-Retírese.-Me ordenó con su grave voz.
No respondí y me levanté de mi silla. No sabía si eso era buena señal o no, pero lo hice. Hice una leve reverencia antes de agarrar el pomo y girarlo para abrir la puerta y encontrarme con un Chanyeol sonriente pero preocupado a la vez. Cerré la puerta detrás de mí y di media vuelta para mirar a mi amigo. Tenía sus manos entrelazadas y posadas delante de sus labios.
-¿Y bien?-Preguntó bajando sus brazos para introducir sus manos en los bolsillos de su pantalón. Respiré hondo y solté un suspiro de alivio.
-Es un hombre.-Chanyeol imitó mi acción anterior y liberó sus bolsillos con el mismo alivio.
-¿Entonces todo bien?
-Supongo.-Murmuré agachando la cabeza, pero sin apartar mi mirada de mi amigo. Este vino a abrazarme por los hombros mientras me sobaba la espalda y me susurraba que todo iría bien.
La mujer que mencionó mi nombre anteriormente, nos indicó donde debíamos tomar asiento hasta que me volviera a llamar para decirme si estaba dentro. Si me llamaba era que me aceptaron y si no escuchaba mi nombre, no podía volver a pisar esa empresa.
Chanyeol se sentó a mi lado y empezó a mirar alrededor suyo con asombro.
Me causó un poco de gracia ver su boca entreabierta, y sus ojos, tenían el mismo brillo que cuando ve a Baekhyun dormir.
Cuando terminó de observar bien el lugar dirigió su vista a mi para luego bajar hasta mis dedos, con los que jugaba por el nerviosismo.
-¿Cuál es su nombre?-Levanté mi cabeza y aparté la vista de mis manos para observar a Chanyeol confusa, ya que no entendí a quien se refería.-Tu futuro jefe.
-Min Yoon Gi.- Asintió varias veces intentando recordar el nombre y grabarlo en su cabeza.-Y no digas eso, no es seguro que me hayan cogido.- Mi amigo me miró y sonrió. Con rapidez agarró mis cachetes y los estrujó.
-Eres tan tierna.-Dijo entre dientes y con una sonrisa juguetona. Cogí sus manos y las aparté de mi rostro, pero no dudé en devolverle la sonrisa.
Se escuchaban nombres desde la puerta de hombres y mujeres que cinco minutos después salían corriendo de allí sonriendo contentos y tarareando en voz alta el nombre de la empresa. Chanyeol sostuvo mi mano como antes hizo para calmarme, mientras yo apretaba la mía con la silla.
-¡Zhang YiXing!- La mujer de gafas redondas volvió a aparecer por la puerta con un cuadernillo en las manos. La sonrisa en la cara de ese hombre no tardó en esbozarse.
No puede ser. Giré mi vista hacia Chanyeol rápidamente, quien me miraba con la misma expresión de no entender nada. ¿No me habían cogido?
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Ya se que estos capítulos están siendo muy cortos, pero tranquilos, es solo el principio. Con cada capítulo se irán haciendo mas largos (o eso intentaré🙃)
Gracias por leer❤
