Enjoy The Ride

#11 / ¿¡La viste?!

Capítulo dedicado a -> miluzka353

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— Me duele... todo — se quejó erido el peli-azul tirado en el piso.

— Eh caído de arboles mucho más grandes. — presumió un poco la oji-zafiro. — Además, ¿De que otra forma querías que te baje?

— Mmm... no lo se... Tal vez... ¡¿De una que no sea romper la soga con un maldito búmeran!? 

— Oh vamos, admitelo, fue divertido. — se encogió de hombros. — Por cierto... — Se aclaró la garganta — ... ¿Nombre? ¿Especie? ¿Ocupación? ¡¿Razón por la cual estas aquí?!

— Sonic, erizo, héroe, no saber escuchar.

— ¿No saber escuchar? — repitió —

— Larga historia. — dijo levantándose y caminar en la dirección opuesta de donde vió venir a la tejón.

— Tengo tiempo. — respondió inocente.

— Pues yo no.

— Hmp... Me recuerdas mucho a alguien. — dijo sentándose en la hierba, comenzando a explicar — Eriza testaruda a la cual le salve la vida y lo primero que hace es gritarme.

— "¿Eriza?" — pensó el azulado parando en seco. Volteando a ver a la tejón — ¿Eriza dices? — preguntó — ¿Y hace cuanto tiempo fue que la salvaste?

— ¿Quien cuenta el tiempo por aquí? — respondió con otra pregunta — Prefiero no andar contando los días, cuando lo hago siento que envejezco.

— ¿No sabes ni que año es?

— Puedo ser idiota, pero no una estúpida...

— ¿Entonces?

— 2017

— ¿En que año la salvaste?

— La verdad ni siquiera se por que estoy respondiendo a todas tus preguntas. ¡Podrías ser un alien! — gritó alejándose — ¡Eso explicaría por qué el Búmeran paró al verte! 

La tejón se exaltó demaciado, tanto, que distintos pájaros salieron volando de las copas de los arboles.

— Hey, hey, hey ¡Cálmate!, ¡No soy un alienígena! — Defendió el erizo, el cual en un momento de desesperación le tapó la boca. — Deja de gritar por favor... — dijo tratando de calmarla, mirandola a los ojos.

— MmmmMMMM.... ¡MMM!

— ¡¿Me babeaste la mano?! — gritó retirando su mano rápidamente de su boca.

— No es tu mano, es tu guante.

— Mejor me voy — dijo cortante dando la vuelta y empezar a caminar a paso firme hacia el lado contrario de donde se hallaba Sticks.

—... ¿Eres nuevo por aquí cierto? — preguntó sin moverse de su lugar.

— Pueda. — respondió sin interés.

— Pues si ese es el caso. No te aconsejo que vayas por ese camino.

— ¿Por que?

— Hay víboras de hasta dos metros y medio por ese lugar. A menos que quieras suicidarte no vayas por hay.

El erizo no dijo nada, tan solo paró en seco y dio un paso al costado, tomando otro camino.

— Emm, por ahí hay Osos Grizzly.