Cliente Inesperado.

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¿Esta es la tienda de magia "Le Moon Shiny" muñeca? - era Gaster!Sans.

-Si- lo mire y respondí con seriedad.

-Tienen, ya sabes, algún estimulante sexual- lo dijo sin rodeos, acercándose al mostrador.-Quiero pasar una noche candente con mi chica- giño una de sus cuencas.

-Si señor, en un momento se lo preparó, pero no tiene que ser tan explicito en su uso- gire molesta para prepararlo.

-Muñeca, ¿te conozco? -

-No señor, es la primera vez que viene a esta tienda- hice la misma posición que a Violeta, solo que a esta le agregue fresas.

-Esto es extraño, sabes recordaría un buen trasero, formado y firme como el tuyo dulzura~ - frunci el seño, el no me vio

Hubo u sonrojo de parte mía pero no era por pena o por su "cumplido", era de enojo pues se te insinúo descaradamente.

Vamos____, tienes la oportunidad de poner algo que lo enferme en la posición, del estómago o gases. Ibas a agregar un poco de áloe, pero un pensamiento recorrió tu mente.

"Haz lo que quieras, más a nadie dañes "

Respiras te hondo y esa idea se esfumó de tu mente.

Terminaste rápidamente el brebaje, lo en bolsas y se lo das.

-Son 75G-

Gaster!Sans pago y saca la botella de la bolsa y se acerca-¿No quieres probarlo con migo primero, dulzura? .~-

Esto era el colmo-Lo siento señor, pero la tienda va ha cerrar - lo digo casi empujando.

-Hey linda tranquila, ¿no podemos hablar con más calma?-me miraba mientras lo sacaba, era más alto que yo así que giraba su cabeza y la bajaba.

-No señor - casi imposible, me faltaban un par de metros para llegar a la puerta.

-Dulzura llámame Gaster, porque será el nombre que gemiras.~-lo decía con un tono pícaro.

Ya no puedo con esté esqueleto.

-Gaster!Sans, le pidió de la manera más atenta que se retire de este establecimiento - ya más enfadada.

Este al oír su nombre completo se sorprendió, aproveche la situación y lo empuje fuera de la tienda, dejándolo en el bosque cerca del parque gritándole desde la puerta, burlona le dije pues había caído en un arbusto.

-Gracias por su visita, espero no volverlo a ver en la tienda- Cerré la puerta de golpe y está desapareció, así las personas normales no la encuentran muy fácil, pues la tienda se movía según la persona, monstruo o practicante de magia que lo necesitara o requiriera.

Valla tipo me pone de nerviosos.

-G!Sans-

Sorprendió y a dolorido me levanto ese arbusto.

-Esa muñeca si que es fuerte para su tamaño- mire la bolsa de papel y la pequeña botella en su interior.

-¿Esto realmente funciona? - tome mi teléfono para llamar a mi conejillo de indias para probar si esa posición es efectiva.

-¿Quién rayos habla a las 3:15 de la mañana?, ¿es una broma esto? - contesta la chica irritada. -Oh dios es G-

No se dio cuenta de que sin querer contestó la llama y G la había escuchado.

-Hola G~, ¿qué se te ofrece tan temprano? - él sabía que ese tono era fingido.

-Niña conseguí algo que nos subirá la temperatura, ¿quieres ser la primera en probarlo~?-

-¿Cómo que?" ser la primera en probarlo", ¿Me estas viendo la cara otra vez Gaster!Sans? - su tono se escuchaba molesto, vamos inventa algo rápido.

-Heee es solo que, es algo que compre en una tienda que nunca había visto y me la recomendaron- cree lo pequeña.
-Te creo cariño, ¿cuando quieres probarlo~?. -

-Ahora mismo - G había apariencia en la habitación de la chica, la cual se exaltó por la repentina llegada del esqueleto.

-Ten, bebelo-le dio la botella a Bianca.

Ella sospechosa bebió parte de la dulce posición y unos momentos después empezó a sonrojarse.

-Y bien, ¿cómo te sientes? - se acercó provocativo.

-Y-yo solo se que tengo ganas de... - no término la frase, pues se abalanzó hacia el esqueleto besandolo, separándose por falta de aire y un fino hilo de saliva los unía.

-Vaya, esa chica es una genio- dijo mientras bebía la que restaba de pasión.

...

Cerré la tienda, registre las ventas de la noche y subí a mi habitación para dejarme caer en la cama llena de peluches de conejos.

-Que noche, lo bueno que Gabriel no vio eso, me hubiera avergonzado enfrente de él y luego lo golpearía por coquetearme, jejeje-

Te quitaste tu ropa colocándola en el cesto de la ropa sucia, quedando en ropa interior mirando te en el espejo.

-Na, no tengo nada que envidiar y nada que me envidien- saltaste a la cama y ves la botella que dejaste que los rayos de luna la iluminaran.

Una nostálgico recuerdo te invadió, al ver a tu madre ayudando te a preparar agua lunar, con tu hermano en sus brazos, esos años de tranquilidad, mucho antes que llegara tu hermana Flor y ella tuviera que irse.

Selene era su nombre, una mujer amable, amorosa y llena de gracia, tez blanca, cabello negro y rasgos finos. Recordabas como preparaban amuletos, regar las flores y hornear galletas. Ella ya tenía a su princesa y a su principitó, pero también quería una niña que sonriera como una flor.

Pensamientos y fragancias hicieron que durmiera profundamente.

9:00 am

La alarma sonó con una melodía de violín y metal te despierta.

-heeeeem, ¿Porque me tocó hoy? -te levantas perezosa, pues para ser fin de semana tenias que levantarte temprano para preparar el desayuno.

-Hoy are Hot-Cakes, la comida es primero, la flojera es para después - empezaste la mezcla y terminaste haciendo un par de docenas, para los dos hombres que comían como bestias.

Se escucho un sonido de puertas, era papá.

-Buenos días cariño - él besó mi mejilla.

-Buenos días- bostezo.

-¿Tu noche fue larga? - lo dijo mientras tomaba limonada.

-Un poco, aumentaron las personas con pesadillas. - respondí mientras cortaba las frutas.

-Lo se, he hablado con Aradia sobre eso y buscan a los responsables, además ¿alguien, fuera de lo usual vino anoche? -

¿Porque dios, porque diosa?
-Si un monstruo, pero mejor pon la mesa, mientras que despierto a mis hermanos.-

Vainilla y Cerezas (+18)G!Sansx(____) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora