Tras las rejas.

Capitulo 2.

«Yoongi POV»

Camino por los horribles pasillos de este lugar con la mirada baja, prestó atención a cada uno de mis pasos, estos apestosos botines beige que quedan perfecto con el asqueroso traje naranja que estoy obligado a usar. Unos zapatos negros se posan frente a los míos bloqueandome el paso, alzó mi mirada sin ganas, es un uniforme de guardia aunque esas manos...las reconocería en donde fuera.

-Hyung no puedes andar por ahí sin supervision de un oficial- su voz me hiela la sangre y mi mandíbula tiembla. Lo miro al rostro y efectivamente, eran las manos y voz de jimin.

-¿Que haces tu aquí?-

-Mi tío me ofreció el puesto-

-¿Que?-

-Ahora trabajo aquí hyung, así que más te vale que te portes bien- esboza una hermosa e inocente sonrisa mientras ríe.

-Entonces me portare bien para ti- hace una mirada de sorpresa muy graciosa. -No sabes en lo que te metiste amor, pero al menos puedo volver a tocarte- dirijo mi mano a su mejilla y muevo mi pulgar ahí, extrañaba el sedoso tacto de su piel.

-Hyung...te eh extrañado tanto- estoy super tentado a abrazarle y besarle pero aquí dentro será imposible.

-Tu tío aún no sabe de nosotros ¿cierto?- el niega.

-Si lo supiera yo no estaría aquí ahora- su tío es el dueño de este maldito lugar, con sólo mover un dedo puede hacer lo que quiera con nosotros. Retiro mi mano de su mejilla al escuchar pasos aproximándose.

-¿Que tenemos aquí yoongi?, oh mira y está acompañado de un nuevo oficial- Ese tipo con el que comparto cuarto se acerca acompañado de una manada de reclusos, el se relame los labios mirando a jimin de arriba a abajo.

-¿Cuántos años tiene oficial?-

-Jimin no- digo tapando sus labios con mi mano evitando que hable y el se exalta mirándome confundido.

-Así que eres jimin...que nombre tan sensual...ese es un nombre de chica ¿sabias?- el comienza a reír seguido de sus acompañantes, mira denuevo el cuerpo del pequeño para irse al fin.

-Mierda- retiro mi mano de su rostro y el me mira aún confundido -no le digas tu edad a nadie aquí y nunca andes solo por los pasillos, nunca ¿entendiste?- el afirma con la cabeza rápidamente. Suspiro y alboroto sus cabellos mientras el me sonríe. -Deberías convertirte en un oficial más rudo que esto, de otra manera no te dejaran vivir en paz-

-Hyung...yo soy muy rudo- sonrió ante su comentario tan tierno.

-No me llames hyung aquí dentro, soy el recluso yoongi para ti, señor oficial- el se sonroja y procede a tapar su rostro como lo hace siempre. Suspiro -agh no sabes cuantas ganas tengo de abrazarte, pero aquí no- acercó mi mano a su mejilla pero antes de tocarla cierro mi mano en puño y vuelvo a alejarla.

-Vamos hyung...digo yoongi...es hora de la comida- caminamos juntos hasta la cafeteria sin decir una palabra, nuestras manos rozaban una con la otra haciendome decear agarrarla con fuerza pero debo aguantar, no es la clase de reencuentro que quería pero estoy feliz de tenerlo aquí a pesar de las circunstancias.

¤¤

-No debes comer en este lado de la cafeteria, los oficiales tienen comida mejor en su comedor- digo deteniendo sigilosamente sus pasos para que no entrará a la cafeteria -Debes disimular, anda ve- el me sonríe y afirma para después irse, veo su pequeño cuerpo alejarse y esa sensación de vacío vuelve a mi pecho, definitivamente no puedo vivir sin este chico a mi lado. Me dispongo a comer después de unos minutos observando el pasillo por el que se fue y como rutina de siempre me siento junto a taehyung quien me mira sonriente.

-Buenas tardes señor yoongi-

-¿Como te sientes hoy?-

-Algo mareado, me cambiaron mis medicamentos por otros pero me siento muy mal-

-¿Que es lo que te están dando?-

-Ni idea, pero tengo un mal presentimien...- el chico se deja caer al suelo golpeandose en la cabeza.

-¡Taehyung!- me levanto y me incorporó a su lado en el suelo, acercó mi oído a su pecho y suspiro aliviado al notar que aún respira, me quedo ahí a su lado sujetando su cabeza entre mis piernas esperando a que llegará un maldito doctor, cuando al fin llegan ayudo a subirlo a una camilla y se lo llevan, grande es mi sorpresa al ver como casi jimin choca con la camilla en el pasillo y se detiene a observar a tae, puedo notar como se mueve su manzanilla en señal de que ah tragado saliva nervioso. El realmente no debería estar aquí, estas situaciones son muy duras de ver. Me acerco desde su espalda y colocó mi mano en su hombro, el me mira sorprendido y después sonríe.

-El tiene tu edad- borra su sonrisa.

-¿Que le sucedió?, ¿Porqué está aquí dentro?-

-Tiene una enfermedad mental, lo encarcelaron por intento de homicidio-

-¿A quien atacó?-

-A su hermana menor- el abre los ojos en señal de sorpresa -se acaba de desmayar porque le están dando un medicamento que no le sirve-

-¿Que enfermedad tiene?-

-Bipolaridad, pero le encanta bromear diciendo que alucina personas-

-¿La Bipolaridad se médica?- me mufo de él.

-Se supone le deben dar tranquilizantes o cosas así, la verdad no estoy seguro- el tuerce los labios y afirma con la cabeza.

-¿Quien era el hyung de antes en el pasillo?- suspiro molesto ante su pregunta.

-El es un tipo americano, se llama buster y no le digas hyung, me molesta-

-¿porque esta el en la cárcel?-

-Asesinato, violación, necrofilia, robó, secuestro...etcétera-

-Si que tiene un historial...es alguien malo entonces-

-oh chim chim, sin duda eres un pequeño inocente-

-¿inocente?- me mira retador pero le gana la risa.

-cariño ese tipo te miró con lujuria, asegúrate de alejarte de él- el afirma rapidamente y yo le sonrió. -me alegra que estés aquí conmigo- el me sonríe y yo acabó de darme cuenta que todos a nuestro alrededor nos miran fijamente.

Mierda.