Jimin estaba esperando a que Taehyung saliera de su última clase, hoy era viernes, y eso solo significaba una cosa...
¡Noche de chicos!
Jimin estaba muy emocionado, Taehyung le había dicho que ese día irían a ver la película que él quisiera, en verdad, estaba muy feliz.
Se entretuvo jugando con las mangas de su suéter azul claro, Tae tardaba mucho, iba a sacar su teléfono, cuando algo chocó contra él, o mejor dicho, alguien, aunque cuando logró estabilizarse del todo sus pequeños ojos no esperaban ver lo que veían.
Jungkook, el chico atractivo del curso inferior, estaba ahí, frente a él, pidiendo mil y un disculpas por haber chocado con él, aunque Jimin no prestaba atención alguna, estaba atónito y a punto de soltar una gran risotada, el "pequeño enemigo" de Taehyung, Jeon Jungkook.
Su vecino de toda la vida.
-Lo siento mucho, estaba distraído, lo siento, lo siento.
Jungkook estaba tan apenado, si no hubiera estado jugando Piano Tiles, no habría chocado con ese chico, aunque no había visto quien era, solo se había inclinado y empezó a pedir disculpas. Qué vergüenza.
- Ya deja de disculparte, eres patético.
Jungkook levantó la mirada de inmediato, esa voz, claro que la conocía, sus ojos se encontraron con los del más pequeño, y no pudo evitar relajar sus músculos, pensó que había chocado con alguien más, no con su amigo a quien no le dejaban que se le acercara. Sonrió de lado.
- El patético eres tú, que no haces nada para que tu novio te deje estar conmigo.
El menor dijo eso con un tono de burla, sabiendo que eso haría que Jimin se avergonzara, principalmente porque él aseguraba no ser más que amigo de Taehyung.
Jimin solo pudo sentir sus mejillas calientes y el calor subiendo a sus orejas, empezando a tartamudear mientras abría y cerraba su boca, iba a replicarle pero entonces vio como su amigo le sonreía y salía corriendo hacia la salida, sin dejar que corrigiera eso de "novio". Le iba a gritar que era un baboso hasta que sintió ruido del aula a su lado.
Taehyung salió de su clase a lo que tocaron el timbre, y se encontró con un Jimin mirando la salida con el ceño fruncido.
-¿Pasó algo, Minnie?
Jimin solo se aclaró la garganta y sonrió a su amigo.
- No, no pasó nada, ¿nos vamos?
El castaño asintió sin entender del todo, tomó la manito de Jimin, y empezaron a caminar.
Desde lejos se podía ver a un Jungkook mirando burlón toda la situación, de verdad que le gustaba molestar a Jimin, de regreso a su casa pasaría por la de Jimin para seguir molestándolo.
Re-subido 03/03/19
