Una noche en el bosque.

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Estamos adentrándonos en el bosque creo que ya se le bajo el mal humor a Snape, en eso no me fijo por donde camino por andar observándolo y casi me caigo al tropezar con una raíz de árbol, de donde caracoles salió eso.

Snape: fíjate por donde caminas, o me vas a decir que eres medio miope- Nop, definitivamente no se le paso el mal humor.

Emma: lo siento – de verdad lo sentía... pero el dolor en mi pie, esa maldita rama me dio en la espinilla.

Snape: mejor quédate aquí no falta mucho para llegar a donde está la barrera, iré yo y veré que todo esté bien – me mira condescendiente – solo no hagas ninguna tontería en lo que no estoy

Emma: si señor – si me iba a dejar sin hacer nada para que chorizos me trajo, ufff no entiendo a este hombre, pero definitivamente prefiero quedarme en medio del bosque que estar con el

Snape se aleja y yo me siento junto a un árbol, trato de ver las estrellas, están exquisitamente hermosas esta noche, pero la vegetación me impide ver un panorama más amplio, por lo que camino un poco en busca de un claro, regresare en un momento, Snape ni se dará cuenta de que me fui, camino hasta visualizar un claro a lo lejos, así que corro a él, pero en el centro, hay un objeto extraño que llama mi atención, es como una piedra pero ovalada y bien definida, al acercarme visualizo que es un huevo, oooh no, es bastante grande, volteo alrededor, en busca de la madre, pero no veo nada, me pregunto de que será, acerco mi mano para tocarlo y al rozar la capa del huevo siento como una corriente se libera y recorre todo mi cuerpo, haciendo me caer al suelo sentada, no fue doloroso más bien, como revitalizante, como si hubiera cargado mi batería, bueno algo asi, estoy sonriendo como idiota al huevo, es completamente fascinante, en eso escucho un ruido a mi izquierda, volteo y una enorme bestia está a unos metros de mí.

Snape se aleja y yo me siento junto a un árbol, trato de ver las estrellas, están exquisitamente hermosas esta noche, pero la vegetación me impide ver un panorama más amplio, por lo que camino un poco en busca de un claro, regresare en un momento,...

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Es una especie de felino con cola de escorpión, nunca había visto algo igual, pero definitivamente no se veía para nada amigable, me coloque enfrente del huevo, no quería que le pasara nada, y sujete mi barita con tanta fuerza que la punta de mis dedos quedaron blancos, el miedo recorría todo mi cuerpo, pero no podía dejarme llevar por él, debía usarlo a mi favor para activar todos mis sentidos y sobrevivir a lo que sería una noche alocada.

El animal simplemente se acercaba cautelosamente, pero con confianza, este era su territorio y él lo conocía bien, y yo bueno yo estaba a punto de hacerme en mis pantalones y la verdad no se me ocurría ningún hechizo para matar una quimera mitad felino mitad escorpión, pero de algo estaba segura, debía cuidarme de ese aguijón .... Y sus garras... y sus dientes...mmm bueno de todo.

La quimera al evaluar la situación y ver que no era un gran oponente decidió atacar de manera frontal, yo al principio me congele no sabía que hacer casi vi toda mi corta vida pasar a través de mis ojos, pero no podía morir, ¡no así!, así que le lance un maleficio.

Emma: Expulso – le di en una pata, lo que le hizo que al elevarse diera vueltas en el aire, tome al huevo y lo sujete contra mi pecho con mi mano izquierda y con la derecha aun sostenía mi barita, la bestia cayo en sus cuatro patas pero algo aturdida, que merlín me ampare porque ahí viene y esa mirada que tiene me penetra hasta los huesos, llevándose gran parte de mi valor gryffindor.

Que me esconde tu mirada (Severus Snape)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora