♡ - Capıtuʟo 30.TP 1- ♡

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=Pensamientos de Ruben =

Madre... mía.
¿Ella acababa de...? ¿Ella dijo...?
Oh, no tenía que repetirlo dos veces.

Me abalancé sobre su cuerpo, tomándola de las caderas y amando cada segundo en el que su piel caliente tocó la mía.
Mi boca se presionó en la suya en busca de un beso por el que era capaz de matar, un beso tan ardiente por el que armaría guerras y destruiría naciones enteras
con tal de obtener.
Asomé la lengua y lamí sus labios posesivamente, recordándole quien era yo y obligándola a nunca olvidarme, dejando mi huella impresa por el interior de su boca. La besé tan duro para que, de ahora en adelante, no tuviera dudas de que ella era mía y solo mía.

El solo pensamiento de compartir a mi _____, me hirvió la sangre.
Creo que le apreté más fuerte las caderas porque la escuché jadear/ronronear en mi boca.
Me separé para dejar que tomáramos aire, y pegué mi frente contra la suya.

—Entonces... —dije, tratando de recuperar el aliento, pero hombre, era una tarea titánica teniendo en cuenta que ella se encontraba semi desnuda, y que sus bonitos y redondos senos se pegaban a mi pecho descubierto cada vez que respiraba, era como si estuvieran tentándome a agarrarlos y chuparlos— ¿Aun estás dispuesta a conocer todos los usos que se le pueden dar a una cama?

Ella parpadeó y soltó lentamente el aliento, mientras yo pensaba en las mil maneras de arrancarle el sostén y la maldita falda que parecía un minúsculo retazo de tela que cubría únicamente las líneas donde comenzaban sus bragas.
Gruñí para mis adentros.
Fue exasperante ver cuando un jodido imbécil estuvo besándola como si le perteneciera.

Herví ante la imagen mental de recordarlos a los dos metidos en ese taxi. Key tuvo que convencerme de no matar al estúpido miserable.

Dirigí mi boca al cuello de _____, queriendo impartir castigo, queriendo imponerme; y ser posesivo era la única forma que tenía de demostrar lo demasiado que me importaba.

Amaba su cuello, aunque ella tal vez no se hubiera dado cuenta todavía, y la razón era sencilla: podía sentir cómo su pulso se aceleraba cada vez que la mordisqueaba o cuando mis dedos decidían hacer exploración por su piel.

—¿Cuántos usos se le pueden dar a la cama? —preguntó ella de forma aturdida, su voz se escuchaba sedosa y fina como un hilo de seda.

Tembló ligeramente cuando mi mano bajó hasta su muslo, y le levanté una pierna a la altura de mis caderas.
Su falda estaba tan apretada y pegada al cuerpo debido a la lluvia. Yo era un
semejante idiota por haberla abandonado, pero por suerte tenía al bastardo de Key para hacerme entrar en razón y recordarme lo inmaduro y ridículo que me estaba comportando.
Olí el cuello de _____, sin disimular mi erección.

—No me tientes a demostrarte las miles de cosas que podemos hacer en esa cama —susurré con voz caliente y anhelante.

—Quiero... —ella se relamió los labios, echó la cabeza hacia atrás cuando comencé a dejar besos húmedos en su clavícula—, quiero que me las muestres.

Gruñí, exasperado.
¿Por qué tenía que decirme esto justo ahora, cuando estábamos en casa de Key, encerrados en la que una vez fue mi habitación cada vez que me quedaba de visita?

—¿Estás segura de que quieres esto? —pregunté.

Mordió su labio inferior y asintió con seguridad.

—¿Quieres que vuelva a repetir lo que te dije antes? —susurró ella—.Llévame a la cama, Ruben.

Me estremecí como cada vez lo hacía cuando mencionaba mi nombre con ese tono sexy y caliente… necesitado.
Si ella tan solo supiera la clase de persona de mierda! que me sentía, que únicamente estando a su lado me permitía tener la esperanza de llegar a ser alguien mejor.

❤️❤️Prohibido enamorarse de Ruben doblas ❤️❤️ [[TERMINADA]]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora