Enjoy The Ride

#15 / ¡¿Convivir!?

Éste capítulo va dedicado a -> ¡-Meiken-Aneu-!

¡Gracias por apoyar ésta historia! >w<

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... Ames...

- ¿Qué... Qué dices?

- ¡Eres tú! - dijo emocionado para luego abrazarla con todas sus fuerzas. Apegándola a su cuerpo, con miedo a que desapareciera en cualquier momento. - Eres tú...

- ¡Hey! - se quejó el sentirlo tan cerca - ¿Qué haces? ¡Sueltame! - gritó empujandolo lo más fuerte posible.

- No te voy a dejar ir... - le susurró al oído tiernamente - No de nuevo... - susurró nuevamente apegándola más a él.

- ¡Aléjate! - gritó apartandolo al fin. - ¡¿Qué te pasa!?

- Soy yo, ¡Sonic!. Nos conocemos desde niños... Yo... ¿No me recuerdas?

-... ¿Debería?

- No... Tú me recuerdas, ¡Tienes que recordarme! - gritó abrazándola otra vez.

- ¡Aléjate!

Este quedó completamente sorprendido. Tocó su mejilla ahora adolorida, frotandosela lentamente con los ojos bien abiertos. Le habían dado una cachetada.

- ¡Lo siento!... Perdón...

No resibió respuesta, éste ya había salido corriendo a velocidad supersonica de ahí.

- Perdón...

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- "... ¿No me recuerdas?" - pensaba una y otra vez, cada vez más dolido. - "¡Aléjate! ¡Aléjate! ¡Aléjate! ¡Aléjate!" - recordaba a cada momento. Esa simple palabra hacia que su mente diese vueltas. Le dolía.

Y aunque él no lo sabía aún. Estaba siendo perseguido, acosado... O como quieran llamarlo, por nada más y nada menos que Stella.

- "¡Operación SonAmy está progresando!" - pensó emocionada la ya conocida espía rosada. - "¡¿Enserio!? ¡Genial! ¿Cómo va todo por allá?" - le preguntó aquella voz familiar desde su sub-consiente. - "La verdad no lo se. Se ve dolido..." - contestó - "¿Y a que esperas? ¡Anda, anímalo! No lo dejes así." "¿Pero qué puedo hacer?" "Oh vamos, ¿Qué no ves tu marca?" "Pues sí pero..." "¡Úsala entonces!" "¡No es así de fácil!" "Sé que sabrás que hacer... ¡Sunny cambio y fuera!" "¡No te vayas! ¡Hey!" - gritó en su sub-consiente, pero fue inútil. Su gemela se había ido ya. - ¡Sunny, espera!

- ¿Uh? - paró en seco al escuchar. Moviendo sus orejas de un lado al otro. - ¿Hay alguien ahí?

- "No, no, no, no, no, no, no. ¡No vengas! ¡NO!" - pensó asustada.

Trató de alejarse pero al hacerlo iso crujir una rama por accidente.

- ¿Hola? - se acercó aún más.

- "¿Qué hago ahora?" - pensaba mirando a los lados. El lugar era muy estrecho, no había el espacio suficiente como para hacer aparecer sus alas y salir volando.

Correr tampoco era una opción, querer escapar de "El ser más rápido del mundo" sería una total locura.

Miró a los lados, intentando ver algo, lo que sea, para que él no logre reconocerla.