla. Las alarmas empiezan a sonar por todos lados dando a entender que pasó algo urgente. Los niños me miran nerviosos y se toman las manos, como esperando mis órdenes.
- tenemos que salir de aquí, los llevaré a el refugio- les digo. Y como si la suerte fuera mi mejor amiga, se corta la luz- lo que nos faltaba ¿no?
Tomo fuertemente la mano de Bell y empezamos a caminar lentamente por la oscuridad, intentando no chocar con nada. Al salir al pasillo las luces empiezan a encenderse y apagarse rápidamente, dando la sensación que van a explotar. Corremos por los pasillos que en estos momentos dan miedo y no solo por la inutilidad de las luces también por como tiembla el todo el piso abruptamente.
En el comedor hay un pequeño refugio y como era el más cercano los voy a dejar ahí.
Le pido que se cuiden y que luego los vaya a ir a buscar cuando averigüe y termine con lo que pasa.Los soldados están listos para pelear por la humanidad, y se ve en la forma cómo marchan hacia el enemigo sin miedo.
-ahora, como ya saben, los Tack entraron a la nave, el grupo de soldados restante busque sus Bradesh, atacaran al enemigo por los lados, este escuadrón estará a cargo de Marlett Wedert.
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Perdón por desaparecer tanto tiempo!!!! Me sentía mal por los que esperaban un capítulo, lo siento mucho.Este capítulo no me convenció pero al no tener nada mejor que escribir decidí hacerlo.
Los quiero!!
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"La guerra de la Humanidad"
Science FictionLos humanos llegaron a Marte.No esperaron que en ese planeta rojo hubiera ese virus. Ahora la humanidad tiene que luchar contra los que antes fueron humanos.