Máquina de Sexo

4. "En cinta"

- Hora de empezar!- dice Jackson antes de cerrar la puerta del salón de empleados.

Camino de vuelta a la habitación, en el camino me encuentro con algunos trabajadores de Antonio y con algunas prostitutas.

Llego al piso superior y me acerco a la puerta de mi habitación para entrar. Lo primero que haré será quitarme esta ropa, luego me daré un buen baño y después tal vez me tire a pensar que tan jodida está mi vida.

- Whitney, espera!- gritan al final de las escaleras. Es David, el nuevo conductor.

- Hola... ¿necesitabas algo?- digo cuando ya está frente a mí.

- Emm... Si. ¿Podrías ayudarnos con las chicas...?

- ¿Pasa algo con las chicas nuevas?

- Emmm... eh... si.. podrías venir?

- Claro.- suspiro y lo sigo al segundo piso.

- Mira, lo que pasa es que, una de ellas...- suena... nervioso.

- David, sólo dilo.

- Una de las chicas...- se detiene y se acerca a mi.- una de las chicas está en cinta.- susurra en mi oído.

- No me jodas...

Como puede ser eso posible? Quiero decir, es muy posible, pero la chica podría haber dicho algo. No creo que el bebé siga con  vida... la cantidad de droga que le deben de haber metido a la pobre y las cuantas veces que de seguro la habrán violado... no quiero ni imaginarme en qué estado están ella y el bebé...

- Si... pensábamos que estaba vomitando por las drogas que le metieron en el Club de Strippers pero, después nos dimos cuenta qué,  no vomitas 11 veces consecutivas por las drogas...- puta mierda.

Entro en el gran baño donde estan casi todos los empleados y todas las chicas nuevas.

- Qué te pasa, idiota!- gritan los hombres cuando entramos al baño.- Tenías que traer al jefe no a otra Prostituta. Nos van a echar a todos.

- Cállate José, cállate o yo misma haré que los echen por razones totalmente distintas.- silencio, sólo se escuchan sollozos.

David me toma de la muñeca y me guía hasta la chica.

- No lo puedo creer...- la chica que está en cinta es Lauren.

- Como es que no avisaste!- le grita uno de los trabajadores.

- Callate! No le grites, estúpido.- ataco. Se escuchan risas ocultas por parte de los demás empleados.

- Cariño... sabes más o menos cuánto tienes?

- No se... tal vez dos o tres semanas.

- David!- le llamo.

- Tu eres el único que puede salir sin que Antonio diga algo.- meto mi mano a mi sostén y busco unos cuantos billetes que tengo. Algunos de los entrometidos de atrás silban cuando lo hago. Saco un billete de No se cuanto y se lo doy a David.- compra las pruebas de embarazo que alcancen con ese billete. Así alcancen para 40. Traelas. Pronto.

David asiente en respuesta y sale corriendo por el pasillo.

- No te preocupes, linda.- digo acariciando su cabello.- saldrán de ésta.- susurro en su oído refiriéndome a ella y su muy posible bebé.

[...]

- Whitney!! Ya es hora!

- Ya voy! Ya voy!!- corro al autobús.

- Bueno, bueno. Chicas. En esta noche las cosas cambiarán un poco, para algunas. Las que ubicamos al lado derecho harán sus turnos comunes y corrientes en sus lugares. Mientras qué las que están en la izquierda serán las que cambiarán de lugar. Así que, les pido el favor a las chicas de la derecha que suban al otro autobús. Para que tomen rumbos diferentes que el nuestro.- las 15 chicas del lado derecho de levantan de los asientos y salen del autobús.