El Suicidio De Hogart: Resurrección.

Capítulo 3: El Viaje / El Pueblo

No... al final era una roca, no era nada de cosas grandes. Lo pudimos pasar.

Noche
Una fogata, hecha de ramas del árbol del limbo, difícil de hacer, pero lo logré.
Cochu, mi fiel compañero se encontraba comiendo las semillas que consiguió de un arbusto, aunque no sea frutas o algo, esas semillas de verdad ayudan perfectamente al hambre.
Yo estaba tomando un poco de agua fresca que encontré en un lago, algo bueno que ha pasado por estas praderas.
Fue un día muy largo, en la mañana encontramos una cantimplora entre medio de los árboles, con lo que ahora podemos tomar y transportar agua más fácil que antes. En la tarde encontramos algunos "animales" que se escondían en diferentes partes, tuvimos que escapar lo más rápido de ahí ya que nos empezaron a olfatear y nos dimos cuenta que eran seres sigilosos y con ganas de sangre.
Pero, aquí estamos, viendo como las chispas de la fogata salían de ahí, y Cochu contándome diferentes historias que sabía de la Legión Autista.
-Y dime... ¿Aún recuerdas tu nombre?
-No, no lo recuerdo.
-Entonces Tobias tenía razón acerca de ello.
-Ja... Parece que sí.
-Hey, ¿Quieres una semilla?
-Si... Uff... 
-¿Qué te pasa?
-Veo todo... b-borroso...
-Claaaro, justo cuando te doy una semilla.
-C-cochu...
Me caí al suelo fuertemente.
-No puede ser... Esto debe ser una puta broma, ¿Cierto? Vamos, levántate...
Cada vez mi visión se estaba poniendo borrosa, no siento mis dedos, algo me sucedía.
-¿Amigo?... Por favor levántate, esto no es chistoso...
-Cochu... Necesito ayuda...
-No, no no...
Creo que esto es el final, morir dos veces, qué lógica.
¿Y si era el agua?...
Si habían esos animales ahí, LOS ANIMALES... TAL VEZ ELLOS CONTAMINARON EL AGUA....
                                       Mantén la calma, ahora estás enloqueciendo.
Mis ojos se cerraban, creo que oficialmente ya estoy muerto por segunda vez. ¿Tan poco he durado?...
-A-AMIGO POR FAVOR NO TE MUERAS... ERES EL ÚNICO EN EL CUAL HE CONFIADO... No... te... vay...as...

No escuchaba nada, se acabó.
Sólo veo un negro estremecedor, se acabaron todas las oportunidades de vida que tenía.
Pero, algo veo, es una puerta blanca, acaso, ¿Acaso tendré otra oportunidad? No creo, debe ser...

Escuché algo.

"Hogart, ven aquí."

¿Ese es mi nombre?...
Qué feo la verdad, me esperaba llamar José.

Voy hacia la puerta blanca, pasos lentos, pasos silenciosos que no importaban en lo negro vacío.
Llegué a la puerta, la abrí.
Eran... Nubes, muchas nubes, creo que he llegado al cielo.
"Hogart, bienvenido a mi paraíso."
-¿Qué está pasando... desconocido?...
-Yo, soy Draft, el dios de los otakus, las lolis, todo lo que veas del anime soy el poderoso creador.
-Oh.
-Así es.
-Bonito lugar.
-Gracias, linda ropa.
-¿Esta? Está llena de sangre, no creo que esté bonita como dices.
-Bien, vayamos al grano, ¿Sabes por qué te traigo aquí?
-No, ni tampoco sé por qué estoy en el limbo, bueno, estaba.
-Hogart, no te puedo decir esa información. Aunque yo sea el dueño de todo, el limbo no es mio, y no sé cómo llegaste ahí.
-VAMOS, ERES UN PUTO DIOS.
-DEL ANIME.
-Oh, verdad.
-Está bien, está bien, te lo diré... Te he enviado aquí por tus actos.
-Vamos, debes estar bromeando con esto.
-No, no lo estoy. En la vida que has tenido anteriormente te has comportado como un imbécil, y por eso te trajimos al limbo, para que cambies, seas una nueva persona.
-No puede... ¿Haber otra solución?
-No, si no, te hubiera matado desde el principio y ya te hubiera mandado al infierno.
-Ok... Intentaré cambiar... L-lo juro...
-Lo harás, sé que lo harás, joven muchacho twittero. Ahora, tu amigo cochu te espera en un lugar, te deseo suerte y espero que hagas algo por tu bien.
-Lo haré... te lo prometo...

Draft me tocó la cabeza y mi vista empezó a ponerse borrosa, otra vez.
Caí al suelo y de nuevo llegué afuera de la puerta blanca, ahora cada vez veía blanco, una luz fuerte me llegaba a la cara. Empecé a ver lo que pasaba, estaba despertando.
Estoy acostado en una cama, en una casa hecha de ladrillos, nadie estaba cerca, y al frente mio estaban las cosas mías y de cochu.
Creo que cochu lo había logrado de poder buscarme ayuda, quiero agradecerle, mejor me levanto de la cama.
Mi brazo tenía un pedazo de seda en algo que parecía ser una herida, creo que me habré golpeado cuando caí al suelo en la noche de fogata.
Alguien estaba abriendo la puerta, creo que ya descubrieron que estaba despierto.
-¡ESTÁS VIVO!
-¿C-cochu?
-DIOS MIO, CREÍ QUE NO TE IBAS A SALVAR DE ESTA...
Cochu estaba con unas lagrimas cayendo de sus ojos, hasta manchar su ropa con lagrimas.
-Me alegra verte de nuevo cochu...
-TE TENGO QUE CONTAR MUCHAS COSAS AMIGO...
-Eh... Cochu... creo que mejor deberías llamarme "Hogart"
-¿Hogart? Pff, que estúpido nombre.
-No importa, quiero que me llames así.
-Claro... Hogart...

De la nada alguien vino a la casa, era un sujeto vestido con una bata blanca y un gorro celeste.
-Mi paciente se ha recuperado, fantástico!
-Así que usted es el doctor...
Miré su placa.
-Señor... Tide...
-Así es, soy yo.
-Heh.
Así que el doctor tide fue el que me salvó la vida.
-Gracias Tide... por haberme salvado lo que llevaba de vida aquí...
-De nada, para eso estoy yo.
Tide se dirigió hacia cochu.
-Cochu, ¿Le has contado?
-Ahora se lo cuento. Hogart, ven afuera, debemos hablar.
Cochu y yo nos fuimos, y de verdad el paisaje era bello, y eso que era de colores oscuros.
Habían muchas casas, sitios nuevos, vaya, era mucho para ser un simple pueblito.
Algo me estaba sorprendiendo en una montaña de arriba, era una luz roja que parpadeaba a cada momento.
-¿Qué es eso cochu?
-Oh, esa luz viene del Volcán Krompus.
Era un volcán, soy un estúpido.
-¿Por qué preguntas Hogart?
-¿Tú qué crees?
-Lo siento.
-No, no importa, bueno, explícame ahora, ¿no?.
-Ok, esta historia será muy larga... Lo que pasó después de que caíste en la noche de fogata fue que...

Un disparo sonó lejos, algo sucedía cerca nuestro, creo que deberíamos mirar.
-QUÉ FUE ESO.
-NO LO SÉ COCHU...
-DESPUÉS TE CUENTO, VAYAMOS RÁPIDO AL SITIO
¿Pero qué estaba tramando cochu? Quería matarse?
-TOMA HOGART, ATRÁPALO! LO PODRÁS NECESITAR.
Cochu me arrojó una pistola que tenía en su bolsillo.
Espera, ¿Estaba armado todo este tiempo?... ¿O me lo iba a dar en la conversación?...
Corrimos sin parar igual que los otros ciudadanos que iban al sitio, creo que somos los únicos armados, no veía a ninguno con un arma cerca.

Otro disparo sonó a lo lejos, ya me empezaba a asustar.
Abrimos la puerta del bar y vimos a 2 tipos armados, uno con un rifle y otro con un martillo y creo que también uno de ellos ttiene una armadura entre el torso (por si les disparaban, supongo).
-QUE NADIE SE MUEVA, O MORIRÁN COMO A LOS 2 HIJOS DE PUTA QUE SE ENCUENTRAN TIRADAS EN EL SUELO.
-SI, ESCUCHEN A MI NOVIO O UN MARTILLAZO LES PEGARÉ EN LAS PUTAS PELOTAS.

Cada vez había más suspenso, yo y cochu nos quedamos completamente quietos para no morir en este momento.
El vendedor se levantó del suelo y empezó a hablar:
-Vamos Ces, no necesitas llevar esto a la guerra, te puedo dar dinero, te puedo dar toda mi cerveza cara, pero por favor... No mates a mis clientes.
-Heheheheheh... ¿ACASO CREES QUE SOY UN IMBÉCIL? TÚ SABES LO QUE QUIERO:
P O K E F I L I A
-Ces... Sabes que eso se nos acabó... Te has llevado toda la puta pokefilia con tu novio y me has dejado completamente seco de pokefilia.
-Entonces tendré que hacer algo.
Un disparo rozó entre todos y le llegó profundamente en la cabeza al pobre hombre, cayendo al suelo y muriendo.
-¿Alguien más quiere saber qué es lo que quiero aquí? ¿No?... Genial, ahora todos quédense quietos mientras yo y Tad buscamos nuestro premio.
Los 2 empezaron a ver los bolsillos y maletas de todos los que estaban en el bar, ninguno tenía lo que buscaba, pero no los mataron.
Cochu se acercó a mi y entre susurros me dijo:
-Hogart... debemos hacer algo, no podemos dejar que nadie de aquí ahora muera, ya veo que han muerto 3 personas aquí...
-Tranquilo, sé que hacer... Sólo necesito una botella.
Cochu lentamente sin que ninguno de los 2 se diera cuenta, me trajo una botella vacía.
-Ok cochu, cuando ataque encima de él tú salvas a todos los clientes que queden vivos... ¿Estás listo?
-Afirmativo capitán...
Tiré la botella y justo le llegó en la cabeza a Ces.
-OH MIERDA, QUIÉN FUE EL DESGRACI...
-AQUÍ TE VOY HIJO DE PUTAAAAAAAAA
Me tiré encima de él pero justo al caerme al suelo vi que Tad se acercaba con su martillo, decidí correrme al lado cada vez que un martillazo cayera.
-QUÍTATE ENCIMA MÍO 
-¿¡DEJARÁS DE MATAR A LA GENTE POR POKEFILIA PUTO LOCO!?
-JAMÁS.
Un martillazo llegó
-AAAHHHHH... SUELTÁME LA CONCHA DE TU MADRE
-¡NO!
Pero ces me tomó del cuello.
-AHORA QUIÉN ES EL MEJOR.
Tad dejó de pegar martillazos al suelo
-¡ASÍ SE HACE!
Cochu vino corriendo hacia mi y tiene un papel en su mano, me pregunto qué será, a ver si no se tarda tanto mientras soy ahorcado por unos 2 pokefílicos.
-OIGAN POKEFÍLICOS, ¡OBSERVEN ESTO!
Era una foto de un Sylveon con polla grande y semen en todas partes (qué miedo), Ces me soltó el cuello y fue corriendo hacia Cochu.
-¿¡Acaso es lo que creo que es!? ¡DAME DAME DAME!
-¿Te irás de aquí?
-CLARO, LO QUE TU QUIERAS, PERO DÁMELA.
-Aquí tienes.
Cochu le pasó la foto a ces. Y de un segundo a otro, Ces y Tad se fueron del bar y se fueron cabalgando en su caballo hacia otro lugar en donde conseguir más.
-COCHU ERES INCREÍBLE.
-Gracias Hogart...
-¿Y CÓMO CONSEGUISTE ESA IMAGEN?
-Larga historia, me lo dio un león marino con vestido y unas orejas bien raras, ¿Qué raro, no?
-Hmm... Si...
Dejamos que todos los civiles salieran del bar tranquilos, pero dejaremos al pobre vendedor en el suelo para morir en paz con el sitio en donde trabajó.
-Y... Cochu... ¿Quieres visitar al tipo con vestido del que me dijiste?
-Claro, vamos.

Nos fuimos del bar a ver si la policía del sitio lo arregla todo.
Estamos caminando hacia la casa del sujeto del que estaba hablando cochu.
Pero siento que algo nos estaba siguiendo, y es una bola rosada.