Seis.

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Era rutinaria nuestra vida, quizás hasta aburrida pero estando juntos era todo menos aburrida. De nuestros hogares a la universidad, esa era mi mejor parte pues sabia que iba a verte. Pasaban los días y seguíamos estando juntos compartiendo nuestros momentos libres, no sabia exactamente que eramos los dos pero era tan bonito que no quería averiguarlo.

Nos tocaban las vacaciones de invierno y debíamos separarnos por ese tiempo con suerte y nos veríamos si llegábamos a salir, ese día no quería separarme de tu lado por nada sabia que te iba a extrañar aunque nunca te lo dije los dos íbamos a esperar quien seria el primero en decirle "Te extraño" al otro. Yo estaba segura de que no seria yo la que lo diría aunque quisiera decírtelo no iba a ser yo la primera, si era un poco de orgullo pero en realidad quería saber si tu me extrañarías tanto como para decirme.

Hablamos todos los días sin falta, claro si no es que yo me perdía y tardaba en responder pero siempre estábamos pendiente uno del otro, luego de año nuevo solo era cuestión de unas cuantas horas para mi cumpleaños y días siguientes para el tuyo. Llego el día de mi cumpleaños y como era de esperarse felicitaciones de familiares, amigos y conocidos, el día transcurría y tu aun no me habías felicitado ni habías aparecido, eso me tenia mal no sabia porque. ¿Por que eran tan importante para mi tus felicitaciones?. Saldría con mi familia a cenar para celebrar mi cumpleaños en el camino recibí tu mensaje y no tienes una idea de lo bonito que sentí al ver tu mensaje en la pantalla de mi teléfono, leí el mensaje un par de veces seguidas me dijiste cosas tan lindas, cosas que me hicieron enamorarme mas de ti. Muchos a mi alrededor me decían que mi animo había cambiado que mi rostro tenia un sonrisa tan estúpida pero no les dije que había sido gracias ti, sabia que me estabas haciendo mucho mal y yo lo ignoraba.

Pasaron los días y fue tu turno de cumplir años, estaba muy feliz por ti pero me di a desear pues quería hacerte esperar, te dije cosas que fueron totalmente sinceras, me abrí contigo y te dije muchas razones por las cual te quería, te quiero.

No debí quererte, no debo.

Debo dejarte ir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora