[ Proyecto EMOTIONS ]

Capítulo IV

Recuerdo haberme abrazado a MinHo y quedarme dormido ahí, en torno a su cuerpo, rodeado de su piel y esa tibieza agradable que emitía su robotizado sistema. Recuerdo que lloré y lloré, mientras él tarareaba la estúpida canción de Discovery channel para tranquilizarme, hasta que me dormí.

También recuerdo, que jamás en mi vida, dormí mejor como lo hice esa noche. De alguna manera aún inexplicable para mí, pude descansar a pesar de estar agotado mental y psicológicamente. Todo lo que nos había pasado, la muerte de JinKi, enterarme que mi familia no estaba desaparecida sino muerta, ser potencialmente perseguidos y tener que escondernos en este lugar, me habían hecho sentir que había sobrepasado mi límite. Estaba cansado.

Además de eso, no sé cómo pasó lo que vino después.

Desperté de sobresalto cuando algo se me tiró encima del cuerpo y una mano cayó sobre mi boca y parte de la nariz, dificultándome el respirar. Abrí los ojos asustado y vi a quien me había casi hecho morir del susto. Era KiBum. Le vi mirarme con los ojos muy abiertos mientras que con un dedo me hacía un gesto de que no gritara, que guardara silencio.

Sin duda algo estaba sucediendo.

Yo asentí y me comprometí a no meter bulla a pesar de que estaba muy asustado y nervioso.

- ¿Q-qué, qué pasa? – murmuré sentándome en la cama.

- Hay alguien en la casa – me respondió KiBum – abajo, oí pasos... creo que nos encontraron

- ¡¿Qué?!

- ¡Sht! - me interrumpió mi amigo – Debemos irnos, anda, ponte algo de ropa y salgamos de aquí, ¡Apresúrate!

Yo no puse en duda lo que KiBum me decía, él era sin duda una persona que jamás bromearía con algo como esto y si decía que había alguien en la casa, entonces teníamos que salir de ahí. Me bajé de la cama lo más rápido que pude mientras KiBum metía alguna de mis cosas en una mochila, me vestí colocándome la misma ropa de ayer y un par de zapatillas. Cuando estuve listo, un golpe allá afuera de la habitación, en la escalera, nos alertó de que se estaban acercando a nosotros.

- ¡Vamos, saldremos por el baño interior!

Mi habitación estaba conectada con el dormitorio contiguo por medio de un baño, ir por ahí, nos daría algo de ventaja para poder salir. Tomé la mano de KiBum y, como yo seguí medio adormilado, dejé que él me guiara por nuestra mejor vía de escape. Hasta que, un pensamiento paralizó mis pies.

- ¡Hey, espera! – susurré deteniéndonos justo cuando habíamos atravesado el baño y nos aprontábamos a salir por la segunda habitación.

- ¿Qué, qué pasa ahora?

- ¡MinHo! ¡¿Qué hay de él?! ¡¿Dónde está?! – me sentí un idiota por haberme acordado recién del robot pero, si yo estaba asustado, no me quería imaginar lo alterado que estaría él, ni siquiera había prestado atención a si estaba a mi lado en la cama cuando KiBum me despertó.

Pero KiBum no me respondió, en su lugar, apartó la mirada, ¿Qué era lo que no me estaba diciendo?

- ¿Hyung? ¿Dónde está MinHo? – insistí negándome a seguir huyendo hasta que KiBum no me diera una respuesta.

- Era demasiado tarde, era él o nosotros TaeMin...

- ¿Qué dices? ¿Qué significa eso? – pregunté alterado - ¡¿Dónde está MinHo?!

- Se lo llevaron...

- ¡¿Qué?! ¡¿Quiénes?!

- TaeMin, no es momento de discutir esto ahora, si no nos vamos, nos van a atrapar