Capítulo 8

6 4 2
                                    

Tendemos a interiorizarlo todo, y al mismo tiempo, a evadirnos de nosotros mismos. Buscamos ventanas a otras realidades, que nos sirvan como vínculo conciliador con nuestra propia soledad. Un espejo externo que nos devuelva un guiño cómplice que calme nuestras conciencias y justifique nuestra actitud de mirones incurables.

"Y además matamos el aburrimiento"-Angelita dejó La Monda sobre la mesa camilla y deslizó las manos por las ruedas de su silla. Con poco esfuerzo, consiguió alcanzar el mirador. Su cabeza quedaba a la altura de las ventanas superiores. "Magnífica perspectiva"-pensó-. "Una forma como cualquier otra de pasar la tarde"

-¿Ya te has puesto en posición?-Marta había apagado la tele y la miraba desde el sofá.

-Mira, - Angelita pegó la cabeza al cristal.- ¿Ves a ese que está junto al camión?

-Si- Marta se había levantado y permanecía de pie junto a ella.

-¿A qué actor te recuerda?

-¿A Lassie?

-No mujer, el perro no. –golpeó el vidrio con el dedo, marcando un punto indeterminado en el aire- de los hombres que están abajo, el más delgado. ¿No se parece a Fred Astaire?

-Tienes razón, ¡reconocería esos zapatos en cualquier parte!

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Tienes razón, ¡reconocería esos zapatos en cualquier parte!

-¿Qué haces?-Marta había vuelto al salón y miraba a su alrededor, como buscando algo.

-¿No tendrás por ahí unos prismáticos?

-Por supuesto que no.- Angelita estaba indignada.

-Pues es una pena, porque si piensas volverte una cotilla, mejor es que lo hagas a nivel profesional.

-Por culpa de esta escayola no puedo ir a ninguna parte.-protestó- Estoy atada a esta silla y me aburro sobremanera. Si de vez en cuando, miro por la ventana ¿qué hay de malo en ello?

-De momento nada-le tranquilizó Marta- Pero si ves que han enterrado algo en el jardín durante la noche ¡a mi no me llames!

Mondando manzanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora