Capitulo 21.

122 14 6
                                    

¿Ahora que está pasando? ¿Que es lo que no recuerdo? ¿Qué rayos está pasando y porque mis amigas me miran de esa manera?

-¿tengo algo en la cara? -dije en tono sarcástico

-no es solo que... -Mari hizo una pausa y se acercó a mí- ¿no recuerdas nada? ¿En verdad?

-¿recordar que? -dije ya un tanto molesta por el drama que estaban armando- habla ya mujer

-está bien, te diré -se sentó a lado de mi cama y Kenia fue por Fernanda por si yo me ponía mal por lo que me dirían- solo que tienes que estar tranquila

-si no hablas ahora no me tranquilizare nunca -advertí

-bien, hace 7 años, cuando recién entrabas a preparatoria ocurrió un accidente, tus padres y tú iban a una fiesta en la cabaña del ajuzco y un camión se salió de su carril y los impactó, el auto en el que iban explotó y tus padres fallecieron.

No podía decir palabra alguna, como es que no recordaba la muerte de mis padres, como pudo pasar esto, porque me pasa a mi.

-aquí está la enfermera- dijo Ken entrando de prisa en la habitación

-¿___te encuentras bien? -se aproximó a mi lado y tomo mi pulso- tu pulso está agitado, háganme el favor de salir -les indicó a mis amigas

Después de que ellas salieran de la habitación fer me ayudó a tranquilizarme, nos pusimos a platicar de cosas agradables para que olvidará lo de mis padres, olvidarlo de nuevo.

▪️▪️▪️

Salimos de esa librería con el libro que nos dio Augusto, conducimos hasta mi casa, llegamos expectantes por todas las cosas que ese libro puede contener para que yo obtenga las respuestas a mi situación.

-Ma, ya llegamos, vamos a estar en mi cuarto -no obtuve respuesta- al parecer no está. Vamos chicos.
-¿Y si agarramos unas botanitas? -dijo Alan
-Bueno aprovechemos que mi mamá no está y veamos el libro en la cocina.

Llegamos a la cocina y mientras Alan preparaba unos Sandwich yo sacaba los vasos y el agua. Alonso hojeaba el libro.

-¡Que rollo! -exclamó Alonso
-¿qué pasó? ¿Encontraste algo? -nos acercamos a la mesa
-creo que encontré algo que nos puede servir -dijo mientras veía el libro
-¿qué encontraste? -le pregunté desesperadamente
-aquí dice algo sobre sueños donde se puede ver a sí mismo en otros lugares, como si... -leyó en silencio- ...como si hubiera estado presente.
-Alonso, eso no me ha pasado a mi -dije algo obvio- yo escucho la voz de una chica y hasta la... -me interrumpió-
-a eso voy. -continuó leyendo en voz alta- "estos sueños tienen conexión con escuchar la voz de personas, incluso experimentar momentos en los que se ve a quien le habla" -quitó la vista del libro y me miró fijamente- creo que estamos por encontrar la respuesta.

Fuimos al estudio, tomamos libretas y plumas, nos dirigimos a mi habitación y una vez ahí nos dispusimos a tratar de juntar la mayor cantidad de opciones para resolver mi situación.
Hicimos un orden de lectura e investigación. Alan estaría buscando en internet, Freddy vería documentales sobre vidas pasadas, Bryan investigaría en internet sobre los sueños lúcidos, Alonso leería el libro y yo estaría tratando de recordar cada cosa que me había pasado desde el accidente de la chica.

Y así nos fuimos rotando en las investigaciones hasta que se nos hizo de noche. Los chicos decidieron quedarse aquí en mi casa no nos imaginamos lo que pasaría.

Eran las casi 2 de la mañana los chicos estaban profundamente dormidos y yo ni una pizca de sueño tenía. Decidí recostarme boca arriba para ver si viendo el techo me daba algo de sueño. No sé cuánto tiempo pasó pero algo extraño comenzó a suceder.
Una extraña niebla comenzó a entrar por debajo de la puerta y una luz muy fuerte iluminaba mi habitación por la ventana, trate de despertar a los chicos pero no reaccionaban...

-Jos...

Ahí estaba esa voz de nuevo.

-Jos...
-Aquí estoy -conteste hacia la ventana
-Se que ya me encontraste...
-¿Como que ya te encontré?
-Si, pero ahora solo tienes que descubrir cómo hacer que estemos juntos...
-Como que juntos? Explícate
-Si eso quieres...

No pude articular nada más ya que me encontraba en una especie de cabaña, el ambiente estaba frío, tanto que todo se veía de color celeste. No se qué hago aquí, escucho ruidos, una mujer está entrando a la cabaña, en sus brazos trae un tipo canasto.

-Llegue amor -¿a quien le dice amor?- veo que ya te levantaste ¿cómo sigues? -se acercó hasta mí y tocó mi frente- la temperatura ya bajó, tienes que hacerme caso la próxima vez -dijo caminando hasta lo que supongo que es la cocina- acércate, dejé la comida lista.

No podía creer a quien miraba, era una chica igual que la paciente de mi hermana. Tiene sus mismos ojos y la misma voz, solo que su cuerpo es un poco mas fornido y tiene el cabello más largo.

Ella me sirvió la comida y hasta que ella se sentó me dispuse a comer. Es hermosa, ella me platicaba las cosas que había hecho en el día; mientras comía con una delicadeza, también aprovechó para regañarme por salir a cazar en plena lluvia.

Todo estaba tan tranquilo hasta que la paz y tranquilidad de nuestro hogar se interrumpió por unos fuertes golpes en la puerta

-Sabemos que están ahí, salgan ya -gritaba la voz de un hombre
-Salgan de ahí demonios -ahora gritaban dos mujeres- merecen ser quemados en la hoguera

-¿amor que está pasando? -le dije susurrando cerca de su oído
-piensan que somos demonios -contestó de la misma manera- por estar cerca de un percance, ahora nos quieren matar
-¿qué percance? -le cuestioné
-encontraron muerto al marchante del pueblo, tú estabas cerca lleno de sangre pues acababas de cazar, estabas cerca y pensaron que tú lo asesinaste, creen que eres un lobo -fue ahí cuando extrañamente vi las imágenes en mi cabeza- traté de hacer que cambiaran de opinión, pero Matilde la viuda del marchante me acusó de bruja
-por eso estamos aquí -ella asintió con lagrimas apuntó de salir de sus ojos, que a la vez reflejaban miedo- tranquila saldremos de esta

Entonces se abrió la puerta de golpe y entró una multitud de personas con antorchas, trinches y escopetas, tiraron la mesa y empezaron a romper y quemar todo a su paso, un hombre llegó hasta nosotros y tomó a mi esposa bruscamente

-ahora tú verás como matamos a este demonio y luego tú arderás en la hoguera para que sepas lo que te espera en el infierno maldita bruja

Levantó su escopeta y sin más disparó en mi dirección

-¡Nooo! -fue lo único que pudimos decir antes de que la bala de plata me impactará en el pecho y yo despertara

⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️⚫️
Hola mis bellos girasoles!
Como les va, les tengo este regalo bien grande, porque sé que las dejé bien picadas la última vez que actualicé.
Ya no las haré sufrir.
Díganme que les parece el capítulo, que piensan que pasara n los próximos capítulos...
Ah ya quiero saber, cuéntenme.
No olviden que las amo con todo mi corazón.
Me iré a seguir escribiendo, Marce🌻

Miradas. (Jos Canela y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora