NinjaGOD (A ninjago AU)

☀Entrenando☀

Los cuatro muchachos se encontraban parados al borde de la nube, observando con curiosidad a los mortales, mientras admiraban sus extrañas costumbres y dependencia hacia ciertas cosas.

- No lo entiendo - dijo Jay con un suspiro - de que te sirve un teléfono celular, si no sabes ser buena persona con los demás

- Pues en tus manos nada sirve - contesto Kai entre risas - lo sobrecargas y explota

- Agh

- Jajajaja

- Muchachos - replicó Nya con voz sería - ¿no deberíamos estar entrenando?

Nya se tomaba muy en serio su responsabilidad como guardiana; Wu les había dicho, que el elemento era el que escogía a su respectivo representante, por tanto, para ella era un gran honor el saber que su elemento pudo haber escogido a un hombre, y sin embargo fue ella la dichosa acreedora de tanto poder.

- ¡Ja! - exclamo Kai recogiéndose las mangas - ¿entrenar?, bien que te parece si primero calentamos un poco y así vemos de que somos capaces

La diosa del agua frunció el seño, pero al ver las miradas aprobadoras de sus amigos no tuvo mas opción que sonreír e ir con la corriente.

- Va - dijo entusiasmada, poniéndose al frente de sus compañeros - ¿Quién primero?

- Lo correcto sería empezar con el mayor, y como todos saben ese soy yo, así que háganse a un lado, verán lo que puedo hacer.

Cole dio un paso al frente y extendió las manos sobre la tierra, sus ojos se tornaron de un color café obscuro, y estos empezaron a brillar, su capucha se levanto de su cabeza y un temblor comenzó a sentirse; la gente de abajo corría despavorida, algunos niños lloriqueaban, mientras los chicos solo se sujetaban el estomago de la risa.

Después de 5 min de sufrimiento para los mortales, Cole paró y volteo a ver a sus amigos que no paraban de reír.

- Jajajaja, muy buena esa Cole, bueno, es el turno de Zane supongo

El muchacho de pelo rubio, volteo a ver preocupado a sus amigos cuando estos lo empujaron al frente gritando su nombre como vitores.

- No lo sé, no me gusta hacer daño a la gente, mucho menos a quienes se supone deberíamos proteger

- Oh vamos Zane - dijo Jay con una sonrisa burlona - no va a pasarles nada, a demás es solo un juego, el Sensei nunca se dará cuenta y no estamos lastimando a nadie, ándale, solo un poco ¿Si?

El dios del hielo lo miro con lastima, sin embargo, la mirada de su amigo era mas potente, y por tanto, este solo pudo dar un ultimo suspiro frió antes de voltearse hacia el borde de la nube.

- ¡Zane!, ¡Zane!, ¡Zane!

Sus ojos adquirieron un color blanco totalmente y su pequeña túnica, comenzó a ondear con el reciente viento frió que empezaba a sentirse; entonces, una diminuta nevada comenzó a caer sobre la gente, causando que muchos de estos comenzaran a tiritar como locos e incluso algunos a refugiarse en las tiendas mientras miraban para arriba confundidos.

- Jajajajaja

- Bien Kai, ¡Rematalos!

Kai, fue el tercero en aperecerse por este mundo y dada la coincidencia que pasaba de que su elemento y el de su amigo eran opuestos, causaba realmente divertido imaginar lo que sucedería ahora.

- Bien, aqui voy

A diferencia que con los otros, sus ojos se prendieron el llamas, al igual que su cabello y poco a poco, la temperatura fue ascendiendo, a tal grado, que las personas que se encontraban abajo, estaban quitándose suéteres, chamarras y cualquier cosa que les pudiera dar calor y no se viera tan mal quitarse en media de la calle.

- Jajajaja, bien Nya te toca

La diosa esta vez no titubeo y sin decir una palabra, se acerco a la orilla de la nube y todo su cuerpo comenzó a tomar una consistencia acuosa, en ese momento, una lluvia intensa empezó a caer sobre la tierra mojando a todos lo pobres que se encontraban en medio de la calle con casi ninguna prenda de ropa puesta .

- Jejeje, no te muevas Nya, voy yo

Jay se coloco al lado de la chica, y al ser el más joven de los cuatro el orden se había completado del todo. Sus ojos se pusieron de color azul eléctrico y su cuerpo emanaba pequeñas cargas de energía que salían en forma de rayitos. Entonces, lo que empezó con una pequeña lluvia, se convirtió en una gran tormenta eléctrica, que al igual que con Zane, obligo a todos  a correr y a refugiarse en las tiendas y casas cercanas.

 Los cuatro se morían de la risa, y después de casi 10 min de lluvia, los dos se detuvieron y se unieron al estruendo de risas con sus compañeros.

Estuvieron así un buen rato, hasta que una voz le paralizo el corazón a todos y un ligero sudor frió comenzó a escurrir por su cara.

- ¡¡Pero que creen que están haciendo!!, - la voz del Sensei Wu resonó en todo el lugar, causando que los chicos se pusieran de pie y se acomodaran sin siquiera pensárselo - pensé que serian lo suficientemente maduros como para poder tomar esta responsabilidad por su cuenta, pero en vista de que van a comportarse como niños chiquitos, serán tratados como tal. Los cuatro están castigados hasta nuevo aviso, a partir de ahora, el entrenamiento se hará dentro del monasterio y seguirían las instrucciones que yo les de, ¿Entendido?

Los pobres habían quedado totalmente avergonzados y con la cabeza gacha, así que lo único que pudieron decir fue un pequeño "De acuerdo" apenas audible.

- Bien, y espero no verlos comportarse de manera tan inmadura la próxima vez

Este se dio media vuelta sin decir nada más, dejando a los pobres con el corazón en la mano y un sentimiento de culpa impensable.