2. Busan, año 1761

296 50 43
                                    

Seung Hyun llevaba casi cuarenta años pagando su condena, recorrió varias ciudades alrededor del mundo trabajando como ángel de la muerte, primero Londres, que fue la ciudad en la que murió, después lo mandaron a Chicago en USA, luego Europa, hace una semana estaba en Hamburgo cuando su jefe, Dong Wook, quien había ascendido de rango, le dijo que tendría una nueva transferencia, lo mandarían a Busan.

Cuando una parca no vestía su uniforme negro podía pasar como un humano cualquiera, las demás personas podían verlo y tocarlo. El primer día en Busan Seung Hyun se sacó su traje y se colocó ropa casual acorde con la época y el lugar y salió a recorrer las calles, recordó la infancia de su última vida y se sintió feliz, todas las transferencias anteriores las había aceptado casi por inercia, el solo iba a donde le mandaban con una actitud neutral, pero esta vez estaba contento, no era su ciudad natal, pero se sentía como en casa.

Una mañana estaba en su oficina sentado en una silla leyendo un libro, era su segundo día de trabajo allí y estaba aburrido, llevaba dos horas esperando y aun no recibía ninguna tarjeta con el nombre del alma que debería ir a buscar, al parecer aquella ciudad era un lugar tranquilo, dejo el libro en la mesa y se restregó los ojos, miro alrededor de su oficina en busca de algo que hacer, la mesita con los frascos de té, la taza y la tetera estaban relucientes, el piso también, se había aburrido el día anterior y había limpiado toda su oficina, dio un suspiro, si no recibía una tarjeta pronto se quedaría dormido allí encima de la mesa.

Iba a tomar de nuevo su libro y entonces la vio "¡Al fin!" pensó. Tomo la tarjeta negra que había aparecido de la nada en el centro de la mesa, la dio vuelta para ver la cara blanca del cartón, allí había un nombre escrito a mano con tinta negra.

"Kwon Ji Yong"

El corazón de Seung Hyun se aceleró en seguida, leyó el nombre unas diez veces antes de convencerse que estaba viendo bien ¿Seria el mismo Ji Yong? Él sabía que su apellido era Kwon, pero estaba rogando que solo fuera una coincidencia de nombres, no estaba seguro que debería hacer, por supuesto que debía ir por su alma, pero ¿Qué actitud debería tomar? ¿Y si se había olvidado de él? Le dio miedo que fuese el mismo Ji Yong y no lo reconociera, calculo rápido mentalmente, si era él ya debería tener casi sesenta años, seguramente ya se habria olvidado del anciano que conoció en su juventud, Seung Hyun podía entender si ya se había olvidado de él, pero le dolería mucho si ese fuese el caso porque el recordaba a su querido amigo todos los días.

Se metió la tarjeta al bolsillo y salió por la puerta de salida de su oficina, al otro lado había un camino de tierra, campos de arroz a su mano derecha y a su izquierda un gran portón de madera abierto de par en par, cerró la puerta a sus espaldas y esta desapareció en la nada.

Seung Hyun comenzó a avanzar por la gran entrada, un bonito jardín estaba allí y algunos guardias que no podían verlo, el único humano que podría verlo en ese momento era el Kwon Ji Yong a quien debía ir a buscar. Entro a la casa, era bastante grande, transito por encima del piso de madera y se detuvo en una puerta corrediza, el alma que debía recoger emitía una pequeña luz blanca que él podía ver a través de las paredes, por esa razón sabía muy bien donde debía dirigirse.

Atravesó la puerta como un fantasma y se encontró en una enorme habitación, al medio había un futón en el suelo y sobre este tapado hasta el pecho un hombre, sus manos estaban inertes sobre las mantas, estaba dormido.

Seung se acercó, a medida que lo hacia su corazón se aceleraba más y más, sus manos estaban temblorosas, cuando estuvo de pie frente al moribundo sus ojos se llenaron de lágrimas, su corazón dolió, pero no estaba seguro de porque, estaba tan feliz de verlo de nuevo, pensó que la última vez que lo vio en Londres sería la última, que ese había sido el adiós para siempre, pero por otro lado estaba triste, la piel de su amigo estaba muy pálida, Ji Yong parecía muy enfermo.

PsycheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora