El último en quedar en pie

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-Cuando llegamos lo primero que hicimos fue dejar las motocicletas detrás de una casa abandonada que al parecer se usaba como taller en el puerto, las cubrimos con una manta gris que venían con las motos de antemano y luego proseguimos a acercarnos al lugar. Desde afuera veíamos un sinfín de almacenes, más allá varios contenedores de metal y un buque verde de carga flotando en agua. Lo único que nos separaba era una extensa reja alambrada de metal que se alargaba a ambos lados, rodeando el puerto.

-Teresa, además de su equipo, baja con un bolso negro grande que cargaba en la espalda. 

-"¿Lo trajiste?..."- Le pregunte. 

-"Por supuesto... Es mi especialidad después de todo"- Hablábamos de un rifle francotirador, a pesar de que Teresa fuera buena en combate mano a mano, no hay que olvidar que destaca disparando como águila.

-"Bien... Confirmando transmisores y comunicadores..."- Aseguraba Daniel desde las computadoras a nuestros oídos. 

-"Te escucho, ya estamos en frente del Puerto de Seattle"- Le confirme. 

-"Muy bien... Dentro de 2 minutos podré acceder a las cámaras de seguridad. Usen esta oportunidad para entrar sin ser detectados"- Dijo Daniel mientras nos acercábamos por el alambrado. 

-"¿Por cuánto tiempo tendrás control de las cámaras?..."- Pregunto Teresa mientras avanzábamos. 

-"Dependiendo del escándalo que hagan adentro y que tan perspicaz sean los guardias del lugar... posiblemente 30 minutos"- Respondió Daniel. -"Sigan ese camino, dentro de poco verán una caseta de policía custodiando una entrada de carros y un poste de luz con cámaras... Escabúllanse del guardia, yo me encargo de las cámaras en 3... 2... 1..."- Indicaba Daniel por el comunicador, en seguida las cámaras en el poste se apagaron y volvieron a prender. Era la señal. Nos escabullimos agachados rodeando la caseta del guardia y pasando por la entrada al estacionamiento sin ser vistos ni sentidos.

-Nuestros uniformes son oscuros como la noche, lo cual ayudaba a camuflarse, fue pan comido moverse a partir de ahí. 

-"Veo 2 guardias acercándose por tu derecha Julie..."- Aviso con antelación Daniel. 

"Entendido..."- Recibió ella. Nos escondimos detrás de unos botes de basura en la esquina de uno de los almacenes y esperamos que pasasen. Julie los sorprendió por la espalda y noqueo a uno de los guardias de un fuerte golpe en su nuca con su pistola. Detrás de Julie tomé al otro por la espalda y le tape la nariz y boca, asfixiándolo hasta caer inconsciente.

-Luego de que ambos cayeran ocultamos los cuerpos en los botes de basura. Teresa agarra sus teléfonos y radios arrojándolos lejos para que no pudiesen pedir ayuda en el acto por si despertaban. Seguimos avanzando por los callejones entre almacenes escondiéndonos, y de ser necesario, incapacitando a los guardias que patrullaban la zona.

-El lugar era enorme. Había filas y filas de casetas gigantes que se usaban como almacenes para botes, cargas, talleres, todo lo que un puerto quiere. El suelo no era cemento sino de piedras sueltas, como si nos estuviésemos aproximando a la playa. 

-"¿Puedes ver a los objetivos por cámaras, Daniel?"- Pregunto Julie. Este se tardó en responder mientras terminaba de buscar en todas las cámaras. 

-"¡Confirmado!, veo un gran número de hombres en el almacén número 45. Además, hay muchos más rondando la zona"- Aclaro Daniel.

-"Parece que es hora..."- Agrego Teresa.

-"Ve, Brighlight"- Nos despedimos de Teresa separándonos. Julie y yo nos movíamos seguido al almacén 45 mientras Teresa iba a una de esas torres con ganchos de carga altos.

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⏰ Última actualización: Mar 22, 2017 ⏰

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