7.

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Era música muy buena, no podía evitar moverme totalmente apegado a su ritmo. Y ahora que iba al club al menos dos veces a la semana se había vuelto una incómoda y vergonzosa costumbre que cada vez que pusieran música aparentemente buena a mis oídos, mi cuerpo se animara a bailar y es que sentía algo tan gratificante cuando bailaba. Me sentía bien, contento, satisfecho conmigo mismo. Era como si no pudiera vivir el día a día sin sentir esa sensación recorrer mi cuerpo cada vez que bailara.

Hoseok y JongIn trabajaban juntos subiendo a la gente a los carritos, mientras yo ponía la música y controlaba todo en la caseta. Últimamente mi trabajo parecía ser más entretenido que antes y ahora, luego de presionar el botón que daba el inicio al juego, comencé a moverme de manera lenta pero sin llegar a ser aburrido.

– Le estás agarrando el gusto. – Hoseok se aproximó a mí y comenzó a bromear conmigo.

– ¡Oye tú, el del culo esponjoso! ¡Muevelo más! – los gritos alertaron a mis dos compañeros y se acercaron con una dura expresión a la reja, pero yo conocía esa voz.

Me giré y observé tres sonrientes rostros. – Negro idiota. – respondí.

– ¡Hermano! –me gritó feliz.

– ¿Qué hacen aquí? – Me acerqué cuanto pude a los tres y nos saludamos de un apretón de mano.

– Vinimos a visitarte. – dijo Yoongi con un deje de nerviosismo en su voz.

– Espero que este juego sea suficientemente bueno, porque si no lo es deberás pagarme la entrada. – Jin entrecerró sus ojos, parecía asustado pero eso era sólo porque mi amigo no era mucho de subirse a montañas rusas.

– Lo vas a disfrutar. – aseguré subiendo hasta la caseta y dando la señal para que los nuevos clientes pudieran entrar a sus respectivos puestos.

De a poco fueron entrando, incluyendo a mis amigos quienes se posicionaron algo más cerca de mí.

– ¡Oh! Estos son mis compañeros de trabajo, JongIn y hoseok. –me hice a un lado para que pudieran verse mutuamente. – Chicos estos son mis amigos de universidad, Jin y Yoongi, este idiota es mi hermano, Namjoon. – aclaré ahora para mis dos compañeros.

– ¿Él es tu hermano? – preguntó Hoseok con una cara de confusión visible.

– Medio hermano. – respondió Namjoon. – Si dices hermanos pareciera que hubo un problema de tres son multitud en nuestra disfuncional familia.

– Su madre conoció a mi padre y se enamoraron perdidamente.

– Cierto.

– Así que por estos dos chicos nos has cambiado. – analizó Yoongi.

– No sólo nosotros. – dijo Hoseok. – Faltan Taehyung y Jungkook. Ellos si son la verdadera razón.

– Nos cambiaste Jimin. – Jin me empujó levemente y comenzó a reír.

– Jamás haría eso. – dije ofendido.

Terminé de controlar las siguientes dos vueltas y decidí ir a comer con mis amigos en alguno de los lugares donde vendían para el público.

– Tus amigos son agradables.

– Entiendo por qué nos dejó de lado, es decir yo siempre estoy con mi novia y ustedes dos se la pasan cogiendo con cualqueiras.

– Oye, te recuerdo que así conociste a tu actual novia. – contraatacó Yoongi.

– ¡No tuvimos sexo cuando nos conocimos!

– Bueno, pero llegar a tercera base es suficiente.

– Segunda, soy un hombre decente y respetuoso.

Amentiam [Jikook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora