Coffee (BTS + 18)

23

Con el fuerte ruido de la puerta Hoseok reacciona, no quería que esto terminara así.

Rápidamente se pone algo de ropa y sale corriendo en busca del rubio, importandole un cacahuete todo lo que le gritaba Taehyung en ese momento.

Cuando llega a la calle todavía se encuentra el carro de Yoongi estacionado, con un rubio intentando torpemente encender el coche mientras golpea el volante. Sin preguntar ni pensar abre la puerta del copiloto y se sube al asiento delantero, golpeándose mentalmente por no haber pensado en qué hacer después.

Apenas sube, el mayor le dedica la mirada más llena de odio y resentimiento que alguna vez haya visto. El rubio tenía los ojos llorosos y los puños rojos de tanto golpear el coche.

-Lárgate de aquí! No quiero volver a verte!
-Calmate Yoongi! No tienes que ponerte así!
-Que carajos esperas de mi eh! Te doy todo lo que puedo! Que tengo que hacer para que entiendas que me perteneces joder! Eres mio!
-No Yoongi no lo soy!!! No has tenido ningún derecho sobre mi desde que estas con Jimin! Que mierda te sucede!
-Sucede que te amo mocoso idiota! No puedes andar con otro pendejo cuando eres mio!
-Wow wow! Osea que yo no puedo andar con nadie pero tu si puedes estar de novio con otros?! No me jodas!
-Seok comprende que no puedo dejar a Jimin!
-Y porque no?!
-Ya no podría verte! No seas idiota piensa! Como se vería que rompa con Jimin para estar con su mejor amigo eh! Joderia todo! - el menor se quedó meditando lo que acababa de decir el rubio, era una verdad demasiado dolorosa para ser procesada fácilmente.
-Nunca dijiste que me amabas... - Después de unos minutos en silencio el menor lo rompe de la manera más incómoda que hay - Parece que tu eres el que no entiende... yo solo te quiero a ti... no quiero ser solo tu amante, quiero que me tomes de la mano, vayas por mi a la escuela, me hagas el amor... nunca seré tuyo si tu no eres mío - Estas palabras hicieron reflexionar a Yoongi. En mil sentidos estaba confundido pero de cierta forma encontró coherencia en las palabras de Seok
-Sabes... Yo tampoco lo sabía... hasta hoy... - Esto le dio un vuelco al corazón del menor, levantó la vista un poco y observó a un Yoongi pensativo viendo hacia la palanca de velocidades - Cuando vi tu cara al despedirte de mí y de Jimin yo... realmente me di cuenta de lo mierda que soy... A pesar de que me gusta el pequeño no es lo mismo estar sin ti... Realmente sentí la necesidad de mandar todo al carajo por un momento, pero ya fui demasiado egoísta como para hacerte eso a ti y a Jimin
-Hyung...
-La cague ok. No soy... alguien que haga lo correcto... No deberías estar con un pendejo egoísta... terminare consumiendote... - Lo último lo dice con voz cortada, Hoseok pensaba que en cualquier momento se desmoronaría, por lo que rápidamente toma el rostro de su hyung y le da un beso delicado y necesitado, como si quisiera borrar todos sus males con ese roce. Al separarse los dos observan las pequeñas gotas cristalinas sobre ambos cachetes, esto definitivamente terminaría matandolos
-Entonces consumeme Yoongi

...

Entran al departamento del mayor con un gran sentimiento de... desesperación? Los dos sentían que se ahogaban, tanto en sus propios sentimientos como en sus problemas. Estaban hastiados de todo a su alrededor, buscando ese elixir de salvación que solo les proporcionaba el otro.

Sus caricias no eran muy diferentes a las veces anteriores, besos humedos y mordidas de por medio, chupetones, apretones y rasguños que sacaban jadeos. Pero sin esperarlo, los dos logran liberarse un poco de todo lo que cargaban consigo durante la semana.

Cuando Yoongi comienza a introducirse en Seok este lanza un gemido tan delicioso como lastimero, de esos sonidos que denotan la liberación de un gran dolor. Yoongi esconde su cabeza en el cuello de su amante al sentir sus paredes cernirse sobre él, embriagándose del dulce olor del moreno, ese característico olor a madera y colonia que lo hacía delirar.