Malec One-shots

Max

Después de un día de cazar demonios en Brooklyn, Alec Lightwood llegó a su cama y se tiró defrente sin si quiera ver si alguien más estaba en su casa.

Ya se había dado una ducha en el Instituto, pero había llegado medio dormido hasta el loft que compartía con su familia.

-¿Alexander? ¿Eres tú?

Magnus Bane acababa de regresar de un trabajo hacia una compañía grande de mundanos cuando encontró la puerta abierta. Su primer pensamiento fue que alguien había atacado a sus hijios, pero al entrar todo estaba en orden y el olor de Alec estaba en todo el lugar.

-¿Papá?-preguntó Rafe, apareciendo en la sala de estar-. Pensé que vendrías más tarde...

Magnus se agachó hasta estar a la misma altura que su hijo de dos años.

-Terminó rápido, pastelito-le dijo y dio un beso en la frente-. ¿Está tu padre?

Rafe asintió y estiró sus brasitos para que Magnus lo cargara. El brujo hizo eso y caminóo hasta su habitación.

-Papi llegó muy cansado.

-Tú deberías estarlo también, son las 9 de la noche.

El pequeño se rió-. Es que Maxie se acaba de dormir y estuve jugando con él. Tía Izzy vino a cuidarnos hasta que papi llegó.

Con mucho cuidado, Magnus abrió la puerta y vio al cazador de sombras roncando levemente con su cara apoyada en su almohada. SOnrió ante la vista y dcidió que sería mejor para todos dormir de una vez.

Milagrosamente, Max Lightwood-Bane durmió hasta las 3AM sin despertarse antes. Claro que para cuando comenzó a llorar, Alec fue el primero en levantarse.

-Magnus...-lo sacudió sin mucha energía, su cuerpo adolorido por la misión del día anterior-. Magnus, cariño.... ¡MAGNUS!

-¿Uh..?

-Es tu turno.

-Ugh...bien.

Magnus aún estaba con sueño, mitad en la realidad, así que cuando su esposo dijo 'tu turno' supuso que eso implicaba llorar también.

Y así lo hizo.

-Me casé con un idiota-murmuró Alec para pararse él e ir a ver a Maxie, quien seguro solo quería comer.