¿A quién eliges? [Terminada] 💞

•13: Deciciones 😩•

Capítulo editado

—Adrien.

Dios, sentí que toqué el cielo cuando la besé. Fue maravilloso.

Se ve tan tierna con sus mejillas ligeramente rosadas, sus labios rosados ahora cubiertos por un labial rojo que te dan ganas de devorártela lentamente, sus ojos... esos ojos hermosos con ese brillo tan especial y único que sólo ella lo tiene.

Me volveré loco por esta chica Dios... ¡Ella es la que logra hacerme esto! Ella y sólo ella...

–¿Qué tanto me miras? —Levantó una ceja.

–¿Qué no puedo observar a la chica más guapa del mundo? —Se sonroja. Awww.

–No soy la más guapa del mundo, siquiera soy guapa.

–Oh, jamás digas eso otra vez, ¿Ok?

–Sí. —Dijo tímida.

No soporté más y la cargué. Ella enredó sus piernas en mi cintura y caminé hasta mi carro. Como pude abrí la puerta del conductor y me senté.

Ella se sentó en mis piernas y sonrió. Empezó a devorar (prácticamente) mis labios. Nos separamos y sentí estos hinchados. Menos mal que el auto tiene papel ahumado y es de noche 😅.

Y así pasó lo que pasó. Tuvimos un dejavú pero esta vez en el carro.

Sonreí al verla tan ajitada y rojita, que tierna

————Al día siguiente————

—________.

Me levanté de mi cama, fui al baño e hice mi rutina; después me puse una camisa sin mangas blanca con Dior Not War escrito unos shorts cintura alta negro, un suéter vinotinto, unas botas con tacón beige, mis lentes de sol y mis pulseras. Agarré mi mochila, comí y salí al instituto.

Llegué y vi que Adrien estaba hablando con Marinette, y, que ella parecía un poco molesta, después de que ellos hablaran, sonó la campana. Luego todos entramos y me puse en el pupitre de Nino, sí, al lado de Adrien.

En momentos de clases, Adrien me agarra la muñeca o me la acaricia, pero, me parece que a Marinette no le mola la idea.

Al fin, ya habíamos salido de clases, lo bueno que, dentro de poco vamos a salir, ¡Sí! Yo cuánto espero ese día.

Hoy yo y Adrien nos fuimos a mi casa, después de varios minutos, me besó y se fue, dejándome sola porque mi mamá llegaba la semana que viene.

Hace una semana que mamá se había ido a Londres por la boda de mi tío Hernesto, me quedé sola.

Estaba comiendo helado cuando me llama Alya, contesté.

–Ven a mi casa y deja de comer tanto helado porque te vas a poner gorda.

«¿Cómo lo sabe? ¿Es bruja acaso?»

–Bueno, ya voy...

Corté la llamada y dejé el helado en la cocina. Subí y entré a mi habitación.

Me duché, me enrrolé en una toalla y salí a mi habitación, después de varios minutos buscando que ponerme, me puse unos jeans ajustados negros, una camisa blanca algo suelta y mis Adidas blancas. Agarré mi bolso y coloqué mis cosas importantes, como el celular, mis audífonos, algo de maquillaje y mis lentes de sol.

Mientras caminaba a la casa de Alya, me llegó un mensaje.

«¿Quién será? Bah, de seguro es mamá»

Pero lo que no sabía ella es que no era su mamá... 😵