𝗖𝗜𝗘𝗟𝗢 𝗔𝗭𝗨𝗟 ท้องฟ้า ━━ 𝖳𝖧𝖨𝖱𝖣 𝖪𝖠𝖬𝖨𝖪𝖠𝖹𝖤 𝖸 𝖳𝖴́

Capítulo 14

_____

Estaba demasiado cerca, sus labios rozaron los míos, incluso podía sentir su respiración. Fue entonces cuando Magorn nos llenó de espuma.

—¡Ey! —Se quejó Third.

Después de salir del escenario abracé a Third.

—¡Gracias! ¡Eres el mejor!

—Besó mi frente. —Es lo menos que te mereces.

—Sonreí. —Te quiero.

Me dió un beso en la mejilla y entonces oí unas voces conocidas.

—¿____?

—No creo que nos recuerde.

Voltee y ví a una chica de pelo marrón, ojos café oscuro, delgada, altura media y de tez morena. La otra era de estatura baja, cabello negro, piel morena y con gafas.

—¿Catalina?, ¿Paulina? —Pregunté confundida.

—Hola, _____. —Dijeron al uníso.

—¡Chicas!

Corrí a abrazar a mis amigas. Ambas eran de mi país natal, así que estaba realmente emocionada de volver a verlas.

—¿Cuando llegaron?

—Queríamos ver a los Kamikaze y cuando llegamos te vimos. Al principio pensábamos que no eras tú, pero cuando Third te mencionó y todo eso decidimos saludarte. —Explicó Paulina.

—¿Son novios? —Catalina fue directo al punto.

Third sonrió y me miró, yo lo miré sorprendida para luego mirar a las chicas.

—¿Q-Qué? No, somos mejores amigos.

—Es mi princesa. —Me abrazó.

Catalina y Paulina me quedaron mirando muy raro, casi sentía que sabían algo que yo no. Estaban sonriendo pícaramente.

—Bueno, tenemos que irnos o si no, nos echan a patadas.

Intercambiamos números y ellas tuvieron que irse. Después llegó la chica "misteriosa", al fin le veo la cara.

—Third... ¡Oh! —Me miró. —¿Tú eres la famosa _____?

—¿Famosa? —Pregunté confundida.

—Sí, Third me ha hablado mucho de tí.

—Oh. Sí, soy yo.

—Ella es Elena... mi prima.

¡¿Su prima?! Qué alivio, hablo de... pensé que había algo más.

—Mucho gusto. —Saludó amablemente.

Hicimos una reverencia e intercambiamos sonrisas.

—Es muy bonita, Third.

El mencionado abrió los ojos como platos y se sonrojó.

—No. D-Digo, no es bonita es hermosam —Me sonroje. —P-Pero... em... debemos irnos, _____. Ya nos espera el camión.

De pronto escuchamos un sonido. Era el teléfono de la prima de Third. Al revisar quién era, ella simplemente rodo los ojos.

—¿Qué pasa?

—Es Sebastián, no sabe cómo cuidar a Max.

—Es un milagro que no vinieras con tu perro.

—Le pregunté a mi mamá "¿Puedo llevar a Max?" Con la cara más tierna que pude, pero se negó. —Dijo haciendo un puchero.

—Será mejor que contestes, hablamos luego.