Demolition Lovers (Gerard Way y tú)

Gerard.

Bajé del taxi en la cuadra anterior a Rock Store, encontrándome con una fila impresionante afuera del recinto. Cientos de personas en la enorme tienda para encontrarse con Gee. En ese momento sentí felicidad plena. No sé si Gerard me reconocería, no sé lo que haría. Daba igual, yo estaba completamente orgullosa de él.
Supuse que sería buena idea entrar y buscar a Jeremy. Cuando Gerard y yo fuimos novios me la pasé viniendo a la tienda con él. Buscando discos nuevos y escuchando nueva música en el segundo piso. Me encantó el detalle. Después de esto, Rock Store tendría mucho más éxito.
Al entrar a la tienda, con un par de personitas en la fila mirándome fijamente porque tal vez creyeron que pretendía meterme, busqué con la mirada a Jeremy, escuchando por primera vez a la banda de Gee sonar en toda la tienda.
"¿____? ¿Eres tú?" Pregunta una voz familiar. Cuando me volteo descubro a Jeremy (¿sin lentes?) mirándome fijamente con una cara de sorpresa. Yo corrí hasta él y lo abracé con todas mis fuerzas.
"¡Jeremy, por dios! ¿Cómo has estado? No sabes cuánto me alegra verte." Dije en el abrazo antes de separarme.
"Bien joder, ¡has cambiado! Me gusta cómo te ves. ¿Tú qué tal? ¿Cómo te fue en Inglaterra?"
"De maravilla, ahora estoy en Nueva Jersey para visitar a mis padres, pero tengo un contrato por 5 años para trabajar en Nueva York."
"Espectacular. Me alegro por ti, ____, no sabes cuánto extrañaba verte por aquí."
"Igualmente Jeremy, igualmente." Jeremy sonrió y me dio unas palmadas en el hombro.
"Estás aquí para ver a Gerard también ¿cierto? Aún no llega, estaba en una junta con la disquera y que sé yo. Últimamente se ha vuelto más diva." Dijo riendo. "Si, he venido de pasada. Por casualidad escuché el evento de hoy en el radio y pensé en venir a saludar." Dije asintiendo. "¿Cuánto por el disco?" pregunté sacando mi carpeta. "No por favor, _____, va a nuestra cuenta,  tu puedes hablar con Gerard cuando gustes, de todas formas, eres conocida" respondió Jeremy. "No por favor, insisto. Si es un apoyo para la banda y para Rock Store, yo pagaré por el disco, no te preocupes." Dije sacando veinte dólares de mi cartera. "Quédate con el cambio" seguí. "Pero si sólo son doce ____, no quieras pasarte de buena gente" Dijo recibiendo el billete y retirándose a buscar el cambio en la caja. Reí discretamente "No Jeremy, quédatelos, no hay problema." Dije guardando mi cartera en mi maleta. "Gracias bonita. Te entrego tu disco y si gustas esperar aquí conmigo, te aviso cuando llegue Gerard para pasarte." Respondió entregándome el álbum en una bolsa. "No te preocupes Jeremy, es mejor que me forme, debo respetar la fila." Contesté asintiendo mientras salía a formarme. "Como gustes, si cambias de opinión, házmelo saber." Escuché de lejos a Jeremy ya buscando mi lugar en la fila.
Eran las cuatro de la tarde cuando llegó Gerard a Rock Store. Lo supimos en el momento en que llegó una camioneta blindada entrando por el estacionamiento. Jamás creí que escucharía tantos gritos en mi vida hacia una persona que amé con tanta locura. Jeremy salió de la tienda y en el megáfono indicó que se hiciera una sola fila. "Presenten su brazalete al entrar, no empujen y recuerden que Gerard les va a firmar sólo un objeto. Podrá ser el que gusten excepto traseros." Dicho esto, la gente se dispuso a formar una fila mientras gritaban como locos.
Mi turno para entrar al segundo piso, donde estaría Gerard firmando llegó tres horas después. Le hablé a mi madre para avisar que llegaría más tarde, y Jeremy me dijo que me quedara en el piso de arriba para hablar con él. No habría problema alguno.
Con las manos temblando y sacando el álbum de mi bolsa, me formé para pasar con un grupo de diez personas a la firma, que se encontraba detrás de una cortina gruesa de tela negra. Se escuchaban murmullos entre ellos diciendo la emoción que les causaba ver a Gerard frente a frente. Por primera vez sentí como si no fuera a ver a Gee, a la persona que me amó y que amé hace tiempo. Sentí que estaba por ver a una celebridad de verdad. La sensación de que me trataría como a una fan más no podía salir de mi cabeza, y los nervios aumentaron.
"Adelante." Dijo el guardia. "Por favor no griten, no se permiten fotos con flash, recuerden no tocar al artista a menos que él tome la iniciativa." Dijo abriendo la cortina. Y ahí estaba él. Gerard, con su cabello negro, vestido completamente de negro, una corbata roja acompañando su atuendo y delineador negro agrandando sus ojos. Se veía incluso más joven.
Intenté mantener la calma mientras contemplaba con felicidad el buen trato que le daba a sus fans. "Muchas gracias por venir, en verdad lo agradezco." Decía mientras firmaba posters. "Gracias a ti Gerard." Su forma de lidiar con todas esas chicas locas era aceptando tomarse una foto con ellas y dándoles un corto abrazo después de firmar lo que tenía que firmar. No se percató de mi existencia cuando estaba atendiendo a la chica frente a mí, incluso cuando yo estaba frente a él. Puse el álbum en la mesa y él, con el plumón destapado ya estaba dispuesto a firmarlo diciéndome "gracias por venir" sin verme a los ojos. Entonces tomé una pequeña iniciativa.
"¿Podrías dibujarme el cuadro donde el alien entra a la cocina y toma al gato entre sus brazos para darle todo el amor extraterrestre que se merece?".
Su mirada se apartó del álbum y la dirigió a mis ojos de inmediato. Sus labios se entreabrieron, sus cejas se encarnaron. Yo, no pude evitar sonreír al ver sus ojos de nuevo, sólo que ésta vez miraba a una persona cumpliendo sus sueños, siendo llamado ídolo por mucha gente, estando satisfecho de todo aquello. "_____." Susurró levantándose para tomarme entre sus brazos. Yo cerré mis ojos. No podía creerlo todavía.