Cuidaré De Ti #1 [YAOI] [NEKOS] [EDITANDO]

Capitulo 14 final

Shin

"A ver, solo patea el balón y anota el gol. Si lo haces, tu equipo ganará el equipo" me digo a mi mismo en pleno penalti.

Los gritos de las personas en las gradas inundan mis oídos y me animan. Dejo salir aire y pateo el balón.

-¡Gooooooool!

Los gritos aumentan y mis compañeros se lanzan a mi. La alegría me invade y no puedo evitar quitarme la camiseta y correr por la cancha.

Mis compañeros y yo decidimos salir a celebrar además, iré con mis amigos, Stephan y Yumi. Jackson y Yumi terminaron porque (según me dijo Stephan) lo descubrió besándose con alguien más y cuando dijo alguien más me refiero a su hermano. Aún sigo sorprendido, no me lo esperaba de él. Stephan no me quiso contar más aunque le insistí.

-¡Stephan! - corro hacia él y me recibe con los brazos abiertos y un ardiente beso. Ay caramba.

-Felicidades - me regala otro beso - será mejor que vayas con tus amigos. Ve a divertirte.

-¿No vendrás? - le pregunto colocando una carita de gato.

-Yo ya tengo algo planeado para los dos.

Me sonrojo al instante. El sexo que hemos tenido cada vez es mejor y hay dos posiciones que me tienen loco. Parezco gato en celo.

-E-esta bien - le doy un pico y voy con mis amigos - ! Adiós!

...

-¡Por nuestro querido Shin, que anoto el gol ganador! ¡HURRA! - grita Yamato.

-¡HURRA!

Aplauden y me siento bastante feliz por nuestro equipo.

-Oye Shin - Yamato llama mi atención -, ¿que te parece si mañana vamos al parque de diversiones?

-Si, sería divertido - opina Laila.

-Yo quiero subir a la montaña rusa. Se ve enorme - continua Miu ilusionada.

-Seria la Continuación de la celebración - dice Yamato.

Ya tengo una continuación en casa.

-Por supuesto - accedo sin problemas y recuerdo algo. Yamato me había dicho que le gusta Miu y que quería decírselo.

-Yamato - susurro - mañana se lo podrías decir a Miu. Seria una buena oportunidad.

-¿Tu crees? - pregunta sonrojado y yo asiento - Vale, trataré que los nervios no me controlen.

-Tu puedes.

-Gracias.

Al terminar la "fiesta" llena de bromas y juegos, regreso a casa en donde Stephan me espera.

-¡Ya llegue!

-Bienvenido - baja Stephan y me regala un beso -. Te tengo dos sorpresas. La primera creo que ya sabes cual es - me sonrojo ante eso - y la segunda te la diré luego de hacer "eso".

-¿No puede ser lo contrario? Tengo curiosidad.

-No, ya está decidido. Ahora...- junta sus labios con los míos y nuestras lenguas comienzan a bailar. Sus manos viajan bajo mi camiseta y las mías bajo su pantalón. Gimo en su boca y sin querer entierro mis garras en su trasero -. Ay...No tan fuerte - me quita la camiseta y mientras me besa subimos al cuarto. Vamos dejando nuestras prendas en cualquier lado y al estar completamente desnudos me atrevo a hacer algo que nunca lo hubiera imaginado...O tal vez sí -Ahh, Shin - lamo el miembro de Stephan desde la base hasta la punta para luego metermelo a la boca, lo siento caliente y palpitar entre mis manos también, no puedo negar que estoy nervioso pero escuchar los gemidos de Stephan y ver lo que provocó en él me animan a seguir e incluso a disfrutarlo- ¡Ahhh! - veo como cierra los ojos disfrutando del placer que le brindo. Varias veces utilizo mis dientes cuando subo y mi lengua cuando bajo, lo hago primero lento haciendo que lo disfrute hasta que siento como mueve sus caderas por más, así que me lo meto más a la boca como puedo y lo hago más rápido. Stephan entierra una de sus manos en mis cabellos. Sus jadeos cada vez son más altos y debo admitir que me excitan escucharlos, siento como mi pene se pone cada vez más duro - Shin... ahhh, sigue así - me pide y con una mano agarro la parte de su pene que no tengo dentro de mi boca y con la otra juego con sus testículos y así causarle más placer, lo que logro quita y su semen cae en mi rostros - Sí... ahhhh... sí - gime más pero de repente lo siento tenzarse - Shin, ya casi llego - saca su pende de mi boca y lo termino de masturbar para que se vengan. Llega al clímax con mi nombre y su semen cae en mi mano, y un poco en mi rostro, sin decir nada toma un paño y me limpia mi rostro y mi mano apenas recuperándose del orgasmo que le di. Me toma en brazos y me coloca en cuatro y me prepara lamiendo mi entrada, a la vez que me masturba. Me dejo llevar por el placer, entierro mi rostro en el colchón dejando hacer su trabajo. Aprieto con fuerza las almohadas sin dejar de gemir, y de vez en cuando me muerdo el labio.