Forget

Petrificada

Con la pequeña "excursión" al bosque de la anterior noche, Draco descubrió mucho más acerca de la historia de la cámara, concretamente, sobre el monstruo que habita en ella según la leyenda.

Nadie se había parado a pensar que lo que causaba eso, era en realidad una criatura que tenían entre ellos, un Monstruo. Nadie lo pensó, nadie, excepto Draco.

Había estado en los jardines junto a Pansy y Theodore, pero no podía estar tranquilo, sabiendo que en cualquier momento, habría otro petrificado. No se lo podía contar a nadie, ya que si descubrían que Draco lo sabia, se preguntarían de donde habría sacado la información, y eso no le ocasionaría más que problemas. Así que tendría que descubrirlo por su propia cuenta.

Subió a la sala común de Slytherin, y después se encerró en su cuarto para intentar pensar con mayor claridad.

- A ver....tenemos varias pistas.... - comenzó a pensar en silencio

*La primera pista: era una criatura que solo podían controlar los miembros de la casa Slytherin.

*Segunda pista: Era una criatura que petrifica a su oponente.

*Tercera pista: Las arañas le temen.

Draco sabia que esa información ya la había visto antes, pero no sabía dónde exactamente, así que siguió pensando e intentando buscar mas pistas.
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Esa misma Tarde, Draco escuchó a dos profesores en el pasillo. Dijeron que había otro petrificado, y que si había mas, la escuela tendría que ser cerrada. Eso le alarmó realmente, pues se creía responsable de averiguarlo y de momento estaba totalmente atascado.
Una pizca de curiosidad apareció en su mente, y pensó que visitar al nuevo petrificado a lo mejor ayudaba de algo.

Bajó las escaleras de la sala común y se dirigió a la enfermería, con mucha precaución de que nadie le viese.
Vio ocupada una de las camillas que antes estaban vacías, y supuso que era esa.

Según de acercaba, su rostro iba tomando cada mas expresión de terror, pues la nueva petrificada no era ni mas ni menos que aquella niña a la que solía llamar "sangre sucia".

- No...... - susurró cuando estuvo a su lado

Vio la expresión de terror reflejada en el rostro de Hermione, y luego miró su mano derecha, en ella, tenía un pequeño espejo.
Draco dejó de pensar y se sentó junto a Hermione, mientras sus ojos se iban humedeciendo rápidamente.

-Si ese día no te hubiera dejado sola en la biblioteca..... - empezó a decir Draco, auto culpándose a si mismo por el estado de la niña

-si tan solo te hubiera ayudado..... - siguió diciendo

Rozó la mano de Hermione con la suya, y al instante notó como se le erizaban todos los pelos de su cuerpo.
Pero luego miró su cara, sus preciosos ojos castaños, su fina nariz y pequeños labios.
Su cabello rizado castaño que siempre estaba abultado.

-Siento haberte llamado eso.... - dijo Draco mientras se secaba las lágrimas con una de las mangas

Decidió que lo mejor sería marcharse, no quería que entrara nadie y le viera llorar, y menos por una "impura".

Volvió a su habitación, y allí estaba Pansy, jugueteando con los botones de su túnica.

-Pansy... ¿Que haces aquí? -preguntó Draco extrañado

-Venía darte esto, se te cayó del bolsillo el otro día, y no me acordé de dártelo - dijo poniendo un pequeño trozo de papel arrugado en su mano

-Gracias.....

-De nada. Asta luego - dijo secamente la niña de pelo corto azabache

Recordó que era la hoja de papel que arrancó de aquel libro de criaturas el día que estuvo en la librería, antes de empezar el curso.

Draco desdobló el papel, y leyó lo que ponía en él:

*Basilisco: Hay muchas criaturas peligrosas, pero ninguna como la mirada del basilisco. Capaz de matar a quien le mira directamente a los ojos,Son capaces de vivir miles de años en espacios muy reducidos. Importante, TEMEN A LAS ARAÑAS.

-Claro! Como no se me había ocurrido antes! - gritó Draco eufórico

Corrió hacia la enfermería,y volvió a ver a Hermione, pero esta vez, Estaba emocionado.

-Hermione, Ya tengo la solución! Ya se qué te ha hecho eso! - le decia emocionado a la castaña

Se alegraba de poder al fin ayudar a la niña, aunque esta le siguiera odiando.

De pronto, escuchó algunos pasos aproximarse hacia la enfermería, por lo que los nervios de Draco aumentaron precipitadamente.

Escuchó las voces de Harry y Ron, que venían junto a Madamme Pomfrey.

No supo que hacer, ya que no podía decírselo a Ellos, pues se llevarían todo el merito. Pero luego pensó otra alternativa. Pensó que si ellos creían que era Hermione la que encontró la respuesta, ella estaría a salvo y ellos no se llevarían el mérito, se lo llevaría la niña. Y eso a Draco no le molestaba. Por lo que antes de que El pelirrojo y el Azabache aparecieran, puso la pequeña hoja de papel en la mano izquierda de Hermione.

Salió de allí corriendo ante de que le vieran. Salió contento, pues muchas veces dicen que las personas que están dormidas recuerdan todo lo que pasaba a su alrededor.
¿Y si Hermione recordaba que Draco la había ayudado? Que la había salvado.
Él se alegró mucho al pensar que podría haber una pequeña posibilidad de que la niña no le odiara más, y eso era lo que mas deseaba el rubio en ese momento.