Maratón (4/4) -Cristina-

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-9 Día-

-¿En qué piensas? ._preguntó Abrahan, mi mejor amigo y casi hermano en la agencia.

-Tengo que volver en tres díasvy todavía no he conseguido los archivos que me ayuden con lo de Tazzy ._dije tumbándome en aquella pequeña e incómoda cama._He buscado en todos los ordenadores, incluso he conseguido meterme en el ordenador del jefe pero nada, no aparece nada sobre ella.

-Probablemente estés buscando en el lugar equivocado ._sugirió

-Él guarda todos las masiones en su ordenador ._dije

-Pero ella es especial ._dijo ._Sabes que siempre nos ha dado toda la información sobre nuestros protegidos, sin contar que las misiones duran unas semanas pero tú llevas en esta ya varios años ._asentí

-¿Dónde crees qué lo pueda guardar?

-Eres tú quién mejor lo conoce, fué a ti a quién adoptó, ¿recuerdas? ._dijo con una leve sonrisa

-Lo sé, Lo sé , pero es sumamente difícil.

-Claro que lo es, ¿qué esperabas? ¿Que lo llevara siempre colgando?

"¿Colgando?"

-¡YA SÉ! ._grité dándo pequeños saltos por la habitación

-¿Lo sabes?

-Sé dónde lo tiene ._dije con una sonrisa orgullosa ._Hace unos años descubrí que el colgante de oro que siempre lleva no sólo era un colgante, era un pendrive, allí tiene el archivo

-Bien...ahora sabes dónde está, pero todavía te falta quitárselo ._dijo echando por tierra toda mi felicidad, él nunca se quitaba el colgante. Me dejé caer frustada sobre la cama.

-Es mejor que durmamos y mañana planearemos todo

-Día 11-

-¿Estás seguro de esto? ._preguntó agarrando mi mano con fuerza. Asentí

-Ella merece conocer toda la verdad ._me miró unos segundos y asintió, apreté su mano.

-Ten cuidado. _besé su mejilla cob delicadeza y salí de la seguridad de aquella habitación. Caminé en silencio por aquellos pasillos, me topé con más de un vigilante que me saludaban con la cabeza al pasar. Ser la hija putativa del jefe tiene sus beneficios, y os preguntareis, ¿Por qué teniendo aquellos privilegios y confianzas no le pedía simplemente el archivo?

-Flasback-

-¡HE DICHO QUE NO Y NO ES NO! ._gritó golpeándo la mesa

-¿CÓMOS PIENSAS QUE VOY A PROTEGERLA SI NO TENGO LA MÁS MÍNIMA IDEA DE QUÉ O QUIÉN LO HAGO? ._grité recibiendo una fuerte bofetada

-¡NO ME ALZES LA VOZ MOCOSA INSOLENTE! RECUERDA ANTE QUIÉN ESTÁS, SIN MÍ NO SERÍAS NADA ._gritó, ciertamente era que aquella no era la primera vez que me pegaba pero eso no hacía que fuera menos doloros, me llevé la mano a la mejilla la cual estaba ardiendo ._Lo siento pequeña ._dijo tras soltar un largo suspiro ._De verdad, lo siento, pero no puede pedirme eso ._acarició mi mejilla para dejar un pequeño beso en ella ._eso no.

-Fin Falshback-

He ahí la razón por la que ahora me encuentro entrando a escondida en su habitación.

Antes os explico un poco dónde estábamos. Hace años Alfredo compró un enorme orfanato abandonado, este parecía una mansiòn gigantesca de 4 plantas. En la planta subterránea se encontraban el gimnasio y las salas de entrenamiento, en la segunda y la que quedaba ya a la superficie, el gran comedor y la sala de juegos ( si, a pesar de ser una agencia que crea pequeños protectores, ahi que tener en cuenta que aquí vivían cientos de niños) y la gran biblioteca dónde se impartían las clases, esta estaba dividida por secciones para las diferentes edades, llegando a las tercera planta allí se encontraban los dormitorios, algunos, cómo Abrahan que tras cumplir los 20 y sin otro lugar a dónde ir decidió convertirse en monitor, gozaban de habitaciones privadas, ya en la cuarta planta se encontraba en el loft de Alfredo, a él únicamenre teníamos acceso mi hermana, algunos hombre se suma confianza y yo.

Abrí la puerta con mi llave y recorrí aquel enorme piso, a la izquiera se encontraba su oficina, dónde se reunía con los socios,  a la derecha y tras pasar un espejo falso se encontraba su habitación. Lentamente me acerqué hasta allí aprovechando mi conocimientos sobre los puntos ciegos de aquel lugar entré sin problemas en la habitación. Este se encontraba tumbado en su cama apretando con su mano derecha el colgante mientras que el otro lo tenía apoyado bajo su cabeza. Una forma un poco extraña de dormir, pero así era él, su pelo canoso rigorosamente peinado de día, ahora caía despreocupado sobre su arrugada frente. Sigilosamente llegué hasta su lado sin saber cómo quitarle el colgante, decidí utilizar el truco más viejo del mundo, simulé el sonido de una mosca junto a su oreja, este inconscientemen calló de pleno en mi trampa, me aparté a tiempo de evitar un manotazo e hize el cambiazo con rapidez. Me colgué el colgante al cuello antes de salir de allí. Bajé hasta garaje de dónde saqué mi coche rumbo a casa.

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Y con esto llega a su fin el maratón a las 23:44, por lo que sigue siendo martes.

Comentar muchoooo, me gusta leeros al igual que os gusta ( o eso espero) leerme a mi. Preguntarme dudas, las que solucionaré en cuanto pueda, comentar si el capitulo fue un asco, si esperabais más...Lo que seaa! Soy una intento de escritora y para mejorar os necesito a todos vostros que sois mis críticos.

Un abrazo psicológico muy grande

Blue.

Descubriendo un mundo nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora