Detrás de la máscara (TERMINADO)

Capitulo VI

PoV Adrien

¿Adrien? ¿Sólo Adrien? Alya su mejor amiga y Nino uno de sus mejores amigos pero yo ¿solo Adrien? ¿Y quién es este chico? ¿Por qué se lleva tan bien con Marinette? No tolero verlos juntos.

Además, no creo que él venga con buenas intenciones. "Hola, preciosa", blag. No sabe poner sobre nombres. ¿Qué es eso? "Preciosa", es mucho mejor "princesa", ese si es un sobre nombre. O apodo, no sé.

Pasé toda la tarde en clase escuchando como Marinette conversaba con Alya sobre ese tipo Claude. De verdad que me cae mal.

Iba terminado la clase cuando se escucha una explosión. Todos corrimos a ver qué era lo que ocurría. Era un akuma, bastante grande. Estaba atacando en el puente que está al frente de la escuela. Nos hicieron evacuar y pidieron que nos vinieran a buscar.

Yo me fui corriendo pero para transformarme en Chat Noir. Con toda la multitud no pude encontrar un lugar para transformarme hasta que encontré un callejón bastante oscuro.

-Plagg, hay que transformarme- le dije despertándolo.

-Ya voy- dijo levantándose- Oye, ¿por qué la cara larga?

-Larga historia. Ahora, Plagg, la garra- dije y me transformé en Chat Noir. Salí corriendo al puente. Me quedé mirando el cielo o los tejados para ver si Ladybug venía en camino.

-¿Me buscabas?- me preguntó saltando encima mío. Se detuvo en frente y se me quedó mirando. Se veía muy bien con los rayos del sol reflejados en su cabellos.

-No, es un lindo día para observar en ambiente. Pero ahora que llegaste, podemos encargarnos del akuma.

-Claro- me dijo sonriendo y se dio vuelta a ver el akuma. Era un gigante, no sé porque, pero Hawkmoth lo transformó en un gigante.

-Yo soy Enormus. Y voy a convertir a todos en unas hormiguitas- dijo el akuma amenazando a todos que lo rodeaban.

Lanzó un rayo rojo a una chica y esta se encogió definitivamente en el tamaño de una hormiga. Todos empezaron a correr desesperados por todo el lugar.

-¡¿Cómo vamos a vencer a esa cosa?!a preguntó Ladybug.

-No me mires a mí, tú eres la de las ideas- le dije y ella frunció el ceño.

-Gato flojo- dijo mirando a otra parte.

-Perdón. No tuve un buen día- le dije y ella me miró cariñosamente.

-Estoy segura de que todo estará bien, no te preocupes- me dijo rascándome detrás de las orejas de gato.

-Eres la mejor ¿lo sabes?- le dije y ella se sonrojó.

-¡Ladybug! ¡Chat Noir!- nos llamó la atención Enormus.

-¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué atormentas a estas personas que no te han hecho nada malo?

-¡Tu no sabes nada! A ti no te llaman todo el día pequeñín, o enano, o hobbit. Es molesto que te desprecien por tu tamaño. Es por eso que haré a todos pequeños como hormigas, nadie será más grande que yo.

-Oye, sé que las personas pueden ser hirientes y molestosas pero eso se puede resolver si lo discutes con ellos, no convirtiendo a todos en hormigas. Esto no te hará sentir mejor- le dije.

-¡Mentira! Lo dicen solo para que ustedes ganen. Van a seguir molestando. No van a poder detenerme- nos dijo y atacó con sus rayos rojos. Ladybug y yo las esquivamos, pero venían muy rápido, era difícil.

-¡Mira!- me dijo Ladybug- Tiene una muñeca en su mano. Quizás ahí esté el akuma- me dijo y yo asentí. Me acerqué a él corriendo. Traté de quitarle su muñeca pero él lo hacía imposible. Es por eso que Ladybug empezó a distraerlo.

Pero no me podía concentrar, la iban a achicar si algún rayo la atrapa. Y todo sería mi culpa. Perdería a la mejor chica que he conocido, no puedo dejar que eso ocurra.

Corrí y rasguñé la mano donde tenía la muñeca. Se la tiré a Ladybug y ella no rompió. De ella salió una mariposa negra. Ladybug la purificó y Enormus dejó de existir.

-Lo hicimos- dijimos ambos al mismo tiempo chocando puños. Resulta que era solo un niño al quién sus compañeros molestaban en clase. Supongo que es molesto, yo en realidad no lo sé. Recién empecé a socializar con chicos de edad el año pasado.

-Oye- le dijo Ladybug estrechándole su muñeca- Creo que esto es tuyo- le dijo y el niño tomó la muñeca con una sonrisa y corrió donde sus padres.

-Es muy tierno- le dije acercándome a ella.

-Si- dijo pensativa- ¿Tenías problemas con tu nueva novia?- me preguntó de repente.

-Eh... no. Pero ahora que lo dices, se me hace tarde. Si no llego me va a matar- le dije y ella rió.

-Bueno. Hasta luego- me dijo y yo le sonreí. Me fui vi con ayuda de mi bastón a mi casa. Me destransformé y busqué qué ponerme para la cena con Chloe.

-Oye, tranquilo- me dijo Plagg. Al parecer estaba lanzando todas mis poleras afuera del closet.

-Perdón, Plagg. Es solo que ese chico que conoció Mari me cae muy mal.

-¿Ah si? ¿Por qué?- dijo tratando un trozo de queso.

-No lo sé. Hay algo de él que no me calza. Estoy seguro que esconde algo.

-¿Qué va a esconder un niño de 16 años? Estás exagerando. A no ser...- me dijo y se acercó a mirarme los ojos- Estás enamorado de Marinette.

-¿Marinette? Pff... no. La que me gusta es Ladybug y siempre será Ladybug.

-¿Y entonces por qué sales con Chloe?

-¡Porque quiero sacarla de mi mente! Ella nunca me va a ver de otra forma. Aunque no me está funcionando mucho, cada vez que la veo los sentimientos afloran de nuevo y no puedo hacer nada con eso. Pensé que pasar tiempo lejos y estando en una relación me ayudaría pero me he equivocado, sigo loco por ella.

-¿Qué vas a hacer?

-No lo sé. Pero Chloe me está esperando, será mejor que me apure- le dije y me metí a la ducha. Me lavé el pelo y salí con la toalla alrededor de mi cintura.

Saqué una camisa blanca y unos pantalones de color claro y me los puse. Unos zapatos que mi padre me dio porque sobraron y listo, salí de la casa.

Caminé hasta llegar al restaurante. Ahí se encontraba Chloe esperándome. Me saludó animadamente y entramos al recinto. Presiento que ésta va a ser una larga noche.