3. EL INICIO DE ALGO NUEVO

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Jazmín estaba confundida, no tenía idea de cómo ayudarlo así que solo escucho lo que Jorge propuso.

-ahora solo baja con Pamela, y luego puedes decirle a mi madre que la invitaste para estudiar, nada más, ¿sí? por favor- hizo cara de perrito abandonado.

Jazmín seguía indecisa, sentía que Jorge solo la utilizaba y no ayudaba en nada ver a Pamela semidesnuda en la cama. Entonces algo avergonzada e incómoda le dijo a Jorge señalando a pamela.

–bueno, primero que se cambie - Jorge miró a Pamela.

–Cámbiate- dijo serio.

Luego volteo hacia Jazmín.

– ¿Me ayudarás? - uso un tono más tierno. Jazmín suspiro y sin poder resistirse a la voz gruesa del muchacho de pelo castaño y ojos marrones, asintió.

–Está bien, pero que sea la última vez que lo haces, ¿vale?, al menos si sabes que tu madre o mi padre pueden llegar en cualquier momento.

Jorge sonrió inmediatamente extendió los brazos para darle un abrazo a Jazmín que lo miraba inocentemente. Ella sintió como su corazón comenzaba a latir más fuerte, aún más al sentir los brazos de Jorge alrededor de su cintura. Le devolvió el abrazo, pero apenas tocándolo, ya que temblaba y temía que él se diera cuenta. En eso Pamela se aproximó a ellos algo furiosa y aclarándose la garganta se dirigió a Jorge.

– por lo menos espera a que me vaya, para ligarte con esta...- hizo una pausa, miró a Jazmín de pies a cabeza y continuo –mmm... ¿chica?, ¿Que digo? con este adefesio – Jazmín ya estaba acostumbrada a esas palabras así que no reacciono, a diferencia de Jorge que parecía molesto.

– sí Pamela es una chica y está ayudándonos, por favor no seas tonta respétala, estamos en su casa- Jazmín sonrió ligeramente pero trato de esconderlo. Pamela comenzó a reír.

– ¿Respeto?, tú has dicho y hecho cosas peores contra ella, eres el claro ejemplo de la frase "miren al burro hablando de orejas"- Pamela cruzo los brazos y miró orgullosa de su respuesta a Jorge.

Él sabía que eso era cierto entonces dejó el tema de lado, y sintió como la culpa invadía su cuerpo.

–Deberían bajar- dijo incómodo y con la voz algo débil.

Jazmín inmediatamente vio como el rostro de Jorge se pintó de culpabilidad, se sintió un poco mal. Decidió abrir la puerta y terminar con el momento incomodo que Pamela había creado sin darse cuenta.

-¿le dijiste a Jorge que traje la comida?- pregunto Tricia al ver a Jazmín bajando las escaleras.

Pero antes de escuchar una respuesta, notó que detrás estaba la rubia muchacha.

–Hey, no me dijiste que traías una amiga- Jazmín algo nerviosa, respondió.

– lo siento olvide avisar, solo vinimos para estudiar, pero ya tiene que irse- Pamela asintió. –si buenas noches- añadió y salió rápidamente de la casa.

Jazmín sonrió. Pero Tricia la miró arqueando una ceja.

– ¿Así que tu amiga no?- dijo Tricia en un tono sarcástico e interrogante.

- si- respondió Jazmín más nerviosa aún.

Tricia la atrapo con una mirada acusadora.

– Jazmín esa chica no es ninguna amiga tuya, sé que ha estado acostándose con mi hijo y que ese idiota que no conoce a su madre, te mando a armar todo este teatrito –Jazmín se asustó.

Inmediatamente se preocupó por como Jorge iba a reaccionar si Tricia lo regañaba, pensara que yo se lo conté todo, esa idea pasó por su mente mientras se ponía un dedo en la boca y comenzaba a masticarse la uña. Tricia continúo hablando.

Inevitable tentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora