Breaking In Suicide Room

Capítulo 1

— Y eso es lo que me jode, no se cual usar — me encontraba con  una de mis amigas con su pc en mis piernas los dos sentados en las escaleras del segundo piso del instituto junto con otros de nuestros compañeros. Ambos vestidos me parecían absurdamente elegantes pero aun así le ayude a escoger.

— Karolina ¿de donde sacaron esto? — le pregunté cuando por accidente cerré la pestaña de los vestidos y me apareció esta cosa. Un video titulado "Mundo cerrado, heridas abiertas" donde (a juzgar por el grosor de sus brazos) una chica marcaba sus brazos con una pequeña cuchilla dejando que la sangre caiga débilmente.

— Internet — respondieron al unísono sacandome un bufido.

— Quiten esa mierda — gruñí regresando a la pestaña con sus vestidos. Sentí un empujón que me inclinó hacia adelante seguido de una risa particularmente conocida e irritante. Este maricon.

— ¿Qué haces lindura? — las chicas rieron mientras él se recargaba en mi como si fueramos amigos de toda la vida. Tratando de calmar mis impulsos asesinos por tirarlo al suelo y acabar con su existencia, tan giré solo sonriéndole con sarcasmo.

— Quítate de encima y por cierto, no me jodas durante las exposiciones, idiota — dije aún con mi sonrisa sarcástica, aunque hay que admitirlo voy mejorando esta vez no lo empujé. La última vez estuvimos apunto de golpearnos pero el director nos detuvo justo a tiempo.

¿Coincidencia? No lo creo, a menos que la coincidencia sea una Magda asustada, aunque se lo agradezco de lo contrario nos hubieran sancionado y hubiera tenido que pasar mas tiempo junto a este estúpido.

— ¿Sigues molesto por eso? — preguntó con supuesta inocencia logrando que Karolina y Magda suspiren con ternura. Ingenuas.

Él no es tierno, es un ser malvado que me acosa todo el maldito tiempo.

-— Me coqueteaste delante del rector y ahora piensa que somos pareja ¿qué esperabas? ¿un beso y un ramo de flores? — pregunté girandome hacia el completamentr olvidando que estaba basicamente sobre mi y que nuestras caras quedarían a una distancia muuuy poco prudente.

Al notarlo me sonrojé peor que tomate y regresé mi vista a la pc, bajo su risa burlona. ¿Ven por qué le odio?

— El beso suena tentador — susurró en mi oído sacandome de mis casillas, le devolví su portátil a Karolina y rodé hacia un lado logrando que Aleksander cayera de bruces al suelo, pero mi mochila amortiguo su caída. Mendiga suerte tiene el marica.

(...)

Cuando al fin logré salir de la manada de adolescentes lunáticos en busca de la salida del instituto, pude atravesar en paz la puerta hacia el estacionamiento pero mi paz no duró mucho porque ahí estaba él, con su par de lame botas uno a cada lado. Fingí no haberme percatado de su presencia y seguí caminando como si nada pero al parecer el sí notó mi presencia.

— ¿Vienes al baile conmigo princesa? — le escuche gritarme mientras bajaba las escaleras hacia el parqueadero. No pude evitar sentir la tentación de reírme, pero si lo hacía el lo tomaría como un sí.

— Vete a la mierda, tú y tus cosas gays — respondí girando levemente hacia él para luego mostrarle mi dedito de corazón junto a una mueca sarcástica. Sus acompañantes rieron lo que pareció molestarle ya que apenas pude esquivar el patinetazo que me había tirado. Pff que mala puntería.

Cuando logré acercarme lo suficiente al auto de mi chofer, Karolina se interpuso en mi calino ganandose una maldición mental. Sigo siendo acechado por el enemigo.

— Oye Dominik ¿tienes una cita para el baile? — dijo algo tímida no pude evitar sonreír. Esta trae algo entre manos.

— Quizá — respondí intentando aguantar la risa, es mi mejor amiga si me invita al baile es por la apertura o porque sus padres se lo pidieron.

— ¿Quieres ir conmigo? — preguntó con una sonrisa pícara lanzando miradas discretas detrás de mi, ya veo por donde va la cosa. A veces amo su mentalidad maliciosa.

— Quiza — volví a responder a lo que un gruñido confirmo mis sospechas, Aleksander esta detrás de mi. Ay mi querida Karolina.

— Te espero en mi casa a las 8:00 si tardas te castro — reí negando mientras me acercaba al auto de mi chofer.

— Nos vemos a las 8:00 entonces, espero y no te tardes tanto como la última vez — cuando él iba a interrumpirnos entré por completo al auto cerrando la puerta en su cara. ¿Quien se cree? ¿un Adonis?

Cuando llegué a casa, mis padres no estaban como de costumbre así que me dispuse a jugar videojuegos hasta que alguno de los dos apareciera con mi jodido traje de gala. Cuando empezaron a tardarse mi chofer me indicó que debíamos ir a la oficina de mi madre por el ya que ella esta en una de sus importantes reuniones.

Al llegar noté que la puerta de su oficina estaba cerrada, me deslize por la pared a mi costado y me senté sacando mi portátil.

Me encontre con el video de la chica con la cuchilla y por alguna extraña razón sentí el impulso de contradecirle, o simplemente ya me acostumbre a darle la contra a todo el mundo por culpa de Aleksander.

En el sector de comentarios escribí: "Mundo abierto, heridas cerradas" y cerré mi portátil. Ya no sé que hago con mi vida.

(...)

No noté que me había quedado dormido hasta que alguien llegó a despertarme, un empleado de mamá. Con todo el respeto que pudo me indicó levantarme y donde estaba mi traje.

Me cambié como si de eso dependiera mi vida aunque en vez de eso depende mi amiguito ya que faltan 45 minutos para las 8:00 y la casa de Karolina esta al otro lado de la jodida ciudad.

Estoy muerto, Dominik Jr esta muerto, estamos muertos.

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El primer cap, emocionense.

¿Les gusto este primer capitulo?

La canción me recordó a la pareja y pues ahí sta.

Y  eso es todo bye.

H.