La mañana había comenzado, realmente no sé qué hacer, no tengo hambre ni ganas de salir de la cama. Mire el reloj y este apuntaba las 9:12 A.M. aunque no quería tenía que salir de la cama para poder iniciar con mi día.
Salí de mi habitación, me dirige al baño para cepillar mis dientes y lavar mi cara, al terminar baje hasta la cocina para preparar lago de comer.
Abrí la refrigeradora y esta se encontraba casi vacía, en su interior solo tenía leche y algunos huevos
<<¿Qué se supone que haga con esto>>
Saque la leche y la puse en la encimera de la cocina, empecé a buscar entre las repisas, encontré algunos plátanos, miel y jengibre. Saque todo y lo coloque junto a la leche.
<<Tengo una idea de lo que puedo hacer con todo esto>>
Me decidí por hacer un batido, no me vendría mal, saque mi celular y busque la receta. Empecé a prepararlo con ayuda de mi celular, según la receta el tiempo de preparación es de 4 a 5 minutos pero sentía que iba haciéndolo por más de 10 minutos.
Ya había terminado de prepararlo, se veía bien aunque espero que sepa bien. Saque un vaso de vidrio y empecé a servirme, estaba a punto de probar mi batido pero el sonido de la puerta me interrumpió.
Deje mi vaso en la encimera y empecé a caminar con dirección a la puerta, mire por el pequeño agujero de la puerta y divise a Benjamín, en seguida abrí la puerta y deje que entrara.
-¿Cómo amaneciste? –Pregunto mirándome de pies a cabeza
-Bien y ¿tu?
-Bien –Empezó a caminar por alrededor de la sala para tomar asiento en el sofá- ¿Qué estabas haciendo?
-Estaba preparando un batido –Dije con una sonrisa curiosa
-¿Un batido?, ¿Sabes cómo hacerlo?
-Tuve ayuda de mi celular
-¿De tu celular?
-Sí, ¿Quieres probar? –Dije apuntando la cocina
-Bien
Camine hacia la cocina y tome el vaso que se encontraba aun en la encimera. Volví a la sala y le entregue el vaso a Benjamín.
Benjamín empezó a mirar el vaso con tanta extrañes. Después de examinarlo por unos minutos empezó a beberlo mientras apretaba los ojos.
-¿Qué? , ¿No te gusta?
-Ah... ¿qué le pusiste? –Dijo aun con los ojos cerrados
-Pues... plátano, leche, miel y un poco de jengibre
-¿Puedo ir a revisar los ingredientes?
-Si claro
Caminamos hasta la cocina y al llegar Benjamín empezó a revisar cada ingrediente.
-Ahg! Ya encontré el problema –Dijo oliendo la leche
-¿Cuál es?
-La leche esta malograda
-¿Enserio? –Dije asombrado
<<No me había dado cuenta que la leche estaba malograda>>
-Bota esto, ya no sirve
-Bien
Tome la leche y la deje caer al lavadero, lave el embace y lo puse a secar.
-¿Qué harás ahora? –Pregunto Benjamín
-No lo sé, solo quiero volver a la cama
-Por qué mejor no te arreglas para poder salir
-¿Salir?, ¿Adonde?
-Ya lo veras, te ayudare a recuperar un poco la memoria
-¡SI! , iré a vestirme
Salí de la cocina con dirección a mi habitación, al entrar empecé a vestirme, al terminar Salí con dirección a la sala donde se encontraba Benjamín.
-¿ya estás listo?
-Sí, vámonos
Salimos de la casa y entramos al auto de Benjamín, me abroche el cinturón y empezó a conducir, el camino era largo pero me entretenía observando el paisaje.
Benjamín empezó a conducir cerca de un gran edificio abandonado que me parecía tan familiar.
<<Siento que ya estuve aquí>>
-¿Qué estas mirando?
Apunte el edificio que se iba perdiendo en la distancia.
-Creo que eh estado en ese lugar antes
-¿Seguro?
-Eso creo, no estoy tan seguro
-Quizá con el tiempo lo recuerdes mejor
-Eso espero