Prince to potato.

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BaekHyun estaba sentado en el sofá observando fijamente como el gato en su estómago lo amasaba como si se tratase de una almohada con una sonrisa porque el gato de ChanYeol nunca lo había querido, este era el primer encuentro cercano que tenían después de un año. ChanYeol tiene la mirada fija en BaekHyun siendo BaekHyun, y adorable, esbozando una amplia sonrisa por el brillo en los ojos que tiene BaekHyun siendo BaekHyun, y adorable.

—¡Channie! —lo llamó BaekHyun con emoción, arrugado la nariz cuando sintió la cola del minino paseando por ésta. —¡Mira, mira! ¡El gato ya me quiere! —exclamó con una amplia sonrisa, tratando de aguantarse completamente la emoción de aquel momento para no asustarlo.

—Eso veo, BaekHyunee —decía mientras se acercaba hasta él, sentándose en el suelo a un lado de un BaekHyun emocionado. —Pero, ¿sabes? Le he dado la orden que te mimara poquito —bromeó entre carcajadas poco fuertes, observándolo arrugar el ceño.

—Eres un pesado —regañó BaekHyun, cerrando los ojos cuando sintió nuevamente la cola del minino pasarse por su nariz, provocando que estornudara no porque fuera alérgico, sino porque causó cosquillas.

ChanYeol carcajeó al ver el rostro enfadado de BaekHyun porque su gato había salido corriendo de la habitación, dejando a BaekHyun con altas esperanzas de ser aceptado por el felino gordo de ChanYeol. Se empeñaba fuertemente en que su gato le quisiera, trayendo cosas para él como alimento que ChanYeol no quería darle porque se ponía mañoso, pero se ponía mañoso sólo con él y BaekHyun nunca obtenía el resultado esperado, siempre era ignorado.

—Te odio —susurró BaekHyun, girándose en el sofá para darla la espalda, hundiéndose entre las muchas almohadas que tenía el sofá porque BaekHyun adoraba las almohadas. ChanYeol sabía muchas cosas del enojado BaekHyun desde que habían empezado a salir. Primera cosa que sabía: sabía que no lo decía en serio. Segunda cosa que sabía: sabía que BaekHyun cuando se enojaba se ponía muy infantil, pronto aparecería el mágico BaekHyun y lo transformaría en muchas cosas malas con su estrella. La última vez había sido en un sapo.

—Baekkie, no quería reírme, pero me ha dado gracia como asustaste a mi gato con tu estornudo —se excusó, levantándose para hacerse espacio detrás de él, estrechándolo suavemente ente sus brazos. Tercera cosa que sabía: Él mismo era su debilidad. Sabía que BaekHyun estaba muy enamorado de él y no podía molestarse, por eso que se enojaba más cuando ChanYeol iba a mimarlo, porque podía perdonarle en un segundo.

—Tonto —le decía a regañadientes mientras se giraba para tener a ChanYeol de frente, mostrándole su enfadado y arrugado rostro.

BaekHyun siempre tenía puesta la sudadera amarilla de ChanYeol, esa en la que su cuerpo nadaba porque le quedaba muy grande. ChanYeol le había puesto su estrellita mágica porque le gustaba el color amarillo e incluso habían comprado una pequeña barita brillante con una enorme estrella en el otro extremo del ésta que usaba para muchas cosas, en especial molestar. BaekHyun había apodado a ChanYeol como el príncipe sonrisas porque BaekHyun adoraba cuando ChanYeol sonreía sin motivo alguno o sonreía a causa suya, pero variaban los apodos de ChanYeol debido a que BaekHyun cada vez que se enfadaba con él golpeaba su cabeza con la barita mágica y le decía que lo convertiría en lo más feo del mundo.

Con el ceño fruncido BaekHyun se levantó en el sofá y ordenó que ChanYeol hiciera lo mismo pero en el suelo, debido a la diferencia de altura y porque él era la estrella y debía estar más alto que el príncipe sonrisas.

—Has sido el príncipe más terrible del mundo —declaró BaekHyun con los ojos entrecerrados, sacando su barita mágica del bolsillo que llevaba al frente. —Te maldigo cruel príncipe, por lo que dejarás de ser un príncipe —. Aquí venían las palabras más esperadas a pronunciar por la boca de BaekHyun. —Te convertirás en una terrible y fea patata.

—¿Qué? —inquirió fingiendo sordera, pero en realidad no había escuchado a BaekHyun, había estado más atento al ruido en la cocina que hacía su bola de pelos y además quería seguir molestando, lo cual la estrellita mágica lo tomó con un reto y se puso más rudo.

—Que eres una patata fea y tonta —respondió alzando la voz para que le escuchase fuerte y claro, dando un golpe en la cabeza para comenzar con su castigo.

A ChanYeol no le gustaban las patatas, pues era alérgico a ellas y además no le gustaban, decía que tenían cierta deformidad y por eso su cuerpo era alérgico a ellas, por ser tan feas y por ello es que había una gran inconformidad con el nuevo castigo que le había dado BaekHyun.

—Estás loco —masculló frunciendo el ceño, tomándolo fuertemente por la cintura y cargarlo hasta acostarlo nuevamente en el sofá, sonriendo debido a los gritos de fingida ayuda que daba su pequeña estrella entre las risas que causaba por su falso ataque.

—Mi novio es una patata —continuaba burlándose BaekHyun, dejando de luchar y mostrándole una amplia sonrisa satisfactoria porque había molestado a ChanYeol.

—Pero no soy una patata —frunció el ceño mientras las palabras eran articuladas, comenzando a repartir besos por todo el rostro de BaekHyun, creyendo que de esta manera el castigo pasaría más rápido y BaekHyun lo convertiría nuevamente en su príncipe sonrisas.

ChanYeol siguió siendo molestado con ser una patata e incluso continuaban las bromas de amenazas con freírlo para comérselo en papitas fritas con salsa de tomate, hasta que, más allá, después de terminar la cena, terminó por aceptar su castigo, al fin y al cabo él aceptaría todo por su pequeña estrella mágica que llenaba sus días de incomparable luz y diversión, pero poco después de la cena ChanYeol logró nuevamente volver a ser lo que era y que siempre sería para BaekHyun.

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Haru me inspiró harto, ¿qué decir? Amor a sus fanarts y por más fanarts tan bonitos que hace)': Tenía que hacer esto o no podría descansar feliz:@@@. Meta cumplida, así que pues... lo comparto(?).