🎭『Mad Hatter』; yk

Getting drunk with the blue caterpillar

Kim Namjoon había nacido en una familia rica.

Con sirvientes que le atendían, autos último modelo.

Se supone que un niño con todos los juguetes que pudieran darle, debería ser feliz. Pero él no lo era.

Todos los juguetes del mundo no iban a llenar el amor paternal que le hacía falta.

Namjoon siempre estaba solo.
Navidades, año nuevo, su propio cumpleaños.
Su madre había muerto al nacer él, y siempre creyó que por esa razón su padre lo odiaba. Tal vez por eso siempre lo golpeaba.

Así que se convirtió en el típico chico malo de la escuela. Empezó a escuchar rap, a hacer vandalismo y salir con amigos a beber, a drogarse. Ya que su padre pasaba de viajes  de negocios, hacía fiestas en su casa todo el tiempo. Era un galán entre las chicas. Había tenido sexo tantas veces que ya no recordaba cuántas.

Y todo eso seguía sin llenar el vacío que había dentro suyo.

Al volver su padre cierto día de un viaje, encontró la casa destrozada, jóvenes borrachos vomitando por doquier, y su hijo en el cuarto con una chica.

ㅡ¡KIM NAMJOON! ㅡgritó este.

Permaneciendo con una expresión indescifrable, despidió a la chica, que avergonzada tomó su ropa y salió de allí.

ㅡSi sigues teniendo esta conducta, jovencito, te echaré de la casa.
ㅡHazlo. Me harías un favor.

Su padre quedó pasmado un momento.
ㅡHijo...
ㅡ¡No me llames hijo! Sé que me odias, sé que tu vida sería mejor sin mi. ¡Sé que me gritas por acostarme con chicas pero tú haces lo mismo con cada una de las secretarias que tienes!
ㅡ¡FUERA DE AQUÍ!
ㅡ¡Te enojas porque digo la verdad! Pues ¿sabes qué, "Señor Kim"? ¡Hasta nunca! Me voy para siempre. Ojalá tu empresa quede en la quiebra y te mueras.

Dijo las últimas palabras con todo el odio que llevaba años acumulando.
El mismo día hizo sus maletas y se fue de la casa. No alcanzó a terminar la escuela.
Se hizo independiente.

Y desde entonces buscó un motivo para seguir adelante.
Trabajó donde quiera que necesitaban empleados. Al no tener dónde vivir, se quedaba con la hospitalidad de sus jefes, quienes lo dejaban vivir en sus casas hasta que fuera suficiente.

Sentado en un bar, solo pensaba en la mejor manera de suicidarse. Estaba solo en el mundo.
ㅡ ¿Qué va a servirse? ㅡpreguntó el barman.
ㅡ Algo que me mate o me haga olvidar todo.
ー Yo tengo de eso. ㅡdijo una voz cercana.

Era un chico más o menos de su edad, pensó. Tenía la mirada cansada igual que la suya. Sacó de su bolsillo una bolsa blanca.

ㅡ Ven. ㅡdijo.

Y Namjoon le siguió.
Ya en la parte trasera del bar, el chico habló.
ㅡ Un poco de esto y todos tus problemas se irán.
ㅡ Perfecto. Pero, antes de que pierda la conciencia, quisiera saber tu nombre.
ㅡ Ah, qué maleducado soy, lo siento. Jung Hoseok, 18 años. ㅡdijo estirando su mano.
ㅡ Kim Namjoon, 17 años.
ㅡ Namjoon, ¿te gustaría irte a la mierda conmigo esta noche?
ㅡ ¿Qué? ㅡcomenzó a reírㅡ. ¿Qué clase de propuesta es esa?

Hace mucho que no reía tanto. Se sentía extraño, pero feliz.

ㅡ Eres muy gracioso. Está bien, acepto.

Hoseok sonrió. Luego todo se volvió borroso.

Al despertar, no sabía dónde estaba. Le dolía la cabeza. Y la nariz le picaba.

ㅡ Ten. ㅡ alguien le tendió un vaso con agua, no supo quién era y solo aceptó.

Al ir recobrando la vista lo vió.
Un chico pálido, pálido como la nieve. De cabello verde. Estaba leyendo un libro.

Siguió paseando la mirada y encontró a Hoseok, tirado, roncando como un león. Hasta roncando era gracioso.
Sonrío y retomó su vista hacia el chico pálido.

ㅡ ¿Cómo llegué aquí?

El chico respondió sin dejar de mirar el libro.

ㅡ Qué molestia. Hoseok tiene la manía de llamarme cuando está drogado para que vaya a buscarlo. Pero jamás trae gente con él. Mucho menos le comparte mercancía. Así que debes ser especial.
ㅡ Eh... ¿Ok?

El chico dió un suspiro.
ㅡ Eh, por cierto, soy Kim Namjoon, tengo 17 años.
ㅡ Y qué, ¿te felicito?
ㅡ Sería genial, jamás me han felicitado.

El chico lo miró y sonrió un poco.
ㅡ Min Yoongi, 19 años. Es grandioso encontrar gente que entienda el sarcasmo. Solo por eso no te trataré mal.
ㅡ Una vez en la vida que me traten bien, no está mal.

Desde que encontró a dos sujetos tan deprimidos como él, extrañamente se sentía como en casa. Tiempo después se fue a vivir con ellos.

Y tiempo después, conoció a la princesa que le llenó el corazón.

***

Namjoon recogió los billetes.

"Qué sujeto tan desagradable." ㅡ pensó.

Sin embargo estaba feliz. No podía sacarse de la mente a ese chico.
Pero era un chico.

ㅡ Creo que soy gay.

Hoseok y Yoongi le quedaron viendo.
ㅡ ¿Y eso qué? ㅡdijo Hoseok.

Namjoon estaba un poco asombrado.
ㅡ Todos en el fondo tienen algo de gay.
ㅡ Mira, Nam ㅡdijo Yoongi, serioㅡ. Si algo he aprendido en mi corta vida, es que realmente no importa quién o qué es lo que ames. Solo lo amas y ya. Sea o no de tu misma raza o sexo, el amor es amor.

El niño pequeño que llevaba Namjoon en su interior, rompió a llorar. No porque se sintiera mal. Sino por todas las veces que se aguantó las lágrimas. Por todas las veces que quiso que su madre estuviera viva para apoyarlo. Lloró por su padre, por todas las navidades que pasó solo. Lloró porque era la primera vez en su vida que alguien lo apoyaba.

Y, sorpresivamente, cuando abrió los ojos lo estaban abrazando. ¿Quién dice que los hombres no lloran?
Hoseok y Yoongi habían pasado por tantas cosas como él. Y el abrazo sincero de unos amigos, era algo que jamás olvidaría.

Así que se propuso ser feliz con lo que tenía, y sin importar dónde estuviera, encontraría a su princesa.