Me gustas. Porque lo supe el primer día que te ví, en la clase de religión, sentada en tu silla en primera fila. Tan tímida, tan callada. Con ese pelo largo y marrón. Porque lo supe el día en el que me hablaron de ti.
Te quiero. Porque lo supe desde ese primer abrazo. Desde esa primera tontería. Desde que me llamastes por primera vez.
Porque lo se, soy consciente, soy muy intensa en todo, y quiero con locura y desenfreno, sin peros y sin excusas.
Porque me abrazas y me muero, porque me dices "te quiero amor" y soy la más feliz del mundo. Y es que en estos momentos no me imagino ni un día sin ti. Y puede que exagere, y que me esté enamorando e ilusionando aún sabiendo que no tengo ninguna posibilidad, porque se de sobra a quien quieres y que no sientes nada por mi, pero así soy yo, que justo en el peor momento, me enamoro de la persona equivocada. Y aun teniendo miedo de volver a sufrir por un amor no correspondido, apostaré todo por ti a una carta, y si tengo que luchar por seguir a tu lado, ten por seguro que lo haré.
Y bien pequeña, no vas a leer esto, soy consciente de ello. No se si me gustaría abrirte mi corazón, creo que le he cogido miedo a eso, pero eso no me va a impedir escribir sobre ti, sobre lo bonita que eres y lo mucho que me encantas. Pero sobre todo, gracias por confiar en mi, por contarme tus inquietudes, por preguntarme tus dudas y por ser la chica de mis sueño. 😊💙
