The new little boy. [JENOxRENJUN] (NCT)

Capitulo 11.

Decir qué pasó algo más entre Renjun y yo esa tarde sería mentirles. El simplemente se limitó a separarse de mi y sentarse en el borde de la cama, su cara estaba marcada por una notable tristeza.

El simplemente se limitaba a no dirigirme la mirada.

- Hey, no tienes nada de que avergonzarte, ¿bien? -acaricie suavemente su mejilla con mi mano.

El agacho la mirada y yo me acurruqué para quedar frente a frente con el.

Puse mis dos manos en sus dos mejillas y pegue nuestras frentes.

- Me gustas, Renjun.

El pequeño levantó la vista, sus ojos estaban empezando a ser invadidos por lágrimas.

- Ren... me gustas, me gustas mucho... ¿que me has hecho? -dije mientras limpiaba una pequeña lágrima que resbalaba por su mejilla.

El se acercó a mí para besarme directamente, sin tapujos, sin pena alguna.

Toda la tarde nos dedicamos a estar acostados en su cama mientras veíamos como las gotas de lluvia caían y caían, tanto que pareciera que no fuera a parar jamás, ¿y saben? Eso era lo que más deseaba en ese momento. Tener a Renjun acostado al lado mío, de espaldas y yo abrazándolo por la cintura era lo más bello que podría estar haciendo. Al parecer el se había dormido, su cabello olía a vainilla y su piel tan blanca y suave.

"Dios, es tan perfecto".

POV's RENJUN.

Jeno se fue caída la noche ya que la tormenta era demasiado fuerte, así que preferí decirle que se quedara. Hicimos emparedados. Aunque creo que decir que "hicimos" es manada, el lo único que hizo fue untarme de salsa toda la cara.

En la mañana, de camino al instituto un Ferrari rojo se parqueo un poco adelante mío.

"Algún día de estos, alguien me va a terminar secuestrando" dije para mis adentros.

- Reeeeeeeeeenjun -dijo una chica asomando su mano.

Me acerqué para ver de quién se trataba. Era Wendy.

- Vamos, súbete, te llevo -dijo mientras bajaba un poco sus gafas para mirarme a los ojos.

- espera, ¿que? -dije nervioso- no te preocupes, el autobús pasara en unos minutos.

- El... ¿que? -dijo ella un poco desconcertada- olvídalo, súbete, si no lo haces, te obligaré.

"¿Acaso todas las personas ricas quieren que te subas a sus autos, y si no lo haces te cargan como bebe y te meten como costal de papas dentro de el?" Pensé, pero para evitar que eso volviera a suceder, simplemente accedí.

Cuando llegamos a la escuela todos nos miraban con una expresión de asombro en sus rostros, claro, desentonábamos en lo más posible, era muy gracioso, ella llevaba un pantalón bota campana con una blusa corta pero ancha, sus lentes de sol puestos y para completar, su bolso Luis Vuitton que hacía juego perfecto con su vestuario. Era sencillo, pero a la vez tan perfecto. Mientras que yo... bueno, no llevaba mi jean y una camisa manga corta que compre en oferta, no me avergonzaba, siempre me dio igual mi apariencia.

Reí por lo bajo.

- Ven, por acá. -dijo ella mientras nos dirigíamos a otro lado del parqueadero.

- P-pero los salones quedan por allá -dije señalando la entrada.

- non, mon amour, -dijo ella mientras me jalaba del brazo- aún no vamos para clase.