Los ascensores son mágicos | Los Intocables #Extra1

Capítulo 8.

Hoy es un día especial, hace una semana Jack me había invitado a comer con sus padres y su hermana. Por eso, en este momento estoy en su auto, él toma mi mano durante todo el camino como ha venido haciendo últimamente.

Obtuve el empleo en Williams Corp. Jack asegura que no tiene nada que ver con que me hubiesen dado el empleo, dice que su padre no le pide opiniones sobre quien entra o no a su empresa, aunque sé que es una total mentira, eso me hace sentir un poco mal porque estoy actuando como Mitchell dijo que tenía que hacer, aunque sin llegar a la parte de acostarme con mi jefe.

Jack y yo salimos, demasiado. En las últimas semanas hemos realizado diferentes actividades, por supuesto sin descuidar mis estudios. El viernes pasado me buscó en la universidad y todas mis compañeras me miraban con envidia. De hecho, Mitchell estuvo llamándome los últimos días para según explicarle qué era lo que sucedía. Tendrán que imaginar que lo mandé a la mierda.

—¿Te sientes bien?—pregunta Jack al observar mi rostro.

—Estoy algo nerviosa.

—Tranquila, ya conoces a mi padre y mamá es un encanto. Mi hermana es un pequeño diablillo pero te ganaras su corazón si hablas de My little pony.

—No veo My little pony desde que cuidé a mi vecina.

—Pues no te vas a ganar a mi hermana si no hablas de esos ponys de colores—canturrea él.

Eso me pone más nerviosa. Quiero agradarle a su familia, no quiero que me vean como una intrusa. Creo que Jack está aprovechando su momento, la otra semana le toca a él con mi familia, mi madre lo invitó a cenar y sería gracioso verlo estar bajo presión gracias a papá.

Minutos después, Jack detiene el auto en una hermosa casa, tuvimos que pasar una zona de seguridad para luego entrar por un sendero de piedra rodeado de jardines verdes. La casa es demasiado grande, podría considerarla una mansión pero realmente no le quiero decirle así, es extraño hacerlo.

—Tu casa es preciosa—le digo mientras me ayuda a bajar del auto

—Gracias, pero si le dices eso a mamá se va a enojar. Odia esta casa.

—¿Por qué razón?

—Dice que es muy grande y hace separar a la familia—explica él a la vez que subimos las hermosas escaleras de piedra—. Si pides mi opinión, diría lo mismo. Solo somos cuatro personas, me mudaría pero quiero estar junto a mi hermana. Jane es mi adoración.

—¿Jack y Jane?—río un poco.

—Mamá tiene una fascinación por la letra jota y la de, según porque papá es Jon y ella es Diane. Mi nombre es Jack Darren y mi hermana es Jane Danae.

—Danae, que curioso nombre.

Él abre la puerta principal haciendo que choquemos con un hermoso pasillo. Esta casa es asombrosa, pero demasiado grande para cuatro personas, definitivamente. Jack mantiene su mano fija en mi espalda mientras caminamos hasta llegar a un hermoso salón. Una señora se encuentra reprendiendo a una niña de cabellos marrones, ella mira hacia nuestra dirección y juro que he chocado con unos ojos espectaculares. Son grises, muy grises, más que los de su hermano.

—¡Jacky!—Ella corre hacia Jack y se lanza sobre él haciendo que él la alce.

—¿Por qué mamá está regañándote?

—No me gusta este vestido. Yo quería el rosado.

—Pero el rosado es para la playa, cariño, hoy vamos a tener una cena con la novia de tu hermano.

Esperen... ¿novia? Vuelo a sonrojarme. Si fuera un deporte, ya tendría la medalla de oro. Jane voltea hacia mí para regalarme una hermosa sonrisa, en su dentadura hay un pequeño agujero que me indica que acaba de mudar un diente.

—Hola.

—Hola, Jane. ¿Cómo estás?—le devuelvo la sonrisa.

—Bien, ¿y tú? ¿Cómo te llamas?

—Muy bien. Me llamo Christina, pero puedes decirme Christie.

—¿Te gusta My little pony?—Escucho una risa soltada por Jack, pero lo ignoro.

—Tengo tiempo sin ver My litle pony pero aún me recuerdo de Fluttershy y Applejack.

—A ese si lo conozco, se llama igual que yo—Una sonrisa satisfecha aparece en los rostros de ambos hermanos.

La madre de Jack se acerca a mí para darme un abrazo. La señora Williams es hermosa y elegante, ya veo porque su hijo es de esa manera.

—Bienvenida, ésta es tu casa.

—Muchas gracias, señora Williams.

—Diane, cariño. Solo Diane.

—De acuerdo, Diane.

—¡Hola Christie!—El señor Williams se encuentra bajando las escaleras. Cuando llega a mí me da un abrazo.

—¿Cómo está, señor Wiliams?

—En casa soy Jon, cariño.

Fue un momento memorable. La cena fue extraordinaria y la familia de Jack es increíble. Son muy humildes a pesar de tener todo el dinero que poseen, eso me hizo gratamente feliz. Jack definitivamente es la copia de sus padres.

Cuando nos montamos en su auto, una sonrisa adorna mis labios. Realmente disfruté de esta noche. Jack vuelve a tomar mi mano y después la acerca a sus labios para depositar un beso en ella.

—Les agradaste.

—¿Tú crees?

—Sí, estoy seguro.

—Ahora que pasé la prueba, te toca a ti.

—Lo sé—suspira con un leve miedo en sus ojos.

—Te irá bien.

—Tu padre me da miedo.

—No te voy a mentir, papá será un grano en el trasero.

Les dejo el capítulo 8 :)

Disfrútenlo :)