Detrás de la máscara (TERMINADO)

Capitulo XXIV

PoV Adrien

Recapitulemos. Fui a visitar a Marinette porque... bueno porque la quería ver. Y conversamos y nos besamos, no hay nada comparado a eso, es una de las mejores sensaciones que he experimentado. En una de esas lo hubiéramos llevado al siguiente nivel si su mamá no hubiera llegado.

Logré esconderme a tiempo, por suerte. Pero luego escuché que Marinette conversaba con alguien de voz ronca, no femenina, no era su mamá. Me quedé escuchando con cuidado sin perderme nada.

Era Claude, fue akumatizado. Este ya sería el segundo akuma que he provocado yo, si no me equivoco. Y ambos por celos. Y ahora estaba ahí amenazando a Marinette. No me podía quedar de brazos cruzados, así que salí a confrontarlo. Protegí a Marinette de ese rayo que no sé qué es lo que hace, y traté de resistir lo más que pude. Hace mucho que esperaba luchar con él para darle su merecido. Pero creo que me confié mucho, pues me lanzó contra la pared dejándome tirado en el suelo.

En eso levanto la mirada y me ciega una luz brillante de color rojo. Cuando se apagó vi a Ladybug. Esperen, ¿Ladybug? Si, Ladybug. Todo este tiempo mi compañera de batalla era Marinette, la chica que amo. Aunque ahora que lo pienso, siempre la he amado, siendo Ladybug o siendo Marinette. Y yo que antes estaba tan confundido de que haya estado enamorado de Marinette y de Ladybug cuando ¡eran la misma persona!

Ladybug, o Marinette, no sé cómo debo llamarla ahora, salió detrás de Claude. Debo ir tras ellos, debo proteger a mi Lady, o mi princesa. ¡Agh! Esto es tan confuso. Si claro, tienen el mismo color de pelo, ojos, piel, la misma estatura y contextura pero... sus formas de ser son muy distintas. Aunque este último año Marinette empezó a actuar más como Ladybug siendo sincero, no tartamudeaba cuando hablaba conmigo y se hizo más cercana a mi. ¿Tendrá esto algo que ver?

Además, ¿por qué no me contó nada de esto? Nos besamos, íbamos a ser novios, bueno, no sé, pero me gustaría que lo sea. No me importa si no me contó quién era, yo la amo igual. Quizás tiene una buena razón para no contarme, ella no lo hubiera hecho para herirme, yo la conozco, a sus dos versiones.

Y esas dos versiones ahora están en peligro, y yo aquí debatiendo algo sin sentido.

Me levanto con dificultad. Al parecer caí sobre las tijeras de Mari, ¿por qué tiene las tijeras afuera? Trato de sacármelas con cuidado tratando de no agrandar la herida. Fue cerca de la columna, espero que no haya dañado algo importante.

Salgo por la ventana y corro por los techos de París en busca de ese dúo, pero no los encuentro por ningún lado. Espero que no sea tarde.

Entonces escucho un grito de parisinos huyendo probablemente del akuma, esa es una de los beneficios de que haya gente en el lugar de ataque, te indican donde es.

Voy rápidamente a la zona. Al parecer están luchando en el pueden frente a la escuela y la casa de Marinette, y yo que me fui al otro lado de la ciudad.

Claude estaba encima de Ladybug acorralándola sin dejarle escapatoria, iba a disparar.

-Pero no en mi guardia- dije para mí mismo y salté alejando a Claude de Ladybug- Y nos volvemos a encontrar.

-Ya es segunda vez que fastidias mi plan, es momento que te ahogues con los peces- me dice alejándome cerca de la orilla del puente. Casi me caigo.

-No gracias. Yo prefiero comerlos- le dije y ataqué de nuevo. Un rato después se unió Ladybug a la pelea, dejando a Claude en desventaja.

-No quería hacer esto- dijo alejándose de nosotros cerca de los ciudadanos- Ahora ustedes me van a adorar, y seguirán mis órdenes- dijo y empezó a disparar los mismos rayos que había intentado dispararle a Marinette.

Al parecer esos rayos hacen que las personas caigan enamorados por el portador y hacen todo lo que él diga, es decir, ¡este imbecil quería quitarme a mi novia!

¿Y ahora qué hacemos?- le pregunto a Ladybug mientras me acerco a ella.

-Debemos de quitarle el akuma del collar. Y así lo derrotamos a él y salvamos a los ciudadanos- me dijo decidida.

-Me encanta cuando te pones así, princess- le digo acercándome a ella sonriendo causando un leve sonrojo en su rostro acompañado de una sonrisa.

-¿Y yo en qué estaba pensando?- me dijo refiriéndose a la relación que tiene conmigo en son forma civil.

-Oh, vamos. Sé que te encanta estar conmigo- le dije coqueto. Estaba a punto de contestar cuando recibe un golpe que la deja inconsciente en el suelo.

-Así está mejor- dice limpiándose las manos- Ahora, estamos solos tú y yo, gato. No va a estar ella para poder salvarte esta vez. Sin ella no eres nada.

-Puede que sin ella no sea nada, ella es lo único bueno qué hay en mi vida, pero te aseguro que te voy a moler a arañazos- le digo y me abalanzo contra él con todo lo que tengo.

La adrenalina recorre todo mi cuerpo. Ni siquiera soy consciente del dolor que tengo en la espalda, lo único que me importa es poder derrotar a este akuma que está causando mucho más daño que otros. Encerrarme en un congelador es una cosa pero meterse con mi Lady es pecado, y lo va a pagar caro.