-Sí claro -dijo mamá ya arriba del auto.
-Mamá por favor... no sigas -suplique.
-De acuerdo.
-Gracias -respondí sarcásticamente.
-¿Y cómo te llamas muchacho? -pregunto mi mamá a Drake.
-Drake señora, mucho gusto.
-El gusto es mío -respondió mamá-. De qué te quejas Maureen, si el chico que me dijiste, habías dicho que se llama Derek, ¿no? -me pregunto.
-¡Mamá! -tape mi cara con mi mano, de verdad me avergonzaba.
-Sí, ¡eh! ¿De qué te quejas? -recalco Drake riendo.
-Cállate -lo amenace, más roja que un maldito jitomate.
-¿Qué pasa? -pregunto mamá.
-¿Podemos hablar de esto luego, mamá? -respondí con otra pregunta.
-Mmm... está bien.
-¡Gracias! -grite.
-¿Y a qué te dedicas Drake? -le pregunto de nuevo mamá.
-Tengo una banda.
-¡Ah! Muy bien. Entonces no te conviene Maureen -me susurro.
-¡Mamá, ya! -le dije y Drake sólo se empezó a reír.
Para amenizar el mal momento Drake puso un poco de música y justamente en ese momento sonó una de sus canciones, que ni siquiera sabía cómo se llamaba, pero tenía mucho ritmo.
-Esa banda toca muy bien, tienen un sonido estilo Beatles -comento mamá.
-De hecho es mí banda -respondió Drake.
-¿En serio? -pregunto muy sorprendida mi mamá.
-Así es señora -sonrió.
-Entonces retiro lo dicho, Drake.
-No se preocupe -rio.
El tiempo se hizo menos con la música. Mamá ya no dijo nada y sólo se propuso escuchar, de hecho nadie más decía nada. Llegamos a casa y Drake ayudo a bajar las maletas del auto, pero ya no quiso quedarse más y aunque así lo hubiese querido... no podía, el trabajo le llamaba. Así que sólo nos quedamos en la casa mamá y yo.
-¿Qué tal estuvo el viaje? -le pregunte.
-Bien, cansado... pero bien.
-¡Qué bueno! ¿Quieres comer algo? -cuestione de nueva cuenta.
-Claro -acepto-. ¿Por qué ya no se quedo tú amigo?
-Tiene que trabajar, mamá.
-Amm...
Se quedo pensado o tal vez analizando la manera de cómo preguntarme más sobre él. Y de verdad deseaba que no lo hiciera, pero ya la conozco no podría quedarse callada y entonces, lo hizo.
-¿Te gusta? -pregunto se sopetón.
-¿Eh? -dije sin entender.
-Sabes de lo que hablo -y me señalo con su dedo.
-No sé... tal vez -respondí nerviosa... era evidente.
-Tomaré eso como un "sí".
-¡Ash! -bufé- ¿Pues para que ocultarlo? Es más claro que el agua.
-Lo mismo digo yo -afirmó.
-Pues sí, sí me gusta. Pero creo que yo a él no, ¿contenta?
-No. ¿Por qué piensas eso?
-Porque no demuestra nada.
-¿Y qué tal que piensa lo mismo que tú? O sea, le gustas... pero creo que él a ti no.
-No creo. Es demasiado inteligente, como para no darse cuenta.
-Pues todo puede suceder.
-¿Y cómo está la tía, Mary? -pregunte para cambiar el tema.
-Bien. Te manda saludos.
-Gracias -sonreí.
Y de nuevo la plática había terminado. Sí seguía hablando de eso con ella, sería un cuento sin final, le serví de comer y yo también, estuvimos comiendo en silencio.
Una semana pasó rápido y durante ella no vi a Drake para nada. Mamá me había convencido de viajar con ella una semana... para que estuviéramos juntas y visitar a mi tía. Yo no tenía nada más que hacer, entonces acepte, un día antes de partir... me quede der ver con Drake en un café para contarle.
-Lamento llegar tarde -le dije saludándolo, mientras me acercaba a la mesa donde estaba y él se levantaba.
-Descuida, no hay problema.
-Había un tráfico, ¡horrible! -dije agobiada y sentándonos.
-Me imagino. Siento que estos días han sido de locos.
-Sí, un poco. ¿Y cómo has estado? -pregunte.
-Bien... con demasiado trabajo, pero bien, gracias. ¿Tú?
-De maravilla, con mamá.
-Eso es bueno. Lamento no haberte llamado -se disculpo.
-Descuida. ¿Ya ordenaste?
-No, estaba esperándote.
-Bueno... pues hagámoslo, la verdad es que muero de hambre.
-¿Tú? ¿De verdad? -pregunto asombrado.
-Sí -reí.
-Eso es raro.
-Lo sé... tal vez quiera engordar un poco -me encogí de hombros.
-¡Eso sí me sorprende! -comenzó a reír.
Él llamo al mesero y comenzamos a ordenar. Más tarde nos llevo la comida, yo no espere ni un momento más para probarla.
-¿Y qué es eso tan importante, qué tienes que decirme?
-Bueno -le di una mordida a mi emparedado-. Me voy de vacaciones improvisadas.
-¿¡Qué!? -y me escupió todo el café que había acumulado en su boca, después del sorbo que dio.
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You're The One. | Drake Bell
FanficDicen que cuando estás destinado a la persona correcta... en algún momento de tu vida la encuentras. Y justamente así le sucedió a Maureen, por años pensó que su novio Frank era el "indicado" hasta que el destino le puso enfrente a Drake, las cosas...