Capítulo 3: Una visita

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Shadow POV:

Al fin, podré tomarme el día libre, ya era hora. Después de tanto tiempo de estar cuidando esta bella ciudad. Ah, pero valió la pena.

Rouge: Shadow, saldré un rato para ir por la cena, ¿vas a querer algo?

Shadow: No, estoy bien.

Rouge: -suspira- Esta bien. Volveré más tarde. Bye.

Shadow: Adiós.

No se por qué, pero cuando Rouge se fué me hizo recordar mi infancia...

Cuando era solo un pequeño erizo, yo creía en los monstruos, aventuras y demás cosas que se hace para poder arriesgar el pellejo. Incluso recuerdo cuando jugaba en el parque con mi mejor amiga Rouge, ella y yo somos muy buenos amigos, de hecho, ahora es mi acompañante. Jamás te metas con ella, puede parecer una chica guapa y atractiva, pero por dentro es una bestia.

En fin, volviendo a mi niñez, siempre iba de aventuras junto con Rouge y eso me gustaba, me agradó la infancia que tuve. Hasta que conocí a Amelia Rose. Lo recuerdo muy bien: Rouge y yo estábamos en el parque cuando vi a Amelia en los columpios, fue cuando me comprometí a robarle el corazón y volverme su media naranja. Hice lo posible para que se fije en mí. Rouge me ayudó volviéndose su amiga, compañera diría yo, y dándome información sobre ella.

El tiempo pasaba, y no lograba hacer una conexión entre Amelia y yo. Empecé a creer que tal vez esto no funcionaría y lo dejé atrás, me dolió el corazón, pero lo hecho hecho está.

Tiempo después, volví a ver a Amelia cruzando la calle, pero en lo que ella cruzaba un autobús no dejaba de acelerar, incluso parecía que aceleraba más. Iba a atropellar a Amelia, no permitiría que ella muriera. Reuní todo mi valor y corrí para empujarla y que no sea alcanzada por el camión.

Cuando Amelia estaba a salvo, las miradas de todos se posaron en nosotros. ¿Qué acaso jamás habían visto a un niño? Fue entonces cuando entedí por que nos miraban: estaba encima de Amelia, como si fuera a darle un beso. No puede evitar sonrojarme y ella se sonrojó también. Me aparté rápidamente de ella y le ayudé a levantarse.

Ciudadano1: ¡Ese niño a salvado a la niña!

Ciudadano3: ¡Ese niño es un héroe!

Ciudadano2: Ya era hora de que la ciudad tuviera un heroe por aquí.

Todos me tomaron cómo el héroe de la ciudad. Me alejaron de Amelia para llevarme con el alcalde y nombrarme "el protector de París". 

Desde entonces toda mi vida es trabajo, trabajo y más trabajo. Es aburrido y agotador, más cuando tu jefe es tu compañera de trabajo y es súper ruda contigo.

Me gustaría poder ir a verla. Espera un momento, Rouge no esta y si no está puedo hacer lo que quiera. Si, ahora que no está podré ir a visitar a Amelia. Gracias Rouge.

Amy POV:

Amy: Gracias por ayudarme, Tails. De verdad, muchas gracias.

Tails: No hay de que Amy, sabes que es un placer ayudar a mis amigos.

Cosmos: Oigan, ¿y Kuckles?

Amy: No lo sé, a de estar por ahí.

Knuckles: -con la cabeza atorada en un faro- ¡Chicos! ¡Ayuda!

Amy: ¿Pero cómo te metiste ahí?

Knuckles: No lo sé. Sólo sé que estaba ayudando a Tails y de repente pasó esto.

Tails: Hay Knuckles... A ver, ven aquí. Voy a ayudarte.

Knuckles: Gracias amigo.

Tails: Es un placer -lo desatora-. Listo, ¿mejor?

A WEREHOG IN PARISDonde viven las historias. Descúbrelo ahora