Estamos de pié sobre un delgado hilo de seda carmesí. Nos balanceamos, con tranquilidad, observando el abismo que refleja bellos colores de tonos pastel y, a veces, la más terrible oscuridad. Nadie sabe lo que hay allí abajo, pero se cuenta, que allí se encuentra la realidad.
Muchos, cuyas almas están devastadas, ven el abismo con horror. Hacen lo posible para mantener el equilibrio y jamás caer. Mientras los otros, con una serena sonrisa nos columpiamos en la seda carmesí, sin preocuparnos por el qué pasará. ¿Por qué habríamos de preocuparnos? Sin importar que haya allí abajo, no lo podremos evitar, nuestros hilos en algún momento, al fin se quebrarán.
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Universo Lilu.
FantasyHoy en día, la actualidad ha cambiado la mente de los niños... ¿Qué, a qué me refiero? A que la tecnología ha progresado de una manera sorprendente; tanto ha sido su avance que los niños de ahora ya saben cómo manejar un móvil, una tablet, una compu...