5: Mamá regresa a casa.

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-¿Qué pasa? -cuestione inquieta, me urgía saber.

-¿Quieres cenar algo? -pregunto al fin.

¡Dios mío! Ni siquiera sabía que contestar. No podía negar que creí que preguntaría algo más... pero, ¿qué quería cenar? Eso era lo más tonto que había escuchado en siglos, bueno no, exagere. Pero si era lo más tonto.

-Amm... no, gracias, ¿tú?

-La verdad es que sí -Quito su mano de mi mano-. ¿Te gustaría acompañarme?

-Bueno, sólo espero que no tardemos mucho. La verdad es que ya tengo sueño.

-No, descuida.

Y continuó manejando. Estaba molesta... pero no con él, sino conmigo. ¿Por qué seguía siendo tan tonta de creer que él quería algo más conmigo? ¡Pff! Lo mismo que paso con Frank, cuando yo lo amaba él a mí no. Y cuando entonces por fin logre darme cuenta y me aleje... él comenzó a perseguirme. No me cansaba de reprocharme lo estúpida que a veces podía llegar a ser.

Llegamos al local de comida rápida y pidió comida china, me sorprendió que ahí la vendieran. Le dieron su orden y continuó de nuevo manejando está vez hasta mi casa. Llegamos y sólo por amabilidad lo invite a pasar, entramos.

-Tu cas es tan acogedora -dijo mientras se sentaba en el sillón.

-Lo sé, patrón -me burle.

-Lo siento -dijo apenado.

-Descuida, sabes que no hay problema. También es tu casa -reí.

-Menos mal, comenzaba a sentirme mal.

-Sí claro -comente sarcástica, reí y camine hasta la cocina por un vaso de agua.

-¿Y si vemos una película? -propuso.

-Me encantaría, pero mañana tengo que madrugar. ¿Recuerdas que mamá regresa de su viaje? Tengo que ir por ella al aeropuerto -le dije mientras me sentaba a un lado suyo y daba otro trago a mi vaso.

-¡Anda! -suplico- Sólo un rato -hizo cara de puchero.

-¡Quita esa cara! -grite- Te vez horrible y aparte no puedo resistirme -reí y le di una pequeña palmada.

-Lo sé, por eso lo hago -guiño su ojo.

-Está bien... veámosla -dije de mala gana.

-¡Genial! -tomo el control y comenzó a buscar los canales que más le gustaban, hasta que encontró una película... para mí mala suerte de terror.

-No Drake, sabes que odio esas películas -refunfuñe.

-Pero estoy contigo, aparte son películas...

-Aún así.

-No te preocupes, si tienes miedo sólo abrázame y ya -guiño de nuevo su ojo.

-Tú sólo quieres que te abrace -me cruce de brazos.

-También, pero así ya no tendrás miedo.

-Mmm... bueno -dije no tan convencida.

Comenzó la película y todo iba bien, hasta que comenzaron las escenas de terror que tanto odiaba y no me quedo más opción que abrazarlo, aunque me hice del rogar por un buen rato. Lo abrace y me perdí en su aroma, ya ni siquiera estaba poniéndole atención a la película... me había concentrado en otras cosas, en mis tontos pensamientos.

Mi celular sonó, sin mirar quién podía ser... conteste.

-¿Bueno? -pregunte adormilada.

-¡No puede ser! ¿Maureen, aún sigues dormida? -grito mamá furiosa del otro lado del auricular.

-No mamá -trate de buscar una excusa.

-¡Por favor Maureen! No me mientas, llevo diez minutos esperando a que vengas por mí.

Talle mis ojos y me levante, miré el reloj... ¡eran las once de la mañana! Y Drake estaba ahí dormido. ¿Qué? ¡Drake! Grite tapando la bocina del celular, sólo podía escuchar a mamá.

-¿Maureen? -preguntaba.

-¡Drake, despierta! Tienes que irte.

-¿Mande? -dijo aún adormilado- Mamá, cinco minutos más -decía entre sueños.

-¡Oye! No seas flojo -lo sacudí-, ¡ya despierta! -grite.

-¿Maureen, sigues ahí?

-Sí, lo siento mamá... pero diez minutos no es mucho, a parte ya voy para allá pero hay tráfico.

-¿Segura?

-Sí, de verdad. Dame unos minutos y estoy contigo.

-De acuerdo, no tardes.

-No -colgué.

-¿Qué te pasa? -pregunto Drake tallando sus ojos.

-Me pasa que voy a ¡matarte! Nos quedamos dormidos y olvide que tenía que ir por mamá, y ahora me llamo ya está esperándome.

-¿De verdad?

-No, sólo lo dije para que despertaras. ¡Claro que sí! -grite furiosa- Te dije que no podía desvelarme, ella va a matarme.

-No seas exagerada -decía mientras se levantaba y acomodaba sus prendas arrugadas.

-¡Claro que sí! Para mí malísima suerte mi auto está descompuesto, ¿cómo llegaré hasta allá en menos de veinte minutos?

-Asunto arreglado, yo te llevo.

-No, eso jamás... mamá creerá que tenemos una relación y seguro me avergonzará. No, definitivamente no.

-¡Hay por favor Mo! Complicas demasiado tú vida -negó con la cabeza.

-Es que tú realmente no la conoces.

-¡Vamos! ¿Qué tan malo puede ser? -sonrió.

-¡Pff! Creo que no tengo más opción, vayamos a mí perdición.

Arregle mi cabello, entramos al auto. Drake condujo hasta el aeropuerto para ser presisos en una de las puertas de llegadas, donde me había quedado de ver con mamá. Llegamos y si, efectivamente ella ya estaba ahí esperándome. Bajamos a saludarla, mientras Drake ayudo a subir las maletas.

-¿Él es el chico de quién me hablaste, Maureen? -dijo mirando a Drake, yo sólo me sonroje y él, bueno él como siempre sólo se burlo.

-No mamá -comenté entre dientes y entramos al auto, de camino hasta la casa de nuevo.

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Estoy de buenas y les dejo otro capítulo el día de hoy:). ¡Saludos!

You're The One. | Drake BellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora