Capitulo 9

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Adrien 

- ¿En donde me encuentro? - me dolia la cabeza, era doloroso como nunca antes había sentido una resaca.

- Estas en mi casa joven, ¿no recuerdas nada? - un señor me esta viendo demasiado serio, ahora ¿que hice? - Levantate y date una ducha que apestas...

- ¡No lo conosco y ya me esta dando ordenes!

- Vaya que eres desagradecido, otros ya te hubieran quitado el coche que te cargas. Pero al parecer eres asecino...

- Callar, que yo no la he matado ella misma se corto las venas y tomo esas malditas pastillas...

- Basta joven y ve a ducharte... - se puso de pie y empezo a caminar a la entrada de su casa dandome la espalda y dijo - ¿Por qué huiste si tu no la matastes? - Se sin decir más.

....
1 mes despues

- Jefe por favor dejeme ir antes, ya hice todo lo que me pidio. Ya se me quedo otra hora y me adelanta lo de esta semana...

- Ya basta, no te adelantare nada ni para que te vayas a embriagar como lo haces todas las noches...

- Claro que no - De acuerdo era un adicto al alcohol pero era lo único que hacía olvidarme de mi pasado - Además ¿quién? te ha dicho que sigo tomando

- Todo el mundo ya te conoce aquí y me llaman diciendo que ya volviste a tomar y que has vuelto a decir que tu la mataste y que empiezas a correr por toda la calle como loco - De acuerdo le dan muchos detalles de mi cuando estoy ebrio

- Pero ya no he incendiado los botes- sí he incendiado botes pero eso por diversion, se que esta mal pero me ayuda a despejarme.

- Te tendre que poner correa - no se atreveria o ¿si? - No lo dudes ni lo pienses.

- Oh vamos 

5 minutos más tarde

- ¡Ya aprendí mi lección! ¡Suelteme! - me amarraron como perro, ya llevo 3 malditas horas aquí y nadie me ha soltado - Oye, si tú, ¡AYUDAME!

- Maldición solo han pasado que 4 minutos y estas peor que un perro. Mejor mi Lofy se sabe comportar más que tú y no se queja...

- Llevo aquí 3 malditas ¡HORAS!

- Mentiroso llevas apenas 5 minutos, yo llevo la cuenta...

- Maldito mocoso a tí quién te hablo - era cierto pero sentirse humillado de nuevo, era horrendo.

Primero el madito video donde quedo afuera de mi propio departamento y todo empapado.

El segundo es ahora, snap no me esta ayudando para nada me estan poniendo ese maldito filtro de perro. Más ese niño que grabi desde que me amarraron.

- ¡Que alguien suelte a ese horrendo perro! - Estaba feliz pero a la vez molesto.

- He aprendido mi lección y usted para nada es un viejo decrepito ni mucho menos debilucho.

- Quedas perdonado, pero sigue trabajando.

- Jay sir - Me falto mucho porque aprender de este viejo, ya hasta lo considero como mi padre.

Las Segundas Oportunidades Existen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora