I would kill for your love

breakfast...

Al ver que su amado no se acercaba, Eddie se levantó.

Entendía que el debía sentirse confundido...quizás asustado, pero ya aprendería a relajarse...

Debía admitir que se veía sumamente hermoso, aquella ropa se ajustaba finamente contra sus leves curvas.

Además le encantaba como le observaba.

Siempre le gusto ver el miedo de la gente, aunque le encantaría ver algo más en aquellos ojos cafés...

-tranquilo Waylon, no quiero hacerte daño...-

-¿Quién...eres tú?...-

-oh perdona mis pésimos modales-se acercó hasta él y tomo su mano-mi nombre es Eddie Gluskin-dijo antes de besar la suave mano.

Su Darling retiro rápidamente su mano, y la coloco contra su pecho.

Sus mejillas se tiñeron con un encantador color rojizo y sus ojos le miraron más fijamente.

-ven amor, mande a preparar un desayuno especial para ti...-

Eddie comenzó a caminar hasta su lugar en la mesa, pero Waylon no se movía.

Seguía plantado contra la puerta.

-deja que te explique una pequeña regla amor mío...si yo digo que hagas algo tu obedeces, es así como funcionan las cosas en mi hogar...-

-¿Qué quieres de mí?...mi familia no tiene dinero....así que por favor....déjame ir...-sollozo cerrando sus hermosos ojos, se notaba que estaba asustado...

Por lo cual Eddie sonrió...

-dinero...creo que notaras que eso me sobra...es algo más valioso lo que yo deseo...-

-por favor señor....-

-es a ti a quien quiero Waylon Park...o es que no me recuerdas...-

Waylon negó rápidamente, comenzando a llorar...

Lo cual frustro un poco a Eddie, pero debía ser paciente.

Su madre solía decirle que a las mujeres había que tratarles con amor y paciencia...

Aunque esta última no era una de sus virtudes...

Pero por Waylon haría lo que fuera...

-qué tal si te sientas y hablamos....tal vez así logres recordarme.-

-por favor...déjeme ir....-

-siéntate...-

-te lo ruego....perdóname no te conozco....solo....solo quiero ir a mi casa....por favor...-

Los sollozos del rubio comenzaban a ser molestos...

Sentía una gran ira comenzar a crecer dentro de su ser...

Quería ser amable y bueno con el joven, pero este no cooperaba...

Solo lloraba patéticamente...

Porque no podía ser igual de dócil que la noche anterior...

Mordió su labio ante el placer de recordar su luna de miel...

Y eso le calmo un poco...

-te daré una última oportunidad...sienta y come...-

El rubio no hizo caso...

Así que el saco un pequeño control de su bolcillo...

Miles se lo había regalado, un obsequio de bodas según el moreno...

Y esta sería su oportunidad de probarlo...

Así que con placer apretó el pequeño botón...

Waylon se estremeció frente a él, antes de caer al suelo sujetando su muñeca...

Soltó el botón y se acercó hasta el...

-solo diré esto una última vez mi amor....si yo digo algo...tu obedeces...-

Lo beso suavemente, y luego lo jalo hasta dejarlo en su silla...

El rubio no le dijo nada, no lo miro...

Solo sostenía su muñeca de forma patética...

Pero encantadora...